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Una comisión de investigación para el Cat

El CAT, “la mayor inversión que el Ayuntamiento ha hecho hasta ahora” puede convertirse en objeto de estudio de una comisión de investigación en el Ayuntamiento si el Partido Popular logra el apoyo de los grupos municipales para su puesta en marcha. El mecanismo, previsto en el Reglamento de Funcionamiento (ROF) del Ayuntamiento, según indica la portavoz, Raquel Fernández, que pretende que se aclaren todos los aspectos del proyecto desde su origen explicado por “los que están  y los que estaban” en el Gobierno municipal durante los últimos doce años.

El PP quiere que la comisión investigue con detalle el proceso del proyecto del Cat desde 2006.

La líder del grupo municipal popular, Raquel Fernández, ha anunciado que la próxima semana iniciará una ronda de contactos con los portavoces de los otros cuatro grupos municipales para recabar el apoyo necesario para que el pleno apruebe la puesta en marcha de una comisión de investigación sobre el proyecto del Cat, una fórmula inédita hasta ahora en el Consistorio.

A través de la comisión tratan de aclarar de manera definitiva el dinero que se ha gastado realmente hasta ahora en el proyecto —el concejal de Desarrollo económico, José Bayón asegura que han sido “sólo” 11 millones y Fernández calcula que son 25— pero también el uso que se ha dado a las diferentes subvenciones a lo largo de los años, los motivos por los que sólo se ha construido un edificio, aún inacabado “cuando se hicieron y pagaron estudios y proyectos previos para varios” inmuebles, qué proyectos empresariales se han barajado para su instalación allí y cuales se contemplan en este momento. “Nuestro fin no es otro que aclarar de una vez por todas las constantes dudas que ha generado este faraónico proyecto”, explica la portavoz.

“Hay muchas cosas que aclarar en torno a este proyecto y al proceso seguido en estos 12 años”, concluye advirtiendo que si se crea el organismo investigador tendrán que comparecer “los que estaban y los que están” en referencia directa al exalcalde Arahuetes y sus concejales de Urbanismo y Desarrollo económico así como los de los equipos presididos por la actual regidora, Clara Luquero.

La puesta en marcha de la comisión necesitaría el apoyo mayoritario del pleno municipal. A priori, cabe presuponer la oposición a la iniciativa del grupo socialista y el apoyo de Centrados en Segovia e IU mientras que el voto de Ciudadanos —que mantiene acuerdos sobre los presupuestos que en la práctica se han traducido en “votos de rescate” para el Gobierno en minoría de Luquero en votaciones comprometidas para los socialistas— puede tornarse una vez más decisivo.

La auditoría de Urbanismo, desierta.

La postura de Ciudadanos respecto al Cat ha sido muy crítica durante los primeros años de este mandato aunque en el acuerdo de los presupuestos de 2018 rubricado hace un mes con los socialistas ha variado para pasar a respaldar la realización de las obras de terminación del único edificio construido hasta ahora y la idea de que el lugar se convierta en un polo de atracción de empresas para Segovia.

Por otra parte, la formación naranja inició su posición colaboradora con el Gobierno tras conseguir, en el acuerdo del anterior ejercicio, el compromiso de los socialistas de que se pondría en marcha una auditoría en el departamento de Urbanismo en la que precisamente se pondría bajo la lupa, entre otros, el expediente del proceso seguido en el Cat.

De hecho, el contrato para adjudicar la auditoría ha llegado a salir a licitación pero los plazos para que las empresas presentaran ofertas expiraron hace unos días sin que se recibiera una sola plica, lo que pone en entredicho la realización de la investigación sobre el departamento que dirige Alfonso Reguera o al menos anuncia severos retrasos. Las fuentes consultadas achacan la falta de interés de las empresas al bajo precio de la licitación —30.000 euros— para un contrato que obliga a los interesados a contar con equipos de media docena de especialistas en materias muy concretas y con experiencia reciente acumulada en trabajos similares que sin embargo son muy poco habituales en los Ayuntamientos.

Hay que tener en cuenta que la realización de la auditoría —fruto de una moción aprobada por toda la oposición en el pleno— se ha planteado por Ciudadanos como una cuestión irrenunciable y su incumplimiento podría incidir en la dirección de su voto sobre la comisión investigadora sobre el Cat que ahora plantea el PP.

Author: Redacción

Acueducto2. Noticias y actualidad de Segovia.

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1 Comment

  1. A ver si sale esa comisión. Con Arahuetes y Chipperfield empezó todo.
    Hay una cosa del CAT que me intriga.
    Cada vez que mis paseos de por la tarde, me llevaban a Nueva Segovia, cuando se construían los actuales bloques de viviendas, recuerdo que en todos los casos, primero construían los bloques y lo último que construían eran las plazas centrales, los patios interiores, etc. Y por la zona donde está el Perico Delgado, hay unos cuantos.
    Pero es curioso, que en el CAT no ha ocurrido eso. Lo primero que construyeron en el CAT, fue una plaza, con unas majestuosas escaleras, por lo que el Ayuntamiento Arahuetil pagó 1,5 millones de euros. Y además, con sus farolitas y todo, y con su iluminación nocturna durante años, por supuesto, hasta que “alguien” se daría cuenta de que era una estupidez iluminar unas escaleras situadas en un páramo.
    Pregunté a un amigo albañil que había trabajado en varias obras de Nueva Segovia por esas cuestiones, y me dijo que siempre hacen las plazas y patios lo último, porque se necesita ese espacio para acumular todos los materiales de construcción, y para la descarga de los camiones con las grúas de la obra. Si se hiciera antes de los bloques, me comentó, al final de la obra estaría destrozado.
    Y me dijo más. Un amigo suyo había estado trabajando en las obras del edificio del CAT, y le dijo que lo primero que hicieron fue cubrir la plaza con una capa de cemento para que no se estropeara. Curioso, ¿verdad?
    También es curioso, que anden “racaneando” 450.000 euros este año, 200.000 el año pasado, 450.000 euros en el 2.016, para “terminar” el edificio del CAT, cuando se han gastado 1,5 millones en una placita con escaleras.
    Promete ser “divertida” esa comisión.

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