Un concejal de Fuenterrebollo, primer aspirante a presidir el PP de Segovia

Posted By Redacción on 16, Abr, 2017

“Luchar contra la estructura” y “abrir a la militancia el coto cerrado que es el aparato del PP en Segovia” son las motivaciones del concejal de Fuenterrebollo, Enrique Jiménez Vaquerizo (en la imagen) para presentar candidatura a la presidencia del PP provincial. “Llevo 20 años en el PP, y en este tiempo siempre hemos tenido de presidente a Paco Vázquez. Hace dos semanas, con el congreso regional, un grupo de militantes me animaron, me lo he ido pensando, lo he consultado con la familia, y voy a dar ese paso”, explica.

Aunque alejado de los cargos de relevancia del PP segoviano, Jiménez Vaquerizo es bien conocido en el mundo del deporte segoviano. Este segoviano de 43 años, reside en Hontanares y es concejal de Fuenterrebollo, de donde eran sus abuelos. Es profesor de Educación Física en el instituto de Santa María la Real de Nieva. Preparador físico del CD La Granja y representante del CSIF en la Junta de Personal de Educación en Segovia. Acumula tres licenciaturas, es doctor en Ciencias de Actividad Física y Deporte, además de licenciado en Magisterio y en Educación Primaria. Desarrolla también una intensa actividad en redes sociales, con más de un millar de “amigos” en su perfil.

“Soy hijo de Guardia Civil, y profesor por oposición. Nadie me ha regalado nada. Nací en Segovia y me críe en Mozoncillo, pero mi pueblo es Fuenterrebollo”, cuenta. En el partido, ha participado en diversas ocasiones en la elaboración de programas electorales y afirima tener una buena relación tanto con Francisco Vázquez como con los militantes de a pie. Sabe que ascender en el partido desde fuera del aparato es cuasi imposible. “Creo que en cualquier caso hay que aprovechar las sinergias de apertura en el PP y dar al militante la posibilidad de votar”, dice.

Desde su puesto en la junta de personal ha vivido en carnes las políticas de recortes que han dejado en cuadro a la escuela pública y el desgaste que eso ha supuesto para el PP. “De todas maneras creo que el PP de Castilla y León es diferente, es más transversal y tiene cabida una mayor pluralidad ideológica. Algunos me dicen que si estoy a la izquierda del PP y los de izquierdas que soy de derechas, pero tengo claro que que en el día a día pesa la realidad y que, ante todo, defendemos un mismo proyecto político en toda España. No todos los partidos pueden decir lo mismo”, concluye Jiménez Vaquerizo.

Indefinición en el aparato

Su principal baza será la indefinición que rodea en la actualidad al sucesor de Francisco Vázquez. Autodescartado este por incompatibilidad con su flamante secretaría general de PPCyL, sin la baza de Silvia Clemente, igualmente elevada al número 3 de la región y concentrada en la preparación de elecciones, el relevo natural de Vázquez serían sus dos vicepresidentes en la Diputación, José Luis Sanz Merino y el actual secretario general, Miguel Ángel de Vicente. Ambos buenos conocedores de la realidad del partido, con trato directo sobre la militancia y experiencia en ganar elecciones. Sin embargo, en contra de ambos pesa la implicación en el Consejo de Administración de la extinta Caja Segovia. Como recordaba Fernando Sanjosé en su Tramoya: “El problema no está en la casa, sino en el juzgado número 5 de Segovia donde se sigue el caso Torreón de Caja Segovia”. Es un tema que de momento no afecta a los protocolos éticos del PP, pero podría. La fiscalía es partidaria de archivar la investigación, en tanto el juez insta a abrir diligencias y aboga por dilucidar la responsabilidad de la totalidad del consejo de administración. Por su parte, los dos políticos se defienden recordando que precisamente fueron denunciantes del caso, al considerar que desde la dirección de Caja Segovia se les ocultaron los informes que aconsejaban no asumir las deudas de Navicoas, mostrándoles exclusivamente los informes en sentido contrario.

Así las cosas, otro nombre que suena con fuerza como “reserva” es el procurador José María Bravo (en la imagen) y alcalde de San Miguel de Bernuy, igualmente bien valorado por la militancia y con buenas relaciones tanto en Valladolid como entre los alcaldes de la provincia. Otras opciones van perdiendo fuelle bien por su escasa popularidad entre la base -“solo van a los pueblos en campaña electoral”, explican en el PP segoviano-, o por incompatibilidad estatutaria, caso de los diputados nacionales.

Plazos y avales

Lo que está fuera de toda duda es que el aparato votará en bloque a quien Vázquez apoye y que el presidente se tomará su tiempo. Recientemente se celebró una reunión informal entre el presidente y su más estrecho círculo de colaboradores. “Hablamos de todo y ya al final le preguntamos por la presidencia. Nos dijo que era aún pronto, que tenía que hablar con gente”, cuenta un asistente al encuentro.

De hecho todavía no se sabe cómo será el congreso. Ni la cuestión clave para candidaturas como la de Jiménez Vaquerizo y otras del mismo tenor que puedan estar fraguándose: ¿cuántos avales se requerirán para devenir candidato en firme? De momento no están claros ni los plazos. Fuentes del PP hablan de primeros de mayo para abrir el proceso de presentación de candidaturas, de cara a un congreso que lo único que tiene es fecha, el 11 de junio.

Respecto a los avales, en los últimos congresos provinciales donde ha habido primarias el PP ha optado por ponerlo fácil a los pre-candidatos, reduciendo el número de avales, que es la herramienta que tienen los aparatos para blindarse de “asaltos al poder”. Así, en el reciente congreso provincial de Granada se optó por colocar el número de avales en 75. Aplicando la misma doctrina en Segovia con cuarenta o cincuenta avales sería suficiente para entrar en la liza. Todo indica, pues, que por primera vez en su historia, el futuro presidente del PP de Segovia deberá imponerse en primarias votadas por la base.