Posted By Natalia Del Barrio on 4, Ene, 2020

Ya estamos en el 2020, y la primera en la frente nos la hemos llevado los segovianos y abulenses, con ese aumento del peaje de la AP6, AP51 y AP61, que como si de una inocentada se tratara se publicaba en el BOE el 28 de diciembre.

Se pasó la oportunidad de liberalizar una autopista que siempre estuvo en entredicho. Tan entredicho que la propia Unión Europea sentenció que se había cometido una ilegalidad. Para aquellos faltos de memoria, hay que recordar que la concesión multimillonaria de la construcción de la AP 61, AP 51 , varios ramales y el túnel reversible, realizada en 1999 bajo el gobierno de Jose María Aznar, junto por el entonces ministro de Fomento Rafael Arias Salgado, fue adjudicada sin publicitar todas las obras que se llevaron a cabo.

Como suele ser la costumbre en este país, la forma en la que se intentó arreglar este desaguisado (que en realidad tiene otro nombre), fue como siempre en contra de la ciudadanía, a través de la aprobación de un decreto  en 2012, donde en vez de anular la prórroga de la concesión como así se suponía que tenía que ser, se reducía ésta tan solo siete años.

Y no se aplicó la sentencia del Tribunal, porque al no haberse realizado la concesión según la directivas europeas de contratación pública, la prórroga quedaba invalidada, y por lo tanto la explotación tendría que haber finalizado en enero de 2018. De hecho a medida que se acercaba la fecha, hubo intensos debates y movilizaciones que exigían la liberalización de esta autopista, pero tanto PP como PSOE negaron la mayor de la finalización de la concesión. Aún así ese mismo enero de 2018, se publicó una ampliación hasta noviembre del mismo año.

Por otro lado, no debemos de olvidar que el fin del peaje, no solo implicaría un ahorro para el bolsillo de la ciudadanía, sino que también aportaría una solución para otro gran problema en nuestra provincia, el tráfico intenso y peligroso que se da en Travesía de San Rafael y que también ha movilizado a sus vecinos y vecinas. Y es que como la navaja  de Ockham, la teoría más simple tiene más probabilidades de ser la correcta, y en este caso la liberalización de la AP6 parece ser la solución más correcta y sencilla . Aunque hasta el momento, parece que la única solución propuesta por PP y PSOE ha sido como siempre acudir al ladrillo con la construcción de una variante millonaria, para la que nunca hay y parece que nunca habrá dinero.

Nadie tampoco olvida la dejación de funciones de la empresa concesionaria a la hora de gestionar problemas, como han sido las fuertes nevadas. El bloqueo que se produjo en 2018 no fue el único. Ya en 2011 la nieve bloqueó la autopista durante horas y en 2016 también tuvieron que cortarse tramos.

Y lejos de penalizar a una concesionaria que se ha mostrado incompetente para gestionar estas vías ante cualquier imprevisto, lo que se hace es anticipar su regalo de Reyes Magos, y se le premia con este aumento.

Pero estas negligencias no son más que el síntoma de un modelo de impunidad hacia las empresas del IBEX que gestionan grandes infraestructuras servidoras de servicio público como son las vías de comunicación, empresas que hagan lo que hagan, siempre ganarán, ya que da igual como presten el servicio, o si sufren pérdidas, porque al final siempre aparecerá el Estado para rescatarlas con miles y miles de euros

Es necesario por tanto una modernización del control sobre estas concesionarias que implique la realización de auditorías externas de manera periódica para saber que se están cumpliendo con las exigencia de los contratos, así como  una modificación en la Ley de Carreteras que permita la retirada de la concesión en el caso de infracciones graves cuando se ponga en riesgo la vida de los usuarios.

Quizá así, con una regulación más estricta, donde el servicio público prime por encima de todo, los gobiernos de turno dejen de estar al servicio de las grandes empresas para asegurarse un puesto en los diferentes consejos de administración, y las grandes empresas dejen de engordar sus cuentas a costa de la ciudadanía.

Comparte en tu WhatsApp