La plaza General Franco de la localidad de Cantalejo ya luce -37 años ha costado- su denominación “constitucional”, plaza de los Briqueros. Bajo un gran despliegue mediático, operarios municipales con el alcalde Máximo San Macario al frente (en la imagen inferior), procedieron ayer a descolgar las placas franquistas de ocho calles (“polvorosa”, en gacería) además de la dedicada a Franco, las calles Falange Española, General Mola, 18 de Julio, 17 de Julio, General Queipo de Llano y José Antonio, así como la calle Generalísimo, del pueblo agregado de Aldeonsancho, que pasarán a denominarse calle de los Novillos, El Viento, Siertería, Empedrada y calle Aranda de Duero, Villa Cuéllar, y El Panarro, respectivamente.
Con todo, la localidad seguirá conservando calles con referencias a la época franquista, como son las dedicadas a los generales, Varela y Moscardó, además de las plazas de Alemania, Italia y Alcazar de Toledo, o la dedicada al falangista Onésimo Redondo.
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