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Al Alba y con tiempo duro y viento de levante…

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Al alba y con tiempo duro, con levante (8 nudos con rachas de casi 22), una autoescala de bomberos apostada en el Azoguejo esperaba la llegada al punto de encuentro de casi 30 artilleros que en seguida tomaron posiciones mientras dos de los hombres se equipaban con arneses y otros refuerzos de seguridad antes de encaramarse a la escalera y ascender los 26 metros que les separaban de su objetivo: la imagen de la virgen, en la hornacina del Acueducto, y con movimientos casi coreografiados cumplieron su misión sin un solo error.

La operación, desarrollada en la madrugada de este 4 de diciembre, fue limpia, rápida, casi sin testigos —no existía ningún aviso previo— y de un rotundo éxito. Cuando el operativo desapareció de la plaza, la virgen lucía la bandera de la 305 promoción de la Academia de Artillería.

La bandera de los artilleros que se forman aquí este año vuelve a lucir en lo alto del Acueducto con motivo de la celebración de la patrona del Arma, Santa Bárbara y allí estará durante los próximos días, hasta que acaben las celebraciones, solo unas horas para minimizar en lo posible el “efecto lija” —en definición de la concejala de Patrimonio, Claudia de Santos— que la bandera pueda ejercer sobre la gastada figura.

Es la versión reducida, y pactada, de la “tradición” —ya se ha contado en este periódico que fueron Cirilo Rodríguez, Juan Bautista Mullor y el capitán Camiroaga los que se inventaron esto— que mantienen los alumnos de la Academia consistente en arropar con su bandera a la virgen. Antes se descolgaban por el monumento, ahora suben en la cesta de bomberos; antes la bandera estaba todo el año, ahora sólo unos días. Antes se hacía con estruendo y público y ahora se hace a las 6.30 de la mañana y sin aviso. Los tiempos cambian y el Ayuntamiento decidió la pasada primavera “proteger el monumento” modificando el formato, cuando retiró el distintivo una buena mañana generando una importante polémica.

Comunión con Segovia.

Lo que no cambia desde hace siete años es el acto de comunión entre la sociedad segoviana y “su” Academia que se celebra ante el público en la plaza Mayor durante el cual, 130 civiles han jurado bandera ante los artilleros formados y encabezados por sus mandos. El de mayor empleo, el general de división director de Enseñanza, Instrucción, Adiestramiento y Evaluación, Amador Enseñat y Berea.

La alcaldesa y el coronel Alonso esperan la llegada del general.

La alcaldesa y el coronel Alonso esperan la llegada del general Enseñat y Berea.

Hablando de mandos, entre los civiles, la alcaldesa y varios concejales del equipo de Gobierno junto a dos del PP. Ni rastro de electos con silla en las Cortes regionales y del Parlamento nacional, el popular, Jesús Postigo como único representante.

El Coronel Javier Alonso, en su última Santa Bárbara como director de la escuela militar, cruzó elogios y señales de unión y colaboración con la alcaldesa, Clara Luquero durante los discursos. Alonso remarcó la “formidable vinculación y permanente integración” del Arma con la ciudad y Luquero saludó 252 años de presencia de la institución en Segovia “que nos trajo la luz de la ilustración y la modernidad”.

La Academia, cuyos alumnos adquieren, por el hecho de serlo, vínculos de honor con la ciudad quisieron devolver el gesto y entregaron nombramientos de “Artillero de Honor” a la alcaldesa, Clara Luquero, como representante del Ayuntamiento; a la subdelegada del Gobierno, Pilar Sanz y al presidente de la Asociación de Periodistas de Segovia, Miguel Ángel López,  representando al colectivo de informadores segovianos, desde este 4 de diciembre, un poco más artilleros.

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Author: Redacción

Acueducto2. Noticias y actualidad de Segovia.

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5 Comments

  1. Esperemos que este año a la alcaldesa no le salga la vena republicana y ordene retirar la bandera de España.

    El año pasado esa inexplicable orden molestó sobremanera a muchos segovianos.

    En especial, a muchos votantes socialistas que quedaron atónitos ante una medida más propia de Esquerra Republicana de Cataluña que del Ayuntamiento de Segovia.

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  2. Si la próxima promoción de maestros decide poner una bandera , la Sr. Alcaldesa lo va a permitir?

    A parte de lo chocante de ver una bandera en este monumento aunque sea por pocos días.

    Luego se quejan de que el acueducto soporte muchos acto alrededor de él, pero este que si que es de riesgo, miramos a otro lado. Fuera tradiciones tontas y elitistas!!!!!!

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    • Diga usted, señor Rufián o Rufian, que no le gusta la bandera en el acueducto, por la connotación militar y punto. Hasta ahí se puede estar de acuerdo. Pero no esgrima que sea chocante una bandera en un monumento y menos con los colores de España y que si las promociones de maestros o de la escuela de hostelería… Es simbólico desde hace muchos lustros. Que se prohíbe, pues vale. Pero sin apostillar elitismos y clasismos majete!. Estoy hasta los mismos de ver trapitos de colores, un día sí y al otro también, en distintos monumentos, estatuas y cualquier farola, locales y nacionales. Ya ve, no me gusta y… me aguanto.

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  3. Por cierto era votante socialista. Recuerdo que el Sr. Peñalosa, escribió sobre este tema un buen artículo. D. Luis le echamos de menos..

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  4. Me perdonan la vida por colocar una bandera y concedo títulos de ‘Artillero de Honor’ (bueno, y ArtillerA, ya te digo). Artillero de lo que yo te diga había nombrado.

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