El Eresma, un río limpio pero sin peces

Posted By Redacción on 13, Oct, 2016

Instalaciones de la nueva depuradora.

El río Eresma es otro. Tras la puesta en marcha de la nueva depuradora y el empalme de los residuos urbanos de San Cristóbal de Segovia a la red general capitalina, y por primera vez en décadas, el río baja limpio.

Así lo evidencian los indicadores recopilados por la Confederación Hidrográfica del Duero. En sus series históricas, que se remontan a 2007, el Eresma a su paso por Hontanares (donde su ubica la estación de medición de la calidad y cantidad del agua), nunca antes se habían registrado para un mes de septiembre –tradicionalmente crítico por la escasez de caudal- indicadores mejores de oxígeno, de sólidos en suspensión, de amonio, entre otros, que los alcanzados en septiembre de 2016.

El óxigeno disuelto en septiembre de 2016 oscilaba en valores medios situados por encima de los 7,5 mg por litro, unos niveles ya compatibles con especies exigentes, como la trucha. En toda la serie, este mismo indicador estaba de media por debajo del 2 y no pocas veces en el 0 absoluto. En general, mejoran todos los indicadores, como los sólidos en suspensión, la turbidez, conductividad o el amonio, este último, verdadero botón de muestra de la basura orgánica acumulada en los ríos, bajando a niveles casi de excelencia desde la puesta en marcha de la depuradora. En definitiva, el río está listo para acoger vida.

Peces muertos en el Eresma a su paso por Los Huertos, en junio 2014.

Y es que aunque el agua está por primera vez limpia en décadas, no hay peces. “El problema es que han sido muchos años de vertidos, aguas abajo de Segovia el lodo está contaminado. Hay que esperar a que alguna riada se lleve ese lodo y entonces estaremos en condiciones de repoblar el río”, explicaba el alcalde de Los Huertos, Alfonso Asenjo. Juntamente con alcaldes de otros municipios ribereños (Carbonero de Ahusín, Yanguas, Valverde), han promovido diversos encuentros para analizar la repoblación del río. De momento no hay ningún plan concreto que devuelva al Eresma la riqueza piscícola de antaño.

“El agua baja limpia, pero no hay peces”, explica al bloguero de acueducto2 especializado en caza y pesca Javier García Herrero. No hay peces, porque los pocos que sobrevivían en la cloaca que era el Eresma perecieron en junio de 2014, en diversos episodios de vertidos relacionados con la transición de una depuradora vieja y obsoleta a una nueva, en el mayor delito ecológico perpetrado sobre el Eresma y que aún hoy, sigue absolutamente impune en el limbo de la fiscalía. Las poblaciones no se han recuperado de ese mazazo. Y sin peces también sufren las aves, las rapaces, no se gestiona adecuadamente la flora ribereña. “En 2017 urge recomponer esta situación”, dice García Herrero.