El alcalde del Real Sitio, José Luis Vázquez, avanzó su intención de recurrir la sentencia del Juzgado de lo Contencioso de Segovia que considera “no ajustada a derecho” la licencia de obras concecida por decreto de alcaldía a Shana Integral SL para la construcción de una clínica wellnes hotel (hotel centro de binestar) en la urbanización Caserío de Urgel. Vázquez añadió su convencimiento de que el nuevo revés judicial no modificará los planes de la empresa de construir en La Granja este complejo hotelero de alto standing, en el que se dispensa bajo control médico tratamientos de bienestar.
Caserío de Urgel es una exclusiva urbanización en la lado noreste de los Jardines del Real Sitio. En 2014, tras una modificación del Plan General granjeño, que entre otros aspecto multiplicaba ostensiblemente la superficie construible en las parcelas y modificaba los usos residenciales, se inició la construcción del complejo hotelero-sanitario en semisótano y planta baja de 5.723 metros cuadrados. Los vecinos, a través de la Comunidad de Propietarios Caserío de Urgel iniciaron entonces una triple acción legal. En primer lugar impugnaron la modificación urbanística, pleito pendiente de fallo. Tras la concesión de la licencia de obras solicitaron la paralización inmediata de las obras, alegando que afectaba a la tala de un bosque de robles centenarios, demanda que fue desestimada por el juez. En tercer lugar, el pleito que da pie a la presente sentencia condenatoria, demandaban la anulación de la licencia de obras por considerar que esta no se ajustaba a la finalidad real del proyecto impulsado por Shana Integral.
El juez ha estimado la demanda en su totalidad y condena en costas al ayuntamiento. El principal argumento es que, del análisis del proyecto de obra (cifrado en 3,8 millones de euros) se colige que casi el 90% se destina a usos hoteleros, siendo que la motivación de la concesión de la licencia era el “interés público” de la obra por su supuesto carácter sanitario. El juez considera que esta motivación y el proyecto presentado no se ajustan a los fines sanitarios sino que esconden un claro uso hotelero, no contemplado en la licencia.
El Plan de Urbanismo de La Granja contemplaba para la zona un bajo nivel de edificabilidad. La idea era propiciar en el corazón de la Sierra granjeña un entorno de élite. Todo discurría con cierta normalidad (ha habido otros pleitos por la prestación de servicios municipales en la zona) hasta que Shana Integral adquirió sendas parcelas, con unos 10.000 metros. Según explican en la comunidad de propietarios el ayuntamiento procedió entonces a sacar de ordenación las parcelas, diseñar un “traje a medida” que modificaba los usos -inicialmente solo residenciales- y los volúmenes edificables, y volverlo a meter en ordenació listo para acoger un equipamiento que prevé unos 30 puestos de trabajo.
Qué pasa ahora
La anulación de la licencia, de ser ratificada por la sala de lo contencioso de Burgos, obligaría a una nueva tramitación de la misma abriendo una nueva espiral de pleitos. La cosa podría complicarse aún más si la justicia vuelve a fallar contra el ayuntamiento en el recurso a la modificación del plan general. Entonces habría que re-remodificar el plan para legalizar el entorno, con otro caudal de pleitos de unos vecinos, los de Caserío de Urgel, que defienden la primacia de usos residenciales para una urbanización por la que pagaron, y no poco, con la idea de generar un entorno residencial de élite.
1 noviembre, 2015
El alcalde avanza su intencion de recurrir la sentencia, jajajajaja, eso creo que debe decidirlo el pleno del ayuntamiento, creo que este sera otro pufo que costara mucha pasta al ayuntamiento, que gran gestor, pozo de la nieve, campo de polo, gran ballet de corella, estatua ecuestre, puerta de la reina, pero no pasa nada el corriendo a hacerse fotos y a colarse donde no le invitan.
18 abril, 2016
La clínica revalorizará x2 el coste de las viviendas en la urbanización. Los dueños de esas viviendas deben ser unos necios que no comprenden que es algo bueno para ell@s. Si este país no estuviese lleno de personas envidiosas y poco formadas o inteligentes, nos iría mucho mejor a to@s. La clínica hará que haya más turismo en La Granja y por ello, más negocio y mejores prestaciones para todos. Lo que el alcalde debería hacer sería solucionar el problema del agua. Estoy comprando agua embotellada viviendo al lado de un pantano. Lamentable.
18 abril, 2016
Lo del agua toda la razón amigo, pero ¡Ay! de las revalorizaciones… Puede que lo único que quieran los vecinos (y las vecinas, sin arrobas) sea vivir tranquilos sin trasiego de visitantes clínicos ¿lo ha pensado?