Posted By Redacción on 1, Nov, 2019

Siete meses después, vuelta la burra al trigo. Al menos esta vez llovía, que es bueno para el campo. La “segunda vuelta” de Elecciones Generales comenzó en Segovia entre máscaras de terror y paraguas, apelaciones al vamos a ganar y los candidatos mostrando ya las cartas, las que quedan tras una larguísima precampaña en la que parece que ya poco más se puede decir. Que nadie se atreve a no hablar de pactos, que todos culpan al otro de haber llegado a la situación, y lemas renovados.

Empezando por el PSOE, que adelantó a las 20:30 el acto electoral en San Nicolás, y citamos literalmente, “para facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar ante la perspectiva del puente”, rezaba la nota. Los socialistas saltan a la arena luciendo Pedro Sánchez y el lema “Ahora sí”, con campaña de refuerzo para el Sánchez segoviano, Javier Lucia, el agónico dos al Senado, que aspira a revalidar acta junto con la prácticamente segura de Ana Agudiez. Para el PSOE de José Luis Aceves, repetir resultado de “fuerza más votada” sería el objetivo. Si de paso se consigue acta en el Congreso para Lucía Otones, entonces ya… Con que Vox crezca un poquito a expensas del PP y Ciudadanos se desinfle lo tendrían en la mano.

Llovía, así que la pegada digital de carteles del PP, habitualmente en la plaza Oriental, se llevó a cabo indoor, en los salones del Casares, con Paloma Sanz y Jesús Postigo ejerciendo de invitados ante la flor y nata del partido en camarederil hermandad. “Por todo lo que nos une”, y puede ser una impresión del que suscribe pero, así como el PSOE lo fía todo a Sánchez, en el PP parecen más empeñados en dar protagonismo a los candidatos locales, al menos tienen cartel propio. Campaña rara para Jesús Postigo, que lleva de dos a su anterior uno, Beatriz Escudero, y en la que no está claro que tecla tocar, si a la derecha para captar a una emergente Vox, si a Ciudadanos, estén donde estén, o desencantados de izquierda. Por si acaso, mucha Cataluña en los mensajes y la promesa de que con ellos, “eso no pasará”.

Ciudadanos fija todo su activo de campaña en Albert Rivera. Procedente del acto de campaña en Valladolid, y llegando tarde al acto de pegada en la avenida Acueducto, Eduardo Calvo, candidato al Congreso que se enfrenta a una reelección a cara de perro, contra unas encuestas que de concretarse dejarían al partido naranja para el desguace. El lema España en Marcha, con imagen central de Rivera centrando un equipo de colaboradores y el rojo y gualda bien fijado en el cartel.

Pero para rojigualdos y españoles, los de Vox. Rodrigo Jiménez Revuelta hizo espectacular entrada en el paredón de campaña a cubierto de la lluvia bajo un españolísimo paraguas. Foto de perfil de Santiago Abascal y lema España Siempre. Moral alta y dispuestos a dar la sorpresa de quitarle el escaño a Ciudadanos. Según las encuestas, lo tienen en la mano.

Y cierran turno los siempre sobrios de Unidas Podemos, con José Luis Ordóñez al frente. Sobrios en fondos pero no en lemas, que van con dos, el más vitola Podemos, Un gobierno contigo, y el más izquierdoso, Todo el poder lo público. Un puño abajo y un corazón verde arriba. Sin posibilidades reales de escaño, la coalición pugnará por un voto que engrandezca la izquierda y convierta en inevitable un gobierno PSOE-UP. Mucha gente de IU, poca de Podemos, entre el auditorio.

Conste que los candidatos no eran la única nota de colar en la noche segoviana. Después de todo, tal noche como esa es fama que las almas del purgatorio salen de sus tumbas para pedir misas que les acorten el tránsito. Valga el símil con los candidatos en pena, saliendo en día de ánimas para reclamar el voto. Quedan 10 días.

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