Dicen que la playa más cercana en Segovia está en Suances, a 350 kilómetros. Pese a lo cual, la capital cuenta con un centro de investigación acuícola, hijo de los tiempos en que una empresa de Fuentepelayo, Dibaq, lideraba el mercado del pienso para piscifactorias. La Junta, a propósito de una visita de toma de contacto del delegado, José Mazarías, remitía información de qué se hace allí y para qué sirven las instalaciones ubicadas junto al antiguo silo, en la carretera de Arévalo.
El objetivo de la infraestructura, propiedad del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (ITACyL) es el desarrollo de proyectos de investigación aplicada, la asistencia técnica y servicios de i+d con la finalidad de aumentar la competitividad del sector acuícola. En Castilla y León discurren 35.000 kilómetros de ríos y 45.000 hectáreas de aguas embalsadas que aportan múltiples oportunidades para desarrollar cultivos acuícolas. En consecuencia, la labor que desarrolla el centro ubicado contribuye a implementar una cuidadosa gestión sanitaria de los animales acuáticos, así como medidas de bioseguridad y de bienestar animal para una producción sostenible y de calidad.
Legumbres y harina de insecto para los salmónidos
En el Centro se produce la cría, principalmente, de tres especies: trucha arcoíris, salmón y tenca. Su principal objetivo es el estudio de aditivos e ingredientes para piensos más eficientes y de mejor calidad, procurando la reducción del impacto ambiental y la producción sostenible con el uso de materias primas de Castilla y León. Así en las instalaciones se usan como bases harinas de leguminosas o harina de insectos (precisamente a partir del gusano de la harina), que según la responsable del centro, Ana María Larrán, “son una fuente de proteínas para los peces” y sirve de sustituto al harina de pescado.
El centro acuícola dispone de cuatro áreas diferenciadas: la zona de cultivo; la de almacenamiento de agua dulce y salada (esta última fabricada in situ); la ‘zona seca’ (laboratorio, almacén y zonas accesorias) y la zona administrativa. En el espacio dedicado al cultivo, existen 7 salas de cultivo experimental, con sistemas de recirculación del agua con 10 tanques por cada sala, tanto de agua dulce como salada. También posee 24 acuarios de pequeña escala para realizar los ensayos y una zona de cultivos auxiliares destinados a la alimentación de los alevines (los peces más jóvenes).
Colaboración con entidades públicas y privadas
Entre las empresas e instituciones que han contado con la colaboración del Centro de Investigación en Acuicultura de Castilla y León para la realización de sus propios proyectos destacan Meal Food (productora de harina de insectos) o Nutriab (empresa de aditivos); Organización de Productores Piscicultores (OPP); el Servicio Regional de Investigaciones y Desarrollo Agroalimentario (SERIDA), el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología (INIA), así como universidades tal que la Complutense, la Universidad de Almería, Valencia, Alicante, Salamanca, León o la UVa.
Nota de prensa facilitada por la Junta de Castilla y León
6 febrero, 2020
Esta última foto es muy significativa, parece que este señor delegado esté viendo algo muy desagradable; el gesto de ella revela poco entusiasmo por su trabajo….
7 febrero, 2020
Cierto Carlos vaya pareja con cara de disgusto, quizás estaban pasando frío, o el olor era nauseabundo