Desde el 1 de febrero, el concejal de Frumales y diputado provincial Antonio Sanz es el octavo liberado de la Diputación de Segovia. La corporación ha aprobado una liberación del 70% (sobre 41.200€ de salario bruto anual) para Sanz, en el que el presidente delega las áreas de Contratación, Patrimonio e Innovación (nuevas tecnologías).
Antonio Sanz es un histórico del aparato provincial del PP (al que llegó en tiempos de Alianza Popular con Loyola de Palacio) y un profundo conocedor de la casa. Durante tres mandatos fue el brazo derecho y cargo de confianza de Miguel Ángel de Vicente, secretario general del PP, cuando este dirigía una macro-area que englobaba Cultura, Bienestar Social y Deportes. En el pasado mandato fue diputado provincial “de base” (sin delegación de funciones ni liberación).
Sanz se ocupará de los aspectos tradicionalmente más técnicos, como contratación y el patrimonio de la entidad. Según explicó “nuestra prioridad está en cuidar el patrimonio de la casa, por ejemplo, ahora con el PEAHIS hay que estudiar la afectación sobre el Esteban Vicente y tenemos varios casos así”. En contratación le esperan tareas como la dotación del palacio de Congresos o lidiar con la complicada situación de la finca de Quitapesares.
El incremento de liberados en la plantilla de la Diputación fue el aspecto más polémico en la tramitación de los presupuestos para 2016. El proyecto, aprobado con los votos a favor del PP y en contra de UPYD, Ciudadanos y PSOE, contempla la ampliación de siete a nueve el número de diputados liberados. Francisco Vázquez ofreció también a la oposición liberar algún diputado, propuesta rechazada por los tres partidos.
13 febrero, 2016
¿Otro Liberado?
¡No, Gracias!
13 febrero, 2016
Está debe de ser la ‘regeneración política’ de los dos grandes partidos. Los unos en el Ayuntamiento, los otros en la Diputación, aforando al sueldo… lo que se dice terminar sangrando (al personal a impuestos), no sea que se nos acabe el chollo.