free web stats

La encrucijada del PSOE ante su desprestigio social

El Partido Socialista Obrero Español  atraviesa una de sus etapas más delicadas desde la restauración democrática. Lo que comenzó como una cadena de decisiones estratégicas cuestionables ha derivado en una crisis mucho más profunda, que afecta tanto a su estructura interna como a su liderazgo político y su vínculo con la ciudadanía. La reciente investigación de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil no solo pone en entredicho la integridad y la ética de los dos últimos secretarios de Organización, sino que también cuestiona la política del Gobierno —con su presidente al frente— y desacredita la estrategia de comunicación adoptada en los últimos tiempos. El descrédito social, la pérdida de credibilidad y la desconfianza están presentes en la conversación pública de estos días, lo que afecta de forma directa a la reputación del PSOE y a sus expectativas electorales.

Si el PSOE aspira a seguir desempeñando un papel relevante en la historia de nuestro país —si es que aún está a tiempo—, debe redefinir con urgencia su rumbo, tanto en lo orgánico como en lo político. Los personalismos, alentados por un sistema de primarias sin contrapesos, han deteriorado profundamente la organización, promoviendo un estilo de liderazgo centrado más en la permanencia en el poder y el control del relato que en la defensa de los principios. La reflexión interna ha sido desplazada, y las voces críticas, aun cuando han sido leales, han sido silenciadas o desautorizadas por el simple hecho de discrepar. No se trata de blindar el poder de unos pocos, sino de reconstruir una estructura organizativa que permita generar verdadero valor social desde la política. Como he sostenido en otras ocasiones, resulta esencial establecer una separación clara entre la gestión interna del partido y su representación institucional, creando una incompatibilidad efectiva entre ambas funciones. En el contexto político actual, renovar la imagen del partido y de sus principales referentes no solo es urgente, sino imprescindible.

En los últimos Congresos Federales, el PSOE ha configurado una estructura hermética y centralizada, incapaz de integrar la diversidad interna o de fomentar un debate político genuino. Además, se ha blindado una línea sucesoria que transforma al partido en un instrumento al servicio de un liderazgo incuestionable, alejado de la realidad social. La figura del afiliado se ha relegado al papel de mero espectador, o incluso comparsa, en decisiones ya tomadas, anulando el espíritu crítico que nutre la renovación política y en cuyas aportaciones podría verse reflejada la sociedad civil.

Este aislamiento institucional ha ido de la mano de una estrategia política que ha tensionado hasta el límite las costuras del sistema democrático. La dependencia sistemática del apoyo de partidos nacionalistas, cuyas agendas chocan con el interés común, ha mermado la confianza ciudadana. La negociación ha sido sustituida por el chantaje disfrazado de diálogo, y la ausencia de un proyecto coherente para España ha dejado vía libre al populismo y a los discursos antipolíticos, que encuentran en este deterioro su mejor caldo de cultivo.

La consecuencia directa es una desafección creciente que trasciende al propio PSOE y cuestiona la legitimidad del sistema representativo en su conjunto. La ciudadanía percibe que la política ya no responde a sus demandas ni a sus aspiraciones, sino que gira en torno a los intereses de quienes ostentan el poder. Este es el terreno más fértil para el auge de la extrema derecha, que ofrece soluciones simplistas a problemas complejos y canaliza la frustración hacia proyectos autoritarios y excluyentes.

Ante la acelerada pérdida de prestigio social del PSOE y el desmoronamiento de sus expectativas electorales, el presidente del Gobierno y líder del partido ha optado por aferrarse a su manual de resistencia, decidido a agotar la legislatura y mantener el Ejecutivo. Sin embargo, esta estrategia entraña un riesgo elevado no solo para su formación, que podría seguir el declive de otros partidos socialdemócratas europeos abocados a la irrelevancia, sino también para la estabilidad institucional del país, que necesita una socialdemocracia sólida. Lo sensato, en este contexto, sería asumir la responsabilidad política convocando elecciones anticipadas y permitir que la ciudadanía revalide o retire su confianza. Una alternativa, al menos con legitimidad política, consistiría en someterse a una cuestión de confianza vinculada a la aprobación de los Presupuestos y al desarrollo de un proyecto de legislatura equilibrado en lo económico, social y territorial, capaz de aglutinar amplios apoyos parlamentarios. Se trata de una opción sin viabilidad, dada la oposición frontal y táctica que mantiene Podemos.

La regeneración democrática de la política en nuestro país es una exigencia inaplazable. Es necesario sustituir la actual cultura de confrontación y polarización por una cultura del acuerdo, pensando en el interés ciudadano y no en los intereses de partido, y desterrar de una vez por todas la cultura del ‘no es no’. Esta necesidad se extiende tanto al Gobierno como a la oposición, para que ambos eviten la proyección de espectáculos tan deleznables como el que tuvimos ocasión de presenciar en la sesión de control al Gobierno de esta semana. Solo así se podrá recuperar la confianza en la política y en los políticos.

En momentos de crisis, las decisiones políticas no son simples gestos: son señales del rumbo que se quiere tomar. Hoy, más que nunca, el país necesita mensajes claros de cambio, compromiso y autenticidad. Y mucho más lo necesitan quienes un día abrazamos los ideales de la socialdemocracia en España y que, en la acción política actual, apenas logramos reconocer.

Author: Juan Luis Gordo

Juan Luis Gordo. Segoviano de izquierdas, autónomo y polifacético

Share This Post On

16 Comments

  1. Buen artículo señor Gordo. Pero me temo que los de su partido no le harán mucho caso.

    Un saludo.

    Post a Reply
    • Excelente artículo Juan luis. Poco más que añadir. ¡Bueno si!! Ojalá hubiera más políticos como tú.
      Un abrazo

      Post a Reply
  2. P.Sánchez es la única persona que conozco que ha sido presidente en tres ocasiones habiendo ganado sólo una.

    En efecto, la dependencia de los nacionalistas es excesiva para el interés del resto de los españoles.

    Post a Reply
  3. Respeto su opinión Sr Gordo aunque no la comparto, yo me afilié al PSOE a raíz de ser presidente Pedro Sánchez, claro que se han cometido errores como en todos los partidos pero a día de hoy sigo apostando por él y por su gobierno. El estado del bienestar ha mejorado para los más vulnerables. Hay menos paro y qué hay de malo pactar con nacionalistas, acaso no lo hizo Aznar, qué por cierto fue quien más transferencias de estado hizo. Pedro y su equipo tenía un proyecto de país que ha sido posible llevar a cabo con los pactos. Permítame decirle con todo respeto que creo que está un poco resentido con el partido. No fue usted santo de mi devoción nunca.

    Post a Reply
    • Yo creo que afirmar que el proyecto de país de Sánchez se está cumpliendo cuando lleva dos años sin aprobar ni presentar los presupuestos generales del Estado, es de un optimismo que merece ser aplaudido.

      El PP y el PSOE pactaban con nacionalistas, efectivamente, no con dos grupos independentistas que están a los extremos, uno a la izquierda, por mucho que se blanquee, y otro a la derecha, Junts. Todo lo que se ha hecho con ellos ha sido aceptar imposiciones, nada se ha negociado.

      Y sobre el estado de bienestar de la gente más vulnerable, contando lo que han subido los precios y lo que ha subido la vivienda, no sé a qué esto se aferra usted para afirmar que ahora viven mucho mejor.

      Normal que nos les guste el señor Gordo, para hacerlo habría que empezar por hacer autocrítica.

      Saludos.

      Post a Reply
    • ¿Que qué hay de malo en pactar con los nacionalistas dice “una militante”?

      ¿Lo dice usted de broma?

      ¿No ve el chantaje permanente al que tienen sometido al gobierno y con ello a todos los españoles los partidos nacionalistas?

      ¿Está usted ciega?

      Post a Reply
  4. Es el fin del dictador, del narciso egocéntrico y corrupto, y de Aceves también.

    Post a Reply
    • Tómese la pastilla ¡madre mía!

      Post a Reply
      • Señora una militante, una lectora.. Y otro montón de “apodos” Es usted una cansina que milita en un partido corrupto y lleno de puteros. Que lo disfrute. Pronto los españoles os mandarán a la calle.

        Post a Reply
  5. Y sigue usted con el carnet del PSOE Sr. Gordo? Yo no estaría un segundo mas en una organización con la que discrepo tanto como parece que hace usted… Me temo que es una estrategia mas de trileros, ahora que el barco se hunde, para que nos creamos que es otro PSOE el que se presenta a los siguientes comicios… como si de Abalos a Cerdan hubiera diferencia.

    Post a Reply
  6. Es un gran peligro tener un presidente de gobierno que no se entera de lo que pasa a su alrededor.
    Se enterará de lo que pasa un poco más lejos?

    Post a Reply
  7. Que algún periodista valiente le diga a ferreras o Risto la realidad del PSOE en Segovia..un partido histórico que no se merece lo que le está pasando tanto a nivel local como nacional

    Post a Reply
    • Este análisis de tanta actualidad no deja a nadie indiferente. Es difícil estar en desacuerdo con el argumentario. Pone la mano en la llaga de lo que está preocupando a la sociedad española.y a la vez señala posibles salidas. Esperemos que quienes tienen que enmendar la situación lo tengan en cuenta, y de todos los partidos políticos y empresas favorecidas

      Post a Reply
  8. Con todo respeto por sus opiniones, no puedo estar de acuerdo con las mismas. Yo no estoy de acuerdo con todas las decisiones adoptadas por el Sr. Presidente del Gobierno (por ej., el pacto con Xunts), pero no se puede negar los avances que se han producido, no pocos; y, se deben valorar y mucho. En cuanto a la corrupción que ha surgido, afecta, de momento a tres individuos, luego se verá, y si se extiende, las medidas se verán, pero no afecta al Gobierno. A estas alturas, todos tenemos pasado y algunos mucha hemeroteca, que no vamos a recordar, pero si, tenga en cuenta que los actuales dirigentes provinciales, fueron alumnos aventajados suyos y aupados por Vd. a la direcciòn del Psoe provincial. Esto da para mucho, pero no da para auto-flagelaciones y mucho menos venganzas y pasar unas facturas inexistentes

    Post a Reply
    • En este artículo sólo veo análisis político. Las venganzas, auto-flagelaciones y facturas deben ser un producto de su imaginación, o de su frutración. Fui miembro de la Comisión ejecutiva de la provincia con Juan Luis y ya quisieran tener esos que usted llama sus discípulos la capacidad de análisis y visión política que él. Me imagino que se refiere a Aceves, Vázquez o Bayón. Todos ellos cambiaron de chaqueta tan pronto como Sánchez ganó, no así Juan Luis que formó parte de los que auparon a Sánchez, pero también de los primeros en separase de él. Siempre nos advirtió de sus peligros, como se puede ver en la hemeroteca y en sus artículos semanales de aquella época en los que valoraba la actualidad política, y no se dejaba guiar por los argumentarios ni por el populismo de Sánchez siendo diputado y secretario general. A ver si toman nota otros.

      Post a Reply
  9. Un gran análisis de la situación y una pena haber llegado a este punto de desencanto hacia un partido que ha superado muchos retos en su larga historia. Gracias Sr. Gordo

    Post a Reply

Submit a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *