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Annus horribilis

Hacía tiempo que no pisaba estos terrenos, pero como pasa en la caza y la pesca, cuando aparecen otras cosas que requieren tu tiempo y tu atención, la devoción u ocio, pasan a segundo plano. Ya estamos en noviembre, a más de quince días andados del mismo, y se pueden sacar muchas conclusiones de las actividades cinegética y de pesca que nos ha traído este seco año 2022.

En este caso nos vamos a centrar en la temporada de Caza. No hace falta ser Mariano Medina y Brasero, para llegar a la conclusión de que un año tan seco y con tan altísimas temperaturas no podían traer nada bueno a la vida en el campo.

Cuando llega el otoño y llueven cuatro gotas y se hace pronto de noche, se nos olvidan las olas de calor que nuestra estepa sufrió desde mayo a octubre. Y además con falta de agua. Fuentes y arroyos (incluso ríos) desparecieron del mapa. Es el caso del Rio Moros o el arroyo Milanillos, siendo un esqueleto de cauces vacíos, sin vida y con el ciclo de la misma roto para años y quizá para siempre.

Pero si hablamos de caza, la media veda fue entretenida donde hubo conejos y torcaces. La caza de la codorniz en la provincia de Segovia, se esta volviendo un anacronismo y la que tarde o temprano pasará como con la caza de la tórtola. Se terminará prohibiendo.

O bien llenando de codornices de criadero, sin interés ninguno, y que mantendrá el negocio de fabricas de cartuchos, de perros y criaderos. Pero que para el cazador de verdad será la campanada de salida para colgar la escopeta. Ya lo decía el maestro M. Delibes, que terminaríamos matando patos y gallinas de corral. Y que llegado el momento él colgaría la escopeta. Y yo.

Que el conejo está bajando de población y que en algunos términos ha desaparecido es una realidad. Y mucho me temo que los corros que quedan tarde o temprano (mas temprano que tarde) también les terminará llegando esta hecatombe conejil. Los agricultores, estarán más contentos cuando baje o desparezca esta población, pero muchos términos se están quedando con el culo al aire en cuanto a la presencia de otras poblaciones cinegéticas.

Las palomas bien, gracias. Cada día más y más gordas. Hablo de torcaces. Las de campanario personalmente nos las contemplo como pájaro a matar. Por no pelarlas.

Y si hablamos de la general, pues eso, un desastre. La perdiz no ha criado bien, ni con, ni sin bebederos y besito de buenas noches durante el verano. Lo que la naturaleza no da el bidón de agua “non presta”. Las que se mataron el primer día viejas y resabiadas. Con muchos espolones. Duras.

Las liebres, sin rastro. Pero en el más amplio sentido de la palabra. No solo en el termino donde cazo no he visto a nadie con ninguna, si no que no he visto correr ninguna, ni he visto ninguna cama. Lo dicho, ni rastro.

No son pocos los cotos que en un acto de responsabilidad cinegética ha cerrado la veda, si no total, determinadas especies como perdiz y liebre.

En el mundo de la caza no todo es matar. Se trata de conservar, de que el campo de sus frutos y recogerlos si ello es posible. No se trata de exterminar. En situaciones como la actual no es posible contemplar egos y sobrecargas testiculares de taberna con animales cuya muerte anula el futuro cinegético de muchos términos. Ahora bien, cada coto gestiona sus recursos como mejor entiende y como le da la gana. Y eso, desde estas líneas lo respeto. Pero también opino.

Quizá la administración pública debería haber tomado cartas en el asunto. Pero para los que estamos en el campo ya sabemos lo que podemos esperar de la Consejería de Medio Ambiente de Castilla y León y su responsable de Caza y Pesca. NADA.

2022 es un año horrible cinegético. Para los que lo han cerrado y guardado la escopeta, hasta aquí ha llegado el año. Para los que, pese a todo, siguen pisando las tierras tras las patirrojas, rabonas y conejos, recordarlos que la caza menor está abierta hasta el cuarto domingo de enero, fiestas nacionales y autonómicas incluidas. Y que los terrones no crían.


Author: J. García Herrero

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3 Comments

  1. No menciona en ningún momento que todso sea por el cambio climatico… será que pìensa el autor que no existe o que no tiene nada que ver?

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    • Me da ‘Charñy’, que a buen entendedor pocas palabras bastan. El señor Herrero, conocedor de Delibes y su pensamiento, no necesita hacer panfletadas, lo deja bien claro, mejor dicho: clarísimo, sólo hay que leer.
      Don Javier me quito el Deerstalker.

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    • Muy buen artículo, Sr. García. Comparto su pensamiento y reflexión.
      De momento, me resisto a colgar mi paralela, la llevo al hombro, tanto da que fuera con los caños vacíos. Llegará el momento.
      Muestra usted respeto y conocimiento.
      Y gracias por traer a la memoria al sabio Delibes; merece ser revisitado constantemente.

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