free web stats

Alcaldes con herencia y consejeros engañados

Gracias a los generosos pagos que recibo por mis colaboraciones en este periódico, a primeros de mes puedo permitirme el lujo hasta de subirme a la Plaza, como he hecho toda la vida, a tomar un café en un bar de los soportales. Son clásicos y ¡qué caray! buenos mentideros y a la vez que te mojas la nariz con la crema, pues oyes cosas.

En estas estaba ahí con el run run del que me ha parecido ser el anuncio del alcalde en conferencia de prensa de que no repetirá candidatura en las próximas elecciones. Bueno, con matices: si la ciudad no se lo suplica y si le gusta el candidato sustituto, que además va a proponer un nombre. Será por dejarlo todo “atado y bien atado” ¿A qué me suena esto?

Vale, pero es que llegaron dos del Ayuntamiento —tengo que poner interés por aprender los nombres de los concejales, que siempre me lío— que venían rizando el rizo: “Qué dice que se va, pero que se va ya, sin esperar un minuto. Que ha contado a algunos que está muy cansado, que tiene motivos personales para irse”. Chico. No podía estirar más las orejas.

Creí que tenía el notición del año pero al llegar a la redacción me han dicho que o confirmo eso por varias fuentes o no me lo ponen titulares, que en este negocio hay que tener cuidado con las filtraciones interesadas, que si no me acuerdo del pasado verano, cuando al mismo líder le dio la ventolera y anunció a sus chicos muy firme que se iba y luego se le pasó sin más…

Ahí mi jefe ha empezado a teorizar y ya no le he hecho más caso y me he sumergido en mis pensamientos. Mira que si el regidor se va ahora, según anda el PSOE; según está el grupo municipal socialista de egos, tensiones, dudas sobre el futuro y aspiraciones; según está la oposición, asfixiada por el yugo implacable… ¡Puñetas! Y mi jefe dice que no tengo pillada la noticia. Pues a mi me parecía buena. A ver en unos días.

Está bien, me dedico a lo que me han encargado, que es resumirles lo mejor de la semana que, fíjese, empieza en el Ayuntamiento y la aprobación de las escuálidas cuentas municipales para el año que viene. No llevan dinero y casi de nada, así qué la discusión política… pues muy flojita, que con que Peñalosa se abstuviera, bastaba. Y el de IU, se abstuvo. ¿O esperaba otra cosa?

Bueno, en realidad debería remontarme al fin de semana para empezar, porque hubo noticias políticas que parecían interesantes, pero luego, nada de nada. Hablo de la convención del PP, con amplia representación de Segovia, pese a lo cual, la comitiva dio poca chicha para la venta doméstica. Quietos todos. De momento, que también ahí hay nervios y un puñado de frentes abiertos.

También hablo de la renovación de cargos del consejo político regional de UPyD… Escasa difusión. Bueno, pues yo se lo cuento: tras votaciones a lista abierta y sin avales —proclaman que es democracia interna en estado puro— Gonzalo Aranguren y Jorge Hernández Barriuso ya están colocados en el máximo órgano entre congresos.

Una de pillada. La que resaltaba un diario local del jefe de los policías, Ignacio Coisidó, que hace unos días nos “colocó” cifras que no corresponden con las oficiales que han salido estos días. Ya advirtió cuando soltó las cifras que había mirado la cosa con premura y rápido, justo antes de hablar. Pues qué bien. Eso será respeto a la ciudadanía. De lo oficial, me quedo con la bajada generalizada en buena parte de delitos, salvo los denominados “violentos”. Pues eso.

Sin querer me he metido en el capítulo de sucesos y sólo puedo lamentar, como lo hace todo el pueblo de Cabezuela —lloré cuando oí en la radio llorar sin consuelo a la alcaldesa y procuradora, Ana Agudíez— la muerte de un hombre de 47 años y su hija de 7 por la mala combustión de la estufa con la que se calentaban. Me sumo al duelo desconcertado ante lo incomprensible.

Más fácil de entender es lo de las cifras del paro donde hemos sido los que más crecemos porcentualmente en todo el país, llegamos a 13.166 parados y no levantamos cabeza. Ya lo ve, remontando la crisis que dice el Gobierno. Debe ser que aquí vamos un par de años por atrás y que somos cochinillodependientes. Así nos va.

Por cierto, los autónomos también se nos caen, que hay cien menos y le advierto que están contados antes de conocerse el atraco a mano armada que se ha hecho a buena parte de ese colectivo con un incremento del 20 por ciento de sus cuotas… ¡Protesto!

Que si, que ya llego al “asunto” de la semana. Lo del desfile de personalidades locales —algunos lo fueron, otros siguen “en activo”— por el Juzgado a costa del uso del Torreón de Lozoya como aval. No he visto nada nuevo en las declaraciones —gran coordinación entre los consejeros que aseguran que les engañaron, que la unión es la fuerza— y sigo sin entender nada.

O yo soy muy corto o hay grupos de gente demasiado lista para mi nivel. Ahora entiendo que nunca me llamara nadie para ser consejero.

A ver si el juez me lo aclara. Pero déjeme jugar a adivino: la cosa se cierra sin causa penal para nadie y las batallas de los próximos meses o años, contra Bankia. Ya está, he apostado.

Por cierto, ríase: Bankia va y gana 818 millones este año. Hombre, si se tienen en cuenta las comisiones que se cascan, tampoco me extraña. Me pasa que cada vez se me hace más extraño el edificio de la oficina principal. No sé, antes me parecía entrar en casa y ahora me parece que estoy de visita. ¡Qué cosas nos pasan a los viejos!

Tengo que dejarle, que soy Home bueno de la fiesta de las Águedas de mi comunidad de vecinos y luego hago la misma fiesta en mi barrio, el pueblo de mi suegra y otro que me encuentre por el camino.

Menos mal que me gusta la dulzaina, la tajá y las mujeres con enagua, que si no…

Author: Justo Verdugo

Justo Verdugo, segoviano de cierta edad es un observador de su entorno y un ávido consumidor de las noticias que se publican en cualquier soporte y lugar. Con periodicidad semanal, el autor resume sus conclusiones en esta sección, en la que todos los ciudadanos están invitados a opinar a través de sus comentarios.

Share This Post On

Submit a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *