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Fiestas de trámite

No conozco a nadie que reserve unos días de sus vacaciones “para las Fiestas de Segovia”, aunque sí los conozco que hacen esa salvaguarda para las de su pueblo o las de su barrio, especialmente San Lorenzo y la Albuera. Por supuesto, no conozco a nadie que viva en otra provincia que tenga en mente venirse aquí, siquiera una tarde, con motivo de los homenajes a San Juan y San Pedro. No conozco a nadie que pinte en rojo esa semana en el calendario.

Mire, no soy programador cultural, ni siquiera parte de la plantilla del departamento municipal de Cultura —y mire que se dice en el Ayuntamiento, no sin cierta bilis según a quien preguntes, que ese es buen destino— y eso me permite no verme implicado cada año en realizar una programación de Fiestas original, alegre, impactante y novedosa. Bueno, por lo que se ve a ellos tampoco.

Aparte del descaro que supone meter en los programas oficiales todo lo que pase en la ciudad desde diez días antes o lograr engordar las páginas del folleto con competiciones deportivas, dedicar un rato a puntear, acto por acto, los programas de fiestas del Ayuntamiento de este año y del anterior (si quiere, también de los anteriores) es descubrir el maravilloso mundo del corta y pega en su más pura acepción. Desde el orden y horario de las actividades, las secciones fijas como los títeres de La Pícara locuela en eterna gira por los barrios; los conciertos de la Banda Sinfónica de Segovia; el concierto entre semana de algún artista segoviano de la órbita de Cultura; el Territorio Ja! (de probados resultados), los artistas en la calle de Femuka; las dianas y pasacalles, los gigantes y cabezudos, la inauguración del Ferial, los fuegos de artificio… Ahí están, en el mismo orden, horarios y días que el año pasado. No busque una sola novedad. No la hay.

Por no cambiar, no se cambian ni las fórmulas de presentación de actos fijos como la hoguera de San Juan “con la que alejaremos lo malo y atraeremos lo bueno”; la del amanecer del 24 con la “salida del sol dando vueltas” o los fuegos artificiales de San Pedro “desde los Altos de La Piedad, castillo de Fuegos Artificiales, a cargo de la Pirotecnia Ricardo Caballer”, que debe de ser como la empresa de las luces de Navidad, que nos hace precio y es fija.

No me extenderé, por obvio, en el programa de conciertos que, ojo, se lleva la mitad del presupuesto, 200.000 eurazos —“más o menos”, que así se expresa la concejala Marifé Santiago con las cifras públicas— confeccionado a base de los retales del mercado musical aunque eso si, hay uno cada día y gratis, que no se diga. Ardo en deseos de ver el lleno total que provocará, por ejemplo, el Gran Wyoming, el DJ, Carlos Jean —“lo demandan los jóvenes” dice la alcaldesa— o la Pegatina en el que será su séptimo concierto en tierras segovianas.

Las Fiestas de Segovia se llevan “unos 425.000 euros” (otra vez la aproximación de Santiago), prácticamente lo mismo que cuestan las obras de la calle de San Juan para las que el Gobierno local no ha querido esperar siquiera a que pasara esta semana en la que el público está llamado a concentrarse en esa zona un día si y otro también. Llámeme suspicaz pero no encuentro otra explicación que la de tratar de evitar pillarse los dedos con eventuales retrasos que de cara a las votaciones de mayo, la obra acabada y funcionando unas semanas antes es una baza electoral de peso pero en caso contrario, resta votos… Parece evidente que la prioridad no es que los segovianos disfruten las fiestas cómodamente.

Aquí toca hablar de improvisación, que el portavoz municipal, Alfonso Reguera —ya sabe que este hombre tiene respuesta inmediata para todo, sea o no exacta— reconocía este miércoles que no tiene ni idea de cómo subirán los camiones con material para los espectáculos del casco antiguo ante el cierre de la cuesta de San Juan. Pues cómo va a ser, hombre. Con mucho cuidado a través de las puertas de la muralla y si hay suerte, sin romper nada. O si.

Acabo con los asuntos “paralelos” de los que se está haciendo bandera aunque el Gobierno municipal decía hace un año, cuando llegaron las propuestas del grupo municipal de IU que se estaba exagerando, que en Segovia las agresiones machistas o eran para tanto. Bueno, pues este año hay campaña, reparto de folletos y sentencias de “no es no” a las que hay que dar la bienvenida. También al uso de vasos reciclables que apoyó el pleno unánimemente tras propuesta de Ángel Galindo. Oiga, cada cosa en su sitio y a cada cual lo suyo.

No, no están planificadas con mucho interés pero son nuestras fiestas y empiezan ya. Disfrútelas.

Programa de Actos

Author: Fernando Sanjosé

Segovia (1967). Periodista.

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5 Comments

  1. No estoy de acuerdo en que no haya nadie que cambie sus vacaciones por las fiestas. He estado hasta el año pasado yéndome de de veraneo en esta semana ya que vivía a 100 metros de las ferias. Afortunadamente ahora las “disfrutan” otros.
    En Segovia no puede haber el mismo interés que en los barrios, puesto que en la capital se organizan sólo eventos en los que poder figurar las pseudo autoridades locales del momento y a la vez pagar favores… en lugar de hacer actos populares (exceptuando la paella) o hacer un recinto ferial decente donde los jóvenes tengan su zona de expansión y los mayores otras zonas de ocio, y no una simple zona de atracciones desfasadas y sin ningún atractivo dada la facilidad actual de acceder a unas inmensamente mejores en un parque de atracciones.
    Pero vamos, esto no interesa al que manda y tendremos figurillas que vengan a esquilmar el poco presupuesto y poner menos interés que los segovianos en sus fiestas…

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  2. Puede que para muchos segovianos las Ferias y Fiestas, sean un evento más del ‘sota, caballo, rey’ del año. Ni pena ni gloria. Llevo así desde niño y voy camino de los setenta. Sin más. Me ha hecho gracia lo que dice la señora alcaldesa de ‘demanda la juventud’ (y vota, claro). Por demandar que no quede, de las obligaciones, hablamos otro día. Y programar actos a las 4 de la mañana (eso me ha parecido ver en un hojeada al programa) aunque sea en un negocio particular (por cierto de luces, más que de mal gusto, en pleno casco histÉrico y al lado de un monumento ejemplar, me parece fuerte). Como me lo parece decir que procuraran que las juergas terminen a las 4 o 4 y media. ¿Pero es que no se descansa, o nadie trabaja? Ya ha quedado dicho en algún comentario de este digital: Tengan en cuenta el CAT, que con un contrato de servicio con el 1-1-2, para los comas etílicos y otro con alguna compañía de Seguridad, para las broncas, es uno de los lugares más apañados. Y, de paso, sirve para algo. Además pueden tenerlo abierto 24 horas.

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    • En su época jóven, estar hasta esas horas por ahí era pecado, ¿verdad?

      No todos los que están de fiesta son borrachos o delincuentes, es justo lo contrario… La gran mayoría gente cuando sale, sale a divertirse, aunque algunos salgan a buscar pelea. Parece que los jóvenes son todos malos… pero hay algunos que ya son creciditos… y precisamente buenos, no son!

      No sé que programa habrá leido, pero la actividad que usted menciona, es un sábado a las 4 de la mañana (como cualquier otro sábado, los locales de ese tipo permanecen abiertos hasta altas horas). ¿También le molestan otros sábados o sólo cuando son fiestas?

      Las fiestas son lo que son en Segovia (y en el resto de España). Juerga y despiporre hasta altas horas de la madrugada. No duran todo el año, sólamente unos días, por eso, al que le toca sufrirlas, tiene que tener paciencia (ya sabe, en España, somos muy “solidarios”). Pero quejarse por quejarse, diciendo “mentiras”, no parece que sea una buena actitud por su parte.

      Respecto a los conciertos, totalmente de acuerdo. Ni al lado del Acueducto, ni en la Plaza Mayor (más que nada, por los camiones tan tremendos que se tienen que mover por el casco antiguo…). Habría que encontrar un lugar al que se pudiese ir en transporte público y que no se molestase a nadie… pero claro… eso es una utopía en la ciudad en la que vivimos!

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      • Apoyando a ‘PagaNini’, también me molestan y me parece mal los locales abiertos a esas horas. Todo lo que sea más de medianoche me parece excesivo (por no decirle que cuando se pone el sol). Por supuesto, una opinión, bueno no, una forma de entender la vida.
        Por cierto, en Segovia y en el denominado Centro, últimamente las juergas (despedidas solteros, música diversa de diversos motivos…), efectivamente son de fin de semana continuo y, además, las Fiestas, digamos oficiales. Fiestas de la ciudad o de distintos barrios que suelen terminar, en muchos casos, de revolada por el centro. Así es y así lo puede comprobar, señor aprendiz; no le queda a usted ‘mili’ -una forma de hablar, claro- para intentar ser ‘Verdugo’, Justo, ni le cuento.

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        • Pues si a usted le molesta el ruido o lo que sea, a altas hora, llamada a la policía y que midan el ruido… O se va usted a quejar al Ayuntamiento, a poner una queja formal, porque quejarse aquí o en el bar, de poco vale.

          Dudo mucho que toooooooodos los fines de semana sean como dice, será ahora, con el buen tiempo, cuando hay más gente por la calle… Pero no me creo eso que cuenta… Más que nada, porque empieza diciendo que a las 12 no debería haber un ruido por la calle, o cuando se ponga el so… y eso ya le delata… Será de la época de PagaNini.

          Que entiendo, que cuando se quiere descansar y la gente está de cachondeo, molesta. Pero de ahí, a quejarse de que sea todos los fines de semana lo mismo… va un mundo, ¿no les parece?

          Ah! Y la mili no la hice por suerte, no perdí dos años de mi vida en semejante imposición, los aproveché en otros menesteres!

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