free web stats

San Roque vacuna a la Selección (otra aventura de Mortadelo y Filemón)

Hace unos meses escuchaba en la radio a un fulano, al parecer filósofo, hablando maravillas del inmenso y gran trabajo realizado por un comité bioético nacional para elaborar el plan nacional de vacunación. A modo de ejemplo, se jactaba de las 200 páginas del protocolo elaborado, muchas más que las de Francia o Italia (¡dónde va a parar!), sostenía satisfecho.

Claro, que un supuesto experto exhiba como calidad de su trabajo la extensión siempre me da desasosiego. Y me vino la premonición del jodimiento en ese mismo instante. De modo que me fui derecho al altarcito a la Virgen de Zaidín, del Carmen y San Roque, que tengo montado desde que empezara el covid, y me aseguré que la linternita siguiera alumbrando. 

Mañana me vacunan. Completo el ciclo. Pero como soy de los que se quedaron a medio vacunar de AstraZeneca me toca a mí –a mí- decir si me pongo esta o la otra. En la escuela una compañera, cargada de sentido común, se pregunta un tanto indignada que, caray, ¿no deberían ser los médicos los encargados de prescribirnos vacunas? Mi especialidad es la filosofía, de modo que me pregunto ¿qué hubiera hecho Platón? ¿Pfizer o AstraZeneca? (peor lo tiene el profesor de dibujo técnico, la verdad). Por si acaso, vuelta al altarcito no vaya a ser que le falte candela…

Llego a la conclusión a/ que da igual la marca de la vacuna dentro de un mismo espectro de tipología vacunales… b/ Qué hombre, poner por poner, mejor si empezaste con AstraZeneca seguir con AstraZeneca… c/ que como de  AstraZeneca hay poca porque la UE, al parecer con mucha razón se ha enfadado con la fabricante y ha cortado las compras… d/ en aplicación de a/, el ministerio dice que Pfizer, de la que hay más, mejor o igual…. e/ en flagrante contradicción o no con nosequé autoridad europea que dice que AstraZeneca  es igual o mejor…  f/ Miren… como esto es un lío (que diría Rajoy), que cada uno elija, que total, que uno arriba uno abajo, morirse se van a morir los mismos. Y “a quien San Pedro se la dé, San Pedro se la bendiga“. Colofón: me imagino al otro Pedro (Sánchez) tras escuchar el resumen del ministerio levantarse de la poltrona y aplaudir: ¡brillante, chicos, brillante! Lo hemos hecho otra vez… (y en solo mes y medio que se han tirado deliberando).

Sospecho que al final me enchufaré la vacuna que más rápido dispensen. O le pregunto al de Seguridad allí en el Pedro Delgado ¿tú que te has puesto? (y si le veo recio y fuerte pues esa, y si tose y está hecho un cromo la otra). Vale, cosas que pasan.  Lo que me encrespa es lo de la Selección Española. En serio. Escucho a un ministro de deporte decir que hablo de ello –habló de ello– con la ministra de Sanidad un jueves, que la ministra le dijo que lo pusiera por escrito, que el hombre puso el escrito el viernes, una semana –una semana– después de convocados los jugadores. Y que hoy les darán luz verde y se la enchufarán mañana. En el interin nos hemos quedado sin Busquets, sin entrenar, sin el España (absoluta)-Lituania, y con Albiol convocado. Si José María García no estuviera jubilado aquí dimitía hasta el bedel del Congreso (que es realmente el que manda). Y me pregunto en que parte de las 200 páginas del colega bioético sale una cosa tan obvia como vacunar a los futbolistas, la cosa más importante entre las cosas que no importan, es decir, el Absoluto. Porque para mí el fútbol es el Absoluto. Algo que probablemente no importa una mierda pero es superimportante.

Creo que realmente muchas cosas del covid se han hecho sin la menor previsión, al tragalaperra, a lo mecagüen y  salga el sol por Antequera. Uno es dolorosamente consciente de vivir en el país de Mortadelo y Filemón, también de que los ministros y políticos en general no son ninguna lumbrera… Es así, en España se improvisa. Pero, ojo, ¿también en el fútbol, en una competición fijada desde hace meses? ¿En el Absoluto?

Que el ministro, la enorme federación de Fútbol,  no tuvieran pensado con años de antelación qué hacer con la vacuna… Que tuviera que ser así en un encontronazo en el pasillo de ir-a-ver-al-jefe que el ministro le diga a la ministra, pasa tronca, que tengo a estos de la Eurocopa pendientes de vacunar, ¿cómo lo ves?… Que todas estas cosas sucedan no hacen sino ratificarme en que los ministros  son entes simbólicos, en realidad espectros que, siendo socialistas, a veces comparecen en la SER. Al parecer atraviesan paredes pero cuando intentan tocar algo no pueden y exclaman: “¡mecachis! Ya me ha vuelto a pasar…”

Aunque habrá de todo. Cuando ya me disponía a prometerle a San Roque un cirio de estos de los de cargar en carretilla como los de Santa María la Real si me libro del perreque, me entero que el G-7 (siete gobiernos de los que uno es Draghi -que Draghi es de Draghi- y el resto de derechas, ninguno de izquierdas, curioso, la verdad)  acaban de firmar un histórico acuerdo para igualar al 15% el impuesto de Sociedades, que es un primer paso en el camino que desde hace lustros debe recorrer la financiación pública: internacionalizar. Pero en España no se habla de eso. La razón a/ (y más creíble) es porque nuestros políticos no saben de esas cosas (y los que saben ya no están, Bárcenas, Rato, Pujol...). La razón b/ es porque los principales afectados en España son energéticas, bancos y Telefónica, gravados a unos tipos que ya quisiera para sí el más humilde de los autónomos… Y que, encima, el uno te cobra la plancha a precio de cojón, para que lo pagues por el banco, que te cobra otra comisión, mientras el tercero te cobra para que accedas a lo anterior… Y el Estado se lo mira sonriente viendo que, cuanto más gorda la bola, más IVA al cajón. Total, que mira más por mis intereses el Gobierno de Canadá que todos estos macarras…

Vamos… Que nada… Que mejor sigamos con el plan del cirio ¿no les parece? (Y de la Roja, pues a fiarse de Luis Enrique… A ver qué, sinó. Bien pensado, que sean dos cirios, dos…)


Author: Luis Besa

Luis Besa. Periodista,

Share This Post On

4 Comments

  1. Al Ejército tampoco se le ha vacunado. En qué manos estamos?

    Post a Reply
  2. Tan escandaloso es vacunar a la selección saltándose su cohorte de edad como cuando se vacunaban saltándose la cola todos esos políticos y familiares aprovechándose de su posición ….solo dimitió el jefe del ejército..el resto siguen en sus puestos…luego piden responsabilidad a la población…país bananero

    Post a Reply
  3. Decía el Campechano, que todos somos iguales, y un huev, yo soy partidario de recibir la vacuna por edades, por grave riesgo o por trabajadores esenciales, nunca por ricos, caprichosos, recomendados y de la casta.

    Post a Reply
  4. En plan de vacunación es una chapuza, se han dejado muchos grupos esenciales sin definir y los vaivenes con las vacunas han sido de vergüenza ajena, luego se lian a recomendar mezclar vacunas sin un estudio médico previo.. En fin, la frase “A modo de ejemplo, se jactaba de las 200 páginas del protocolo” lo explica todo, en este país valoramos más la cantidad de la calidad y así nos va

    Post a Reply

Responder a Salud Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *