Las residencias públicas y privadas segovianas, con casi 3.000 internos, registraron el pasado mes de marzo un aumento de la mortalidad del 180% respecto al mismo mes del año anterior, un incremento que cabe achacar íntegramente a la epidemia de COVID19. Según la estadística facilitada por la Junta de Castilla y León, en los últimos meses de marzo de los años de 2017 a 2019 la cifra de fallecidos se situó en una media de 50. En 2019 el dato es de 45 defunciones. Un año después la cifra total es de 126, casi el triple. En los siguientes días, ya en el mes de abril, la cifra no hizo sino aumentar, hasta los 226 registrados a fecha de 6 de abril.
Aunque los datos indican que lo peor ha pasado, abril será igualmente un mes dramático, solo en la primera semana ya se ha doblado el dato medio de fallecidos para todo el mes. Son, en total y desde que empezara la crisis, 226 (entre los fallecidos confirmados por coronavirus y los que presentan sintomatología). Segovia es la segunda provincia con un porcentaje mayor de fallecidos en las residencias de toda Castilla y León, peor aún está Soria, en cuyas residencias el porcentaje de mortandad respecto al marzo anterior se situa en el 340%. En el resto de provincias de la región el porcentaje fluctúa entre el 155% de Salamanca y el 125% de Palencia.
En Segovia, la residencia Asistida de titularidad autonómica concentra el 19% de los fallecimientos registrados en la provincia, 44 a fecha de 6 de abril, siendo la que registra más defunciones de toda la comunidad.
Diputación
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