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Lamentos presupuestarios

El último pleno municipal ha rechazado los presupuestos concejiles para el próximo año 2025. Trece concejales han votado su devolución (los de los grupos Psoe, Vox, Izquierda Unida, Podemos y Ciudadanos), frente a otros doce concejales que querían aprobarlos (los del grupo Popular, acaudillado por el actual Alcalde). Aquellos opositores lo han hecho tanto por su contenido, como por el malestar que han causado las malas maneras democráticas del Alcalde y su equipo de gobierno.

Y es que, ciertamente, la democracia consiste en gran medida en las formas, y la falta de esas buenas maneras han llevado en buena parte a este rechazo. La propuesta del Alcalde nos fue entregada a los demás grupos el viernes 13 de diciembre por la tarde: es decir, con muy poco tiempo para estudiar los más de 400 folios en que se plasma ese presupuesto. Y cinco días más tarde, ya sin mayor encuentro, ni negociación, ni debate con los grupos municipales -salvo, quizá, algunos escarceos con la concejal de Ciudadanos-, el Alcalde intentó imponer a todos esos sus presupuestos, cerrados y sin posibilidad de propuestas de mejoras, en la Comisión Informativa de Hacienda celebrada el 19 de diciembre. Cuyo dictamen preceptivo, como no podía ser de otra manera dadas esas malas formas y maneras del equipo de gobierno, salió negativo por los votos de la mayoría. Ni la ‘alcaldada’ ni el ‘trágala’ les salieron bien allí.

Y, a pesar de haber perdido esa votación, el alcalde, inasequible al desaliento, forzó su presentación al Pleno del 27, y su votación. Apercibiéndonos a todos los demás concejales de que, de no aprobarlos, todos los males que se van a cernir sobre Segovia y sobre sus vecinos, serán culpa nuestra, y para nada suya.

No parece muy acertado el alcalde al quejarse de la supuesta deslealtad y de la supuesta irresponsabilidad de los concejales no adscritos a su grupo del Partido Popular, por votar contra sus cuentas. A quienes incluso su primera teniente de alcalde ha tachado de ‘secuestradores’ del bienestar de Segovia, y de tomar a los segovianos como ‘rehenes’. Nada menos. Y lo mismo ha hecho el propio Alcalde en sus últimas ruedas de prensa, lanzando reproches y dicterios contra todo concejal que suponía desafecto a sus querencias, pero con tal virulencia que ha caído en la falta de decoro y de respeto institucional, incluso de auto-respeto, no comportándose a veces como el Alcalde de la Ciudad, sino como un hooligan… Tampoco ha tenido buena relación con la verdad, porque sin necesidad alguna ha estado lanzando embustes ‘a troche y moche’, incluso ‘a cascaporro’ si se me permiten estas expresiones populares …

Es una obviedad recordar que la oposición está, sobre todo, para controlar al equipo de gobierno, es lo que tiene la democracia. Así no se hacen las cosas, señor alcalde, si es que se quiere pactar algo. En tal caso, hay que hacer las cosas con tiempo, por ejemplo, dos meses antes, y hay que estar abiertos a admitir alguna propuesta de mejora por parte de aquellos concejales a los que se pide el voto. No dar tiempo al examen y a la consideración de las cuentas que se proponen, ni por ende admitir propuestas de los grupos más afines, delata una actitud soberbia, una voluntad autoritaria e impositiva… y claramente una nula voluntad negociadora.

El caso es que la oposición ha presentado hasta cuatro enmiendas a la totalidad, devolutivas, pero no cuajó ninguna. La enmienda del grupo Vox se dirigió también a las malas maneras negociadoras del Alcalde y de su equipo de gobierno, pero entró además en las distintas partidas presupuestarias, denunciando excesos y omisiones: evidente falta de ambición, ausencia de un plan integral de rehabilitación y ejecución de los barrios y calles, importante carencia de inversiones (2 millones para el gasto político y solo 3 millones para inversiones), retirada de partidas para el aparcamiento de los Tilos o para el peligroso Diablillo, y omisión de otras como la extinción de Evisego o la Tauromaquia, a la vez que proponían gastar mucho en festejos y luces, o sea pan y circo. Además, criticó Vox la falta de ejecución del presupuesto de 2024 (sólo se ha ejecutado el 58%), lo que es síntoma evidente de una mala gestión por parte del equipo de gobierno.

Las enmiendas de los grupos de Podemos e Izquierda Unida, por su parte, se centraron en su distinto modelo de ciudad, y proponiendo soluciones intervencionistas propias de las dictaduras comunistas y bolivarianas, es decir un fracaso garantizado. He de destacar la intervención del concejal señor Galindo, por su buen tono y mejor dialéctica. El grupo del Psoe centró su enmienda en las malas formas y la poca voluntad de negociar del equipo de gobierno, su soberbia, su autoritarismo y su falta de escucha a los demás. La representante del grupo Ciudadanos votó a favor de todas cuatro enmiendas devolutivas, censurando duramente la manera en que se han presentado los presupuestos.

Rechazadas las enmiendas a la totalidad y devolutivas, se pasó al debate y votación de los presupuestos del Partido Popular, defendidos por la primera teniente de alcalde doña Rosalía Serrano. Cada uno de los grupos de la oposición censuró aún más acremente tanto las formas como el fondo de las cuentas, y cuando se produjo la votación final el resultado fue muy adverso a las pretensiones del alcalde y de su grupo municipal: quedaron rechazados.

En tal momento el alcalde acusó el fracaso, pero sin propósito de enmienda, sino abroncando como un maestro de escuela severo a todos los grupos de la oposición, casi concejal a concejal, doliéndose de sus votos. Dicen los italianos, siempre sabios, que ‘Chi è causa del suo male, pianga per sé stesso’. Quien es causa de sus propios males, llore solo por sí mismo… Tal, nuestro alcalde; tal su primera teniente. Quienes, durante el pleno, llegaron a acusar a la oposición de ¡falta de diálogo! ¡de falta de propuestas! ¡de falta de voluntad de negociar!… Menudo despiporre, y menuda desvergüenza… el mundo al revés…

Toda la oposición, de derecha a izquierda, estuvo durante el Pleno con una actitud que me ha parecido contundente pero a la vez sensata, dialogante y constructiva… el grupo del Partido Popular estuvo más bien a la defensiva, mientras quedaba en evidencia que el otrora tan deseado Maza23 está pasando a ser ‘Maza el Empecinado’, a la vista de su pertinaz afán en ‘sostenella y no enmendalla’, en esta y en algunas pasadas ocasiones.

Notemos que tanto los concejales de Vox, como la concejal de Ciudadanos, mostraron su disposición a re-negociar los presupuestos devueltos, abriendo la puerta al remedio, porque podrían reconducirse aún, si hubiese voluntad de hacerlo por parte del Alcalde y del equipo de gobierno ¿tendrán esa cintura los populares? Pronto lo veremos, pero mientras tanto ‘il tempo pasa…’

En resumen: un pleno tenso, un episodio triste del peor estilo de la política local, que pone en evidencia los malos rumbos que lleva nuestra querida ciudad (más bien, la falta total de rumbo), y que deja en mal lugar, sobre todo, al Alcalde de Segovia, que en menos de un año y medio de mandato ha dilapidado en buena parte el capital político que le confiaron la mayor parte de nuestros conciudadanos. No hay más que salir a la calle para constatar este entristecedor declive.

Y, de momento, otra ocasión perdida, otro fracaso colectivo, otro día triste para los segovianos. Y todo me ha parecido muy lamentable.


Author: Alfonso Ceballos-Escalera y Gila

Doctor en Derecho e Historia. Concejal de Vox en el Ayuntamiento de Segovia.

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5 Comments

  1. Lamentable, sin duda. Pero no irremediable. Si se impone una humilde sensatez (que viene a ser lo mismo). No perder el fin, por encima de todo, o sea la mejora real de la ciudad. Algunos logros se han cosechado. Destaca, la celebración del 550 aniversario de la proclamación de la reina Isabel. Propuesta por Vox. Que algunos partidos de la oposición no secundaron, más bien, rechazaron.
    Del análisis se destacan las formas inadecuadas, más que el contenido: el rechazo de todos los portavoces de la oposición a la actuación personal del gobierno, en particular, del alcalde. Todo importa, pero ¿no importa más el contenido? ¿Se podrán mejorar ambos, aproximando posiciones? El futuro inmediato de Segovia está en juego. ¿No querrán volver al pasado socialista, aún más lamentable? ¿No va a demostrar el gobierno del PP y el propio alcalde, que puede cumplir lo prometido, hace diecisiete meses? Sería un gran fracaso, que no se puede permitir. Necesita mejorar la confianza de todos. Queda mucho camino por recorrer hasta el final de la legislatura.

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  2. El señor Ceballos-Escalera y Gil (y no sé cuántos apellidos arrejuntados más) vuelve a hacer un alarde de prepotencia lingúística innecesaria y que nadie ha pedido. Lo que sí pide la ciudadanía a él y a su “otra” de partido es que dejen su rencor aparcado y piensen en el bien común de los segovianos. El partido Vox acabará desapareciendo como ha ocurrido con el partido Ciudadanos, y con el partido Podemos. Si les importan tanto las formas, usted, que de tantas medallas presume, póngase la que más orgullo le va a dar antes de su retirada de la política y favorezca a Segovia y no a su partido en vías de extinción donde nadie le agradecerá nada. Se le está tendiendo la mano a usted, cójala.

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  3. Esperemos que Vox, como un partido inútil para la sociedad, como Podemos o IU, desaparezcan pronto.

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  4. Perfectamente explicado lo que pasó, por qué pasó y como se desarrolló. Nada más que añadir, salvo insistir que el actual alcalde debe de abrirse a negociar, a escuchar opiniones contrarias a la suya, a valorar aportaciones lógicas y coherentes, aunque procedan de los grupos de la oposición, entiéndase de colaboración, y a ser alcalde sin que se note. Porque todo eso, y mucho más, es parte inherente de lo que debe de ser una democracia. El alcalde de un municipio debe de ser invisible, y al de Segovia se le vé demasiado, tanto por sus aciertos, como por sus errores, cada vez más frecuentes.

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  5. Creo que leer, estudiar y analizar cuatrocientos folios en cinco días no es tarea imposible para los concejales de la Oposición. El sueldo y las dietas que cobran les demanda algún esfuerzo en su trabajo que no es otro, actualmente, que lograr el consenso necesario para aprobar unos Presupuestos que mejoren la vida social de los segovianos.

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