O lo que viene siendo, reunión de escolares bajo el Acueducto. Los antiguos romanos llegaron a la conclusión que Rómulo y Remo fundaron Roma tal día como el 21 de abri de 753 (el año se inspira en los texto clásicos y el día en el culto de Pales, diosa de los pastores). Con tal motivo, y por cuarto año consecutivo, la asociación segoviana Anima Nostra, para la promoción de los estudios clásicos, efectuaba un llamamiento para dedicar una jornada, en este caso el 5 de abril, a realizar representaciones teatrales, visitas didácticas, y que tiene su colofón en una quedada bajo el Acueducto con los escolares disfrazados de griegos o romanos.
Una quedada exitosa. Sobre 1.300 escolares de Segovia, y hasta de Madrid, han participado este año en la propuesta. Al filo del mediodía del 5 de abril, hacia el Azoguejo segoviano confluían grupos de togados, “manipulos” de pequeños legionarios, laureados y césares, para éxtasis de turistas, especialmente chinos, empeñados en fotografiarse posando junto al pintoresco espectáculo.
Que tiene su sentido. Como explicaba Hugo Martín, de Anima Nosta, los estudios clásicos “viven una situación complicada, con cada vez más recortes en horas lectivas que reducen la presencia del latín y el griego en Bachillera y 4º de la ESO”. En el trasfondo, el distanciamiento de la sociedad frente a la tradición clásica, en la equivocada convicción de que son preferibles otros contenidos más instrumentales o “prácticos”. ¿Más práctico que entender que pinta el Acueducto en el medio de la ciudad? ¿Quién lo levantó? ¿De dónde sale el castellano? ¿Más práctico que dar la espalda a un milenio de conocimientos de los que han salido el derecho, las más de las letras, la filosofía y la ciencia? Osada es la ignorancia.”Roma y Grecia forman parte de nuestra idiosincrasia, son nuestro pasado y presente”, concluye Martín.
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