Un ‘spa’ romano en Confloenta dedicado a la diosa Fortuna

Posted By Redacción on 30, Ago, 2019

Día de visita de las instituciones al yacimiento de Confloenta, en Sepúlveda. Las distintas inversiones realizadas hasta ahora han permitido al equipo de Martínez Caballero, quien comparte coordinación del trabajo con el profesor Gonzalo Ruiz Zapatero, del departamento de Prehistoria, Arqueología y Ciencias Historiográficas, fechar en el siglo II d.C. la construcción, identificada como las Termas del Sur, que habría estado en uso durante dos centurias −hasta el siglo IV d.C−, según han extraído los investigadores de las diferentes labores de excavación, análisis e identificación, y tal y como explicaban los arqueólogos al presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente, entidad patrocinadora de las excavaciones, y durante su visita al yacimiento.

Desde hace un mes se ha retomado la intervención del año pasado en las Termas del Sur, centrando los esfuerzos en la exploración de las estancias de baños y servicios, así como en la delimitación del perímetro del edificio. Esto ha llevado, según detallaba Santiago Martínez, a la apertura de una nueva superficie del complejo de 730 m2. “Hemos continuado la excavación del caldarium y hemos abierto el área de la palestra, un amplio espacio al aire libre destinado a ejercicios, donde además se ha localizado un gran natatio, una piscina de grandes dimensiones; de unos 16,4 x 10 metros”, comentaba Martínez Caballero, indicando que esta área de esparcimiento conserva amplios restos de los pavimentos de sus suelos, tanto en el exterior como en el interior de las salas que se abrían hacia el patio central.

Además, durante estas excavaciones, los arqueólogos han localizado también la entrada principal del edificio, conformada por un pórtico columnado, el Kardo Máximo, que se abría a la calle principal de la ciudad, que recorre la fachada occidental; según el responsable de las excavaciones, “la principal de las termas”.

No ha sido éste el único espacio donde han trabajado los investigadores, quienes también han intervenido durante este tiempo en el área de servicio de las termas y, de manera principal, en la conclusión de la excavación del gran praefurnium; el horno que alimentaba de aire caliente a las cámaras (hypocaustum) situadas bajo los suelos de las salas de baños calientes (caldarium) y templados (tepidarium), así como a las colocadas en las paredes (concametariones) de esas mismas salas, destinadas a calefactar estos espacios de baños.

En cuanto a las sorpresas más llamativas que han deparado estas nuevas prospecciones, el responsable de las investigaciones hacía referencia a la detección en el cuerpo de baños de una serie de objetos, como figuras en terracota, vasos de ofrendas o fragmentos de aras, que los investigadores vinculan a la existencia de un espacio de culto dentro de las termas destinado a la veneración de una divinidad salutífera y posiblemente dedicado a la diosa Fortuna.

“Es un dato importantísimo, pues este tipo de cultos salutíferos es habitual en época romana, principalmente en edificios de baños (balnea) asociados a manantiales y sugerencias naturales de agua”, explicaba Martínez Caballero, matizando que “aunque no es raro, no es muy común en termas urbanas públicas, alimentadas con aguas procedentes de un acueducto, como es este caso de Confloenta”. Esta circunstancia otorga un valor añadido al complejo, según el director del Museo de Segovia, ya que supone que las de Confloenta sean “las únicas termas urbanas en Castilla y León en las que se ha detectado este culto salutífero de aguas”.

Superficie mínima de cerca de 2000 m2

En los próximos días, el equipo de investigadores, que permanecerá en Duratón hasta el día 31 de agosto, cerrará la intervención en estas áreas y tratará de extraer la mayor información posible sobre el pórtico de entrada, la palestra y las nuevas salas descubiertas. Según Martínez Caballero, la detección de este gran pórtico de entrada, así como la extensión hacia el norte del complejo termal dentro de esta manzana urbana situada al sur de la ciudad, llevan a calcular la extensión total de estas termas en una superficie mínima de alrededor de 2000 m2. No obstante, tal y como aclaraba el investigador, “si se tratara de un complejo termal dentro de los denominados de tipología imperial, con ordenación de sendos cuerpos de baños simétricos en torno a la palestra, esa superficie podría ser más amplia”.

En cualquier caso, estas dimensiones, cuyo conocimiento es básico para acometer los futuros trabajos de musealización de las termas, convierten a las Termas del Sur de Confloenta en una de las mayores conocidas a día de hoy en Castilla y León y sólo superadas por las de Clunia; algo “lógico”, según Martínez Caballero, ya que ésta era considerada la capital administrativa de esta parte de la provincia de Hispania Citerior.