San Cristóbal pagará tasa de depuración al ayuntamiento de Segovia

Posted By Redacción on 9, Dic, 2015

La puesta en marcha del colector de San Cristóbal de Segovia conllevará que los vecinos del municipio del alfoz paguen en 2016 la tasa de depuración de aguas residuales, cosa que hasta la fecha no venían haciendo. Esta tasa, de 0.67€ el metro cúbico sobre el agua consumida, se tributará íntegramente al ayuntamiento de Segovia, pues el nuevo colector traslada las aguas residuales del pueblo hasta la futura EDAR ampliada de Segovia, actualmente en obras.

El colector, en muy avanzada fase de construcción, según la empresa Aquaes promotora del mismo, podría estar listo en las próximas semanas, antes de fin de año. Para su construcción se han invertido 1,8 millones de euros (y no 3,5 millones, como informa erróneamente el cartel oficial de las obras), de los que un 20% son aportados por el municipio. Oscar Moral, alcalde de San Cristóbal, explicó que “se mantiene el precio de la tasa del agua y no habrá repercusión en la misma del coste de la obra, que se amortizará en 10 años. Eso sí, hay que aplicar la tasa de depuración, que será la que nos marque el ayuntamiento de Segovia y que empezaremos a pagar tan pronto entre en servicio la nueva depuradora”. Según el proyecto de tasas municipales de Segovia para 2016, el coste de depuración en la capital está fijado en 0.67€ el metro cúbico. Para un consumo medio de 50 metros cúbicos año (un estándar del agua que viene a gastar una vivienda media) eso supone 33,5€ más al año. Aproximadamente, la depuración viene a suponer un 25% del coste del tratamiento del agua.

2016 el año del Eresma

Es importante señalar que este coste por depuración se añade de nuevas al recibo del agua, por cuanto en San Cristóbal no se realizaba depuración alguna del agua residual. Según salía de las casas según llegaba al río Eresma por los arroyos Milón y Cerezo, en lo que viene siendo uno de los principales factores de contaminación del río a su paso por la ciudad, y que añadido al meramente simbólico proceso de depuración al que se someten las aguas residuales de Segovia, hace que el Eresma sea hoy por hoy una verdadera cloaca a su paso por la provincia.

El colector es por tanto una pieza clave. De más de 4,6 kilómetros de extensión, en una zona de alta complejidad orográfica, ha sido financiado al 80% por el ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y los Fondos de Cohesión Europeos. El restante 20% lo paga San Cristóbal. Actualmente las obras se centran en la conexión del colector con la trama de desagues de Segovia, a la altura de San Lorenzo.

Y es que 2016 tiene que ser el año del Eresma. Tanto el nuevo colector como la puesta la marcha de la nueva depuradora supondrán un enorme salto cualitativo en la calidad de las aguas del río segoviano, que verá resueltos sus dos principales focos de contaminación. Quedará mejorar los mecanismos de depuración de los municipios que aguas arriba vierten al río, Palazuelos y, muy especialmente, La Granja, municipio supuestamente declarado Reserva de la Biosfera. No la del río, precisamente.