Los trabajos que se realizan en la calle del Taray están provocando, con cierta frecuencia, imágenes como las que se pueden ver en el vídeo, precisamente a causa del mal estado de las conducciones en la zona que ahora van a ser renovadas. Varias tuberías, algunas acometidas de agua y electricidad y otras estructuras han sufrido distintos dañosdesde el mismo momento en el que comenzó la actuación.
Según el concejal de Obras, Miguel Merino, las conducciones de los servicios están muy viejas y además están instalados a muy baja profundidad “y en cuanto se mete la pala se rompe”, una eventualidad que consigue ralentizar la actuación y hace la obra “lenta y pesada”. A pesar de ello, confía en acabar la actuación en diciembre, antes de cubrirse el plazo fijado para esta obra, que dura hasta enero.
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