El Obispado de Segovia ha hecho públicos los datos correspondientes a la Asignación Tributaria del IRPF de 2024, en los que señala que más de 33.000 contribuyentes de la provincia marcaron la casilla de la Iglesia Católica en su declaración de la renta. En concreto, fueron 33.375 declaraciones, lo que representa el 37,79% del total, una cifra superior a la media nacional, situada en el 30,08%. La cantidad asignada asciende a 1.321.064 euros, lo que supone un incremento de más de 129.000 euros respecto al ejercicio anterior, según la información difundida por la diócesis.
Desde el Obispado se subraya que esta asignación procede exclusivamente de una decisión voluntaria de los contribuyentes y que no implica aportaciones directas de los Presupuestos Generales del Estado. La diócesis señala que estos fondos permiten sostener la actividad pastoral, social y asistencial, incluyendo el acompañamiento a parroquias rurales, la conservación del patrimonio histórico-artístico, la acción educativa, la labor de Cáritas y distintos proyectos de evangelización y formación.
Asimismo, el Obispado agradece el respaldo recibido y anima a mantener la corresponsabilidad económica como vía para garantizar la continuidad de estas actividades en la provincia.
Críticas sobre el destino de los recursos
Tras la publicación de estos datos, se han hecho públicas críticas desde distintos ámbitos vinculados a la vida parroquial y social de la provincia, que ponen el foco en la distribución de los recursos y en la situación de la atención pastoral en el medio rural.
Estas opiniones señalan que, según el informe económico de 2024, una partida de 1.831.230,65 euros se destinó al sostenimiento del clero, en su mayoría sacerdotes jubilados, que perciben también pensiones del sistema público. Al mismo tiempo, apuntan al cierre de parroquias en distintos municipios, a la reducción de celebraciones religiosas y a la sustitución de sacerdotes por laicos en algunos actos litúrgicos.
Algunos de estos colectivos citan casos recientes en zonas como el entorno de Pedraza, donde varios pueblos han quedado sin sacerdote asignado de forma estable, lo que, según estas voces, incrementa la sensación de desatención pastoral en una diócesis con una alta dispersión geográfica y un proceso avanzado de secularización. También se han señalado los resultados económicos negativos de algunos centros diocesanos, como la Casa de Espiritualidad y la Casa Sacerdotal. Estas publicaciones reclaman una mayor claridad en la presentación de los datos económicos y explicaciones más detalladas sobre la gestión.














15 diciembre, 2025
¿Veremos algún día que sindicatos y partidos políticos viven de sus simpatizantes y afiliados como se lee exige a las confesiones religiosas en general y a la católica en particular?
15 diciembre, 2025
Lo que tienen que hacer, unos y otros, es pagar impuestos como ‘to dios’ -un decir, claro. Salvando estos y algún novio… 😉 – jajajajaja