La incorporación de un alcalde honorario, Hugo González, en lugar de la tradicional alcaldesa obligaba a ciertos cambios en la ceremonia de presentación de las Fiestas y ferias de San Juan y San Pedro de Segovia. El cambio de montera, el más evidente. Llegado el momento, la saliente se destocaba y entregaba al sucesor en el cargo el gorro tradicional al entrante en presencia de la de en funciones. Para la ocasión, se estrenaba nuevo bastón.

Pero no era el único cambio, menos dulzaina que otros años y menos pompa. Se redujo en aras de la brevedad la intervención de dulzaineros -solo la entradilla- al paso de las diferentes damas y mozos. Tampoco desfilaron los policías locales en traje de gala, con el vistoso casco florón. En el recuerdo de todos, El Incidente del pasado San Juan, con altercado en el escenario y dimisión final de Alfonso Reguera. Quiso la casualidad que el mismo agente involuntario protagonista de El Incidente fuera el único disponible para la ocasión. Mejor no tentar a la suerte, debió pensar Jesús García, el sucesor de Reguera, y apelando a "necesidades del servicio" se amortizó la plaza de policía local en traje de gala. Otra novedad, la pantalla para seguir el acto, en realidad, aprovechando la infraestructura del concierto de Rozalén. Lo cierto es que poder ver ampliada la acción del escenario por las pantallas laterales es todo un acierto que permite seguir mejor el acto  a los miles de segovianos que anualmente se concentran a los pies del Acueducto.

Más cambios, faltaban no pocos concejales, por ejemplo, el grupo de Centrados al completo. En teoría el acto del pregón debía haber sido la puesta de largo, también, de la nueva corporación. Las cosas han salido como han salido, con pleno de constitución pospuesto hasta nueva orden, de manera que el estrado estaba en funciones, a modo de despedida de concejalas como Paloma Maroto o Marifé de Santiago, que lo dejan y que vivieron el acto con especial intensidad.

No podía ser de otra manera y Ana Zamora, directora teatral de Nao d'Amores, compañía centrada en la difusión del teatro antiguo, empezó su pregón citando a Gil Vicente. Todas las cosas, a ratos/ tienen su remedio cierto:/ para pulgas, el desierto,
para ratones, los gatos,/ para la muerte, enterrar,/ para el rico, malvivir,/ para el amor, el dormir; /y para el frío, bailar.  Una disertación muy erudita, en la que comparó el tablado como espacio público que sirve para el entretenimiento más elevado como para patíbulo. "Hagamos un esfuerzo por disfrutar de estas Ferias y Fiestas desde una perspectiva teatral, sacra, y siempre crítica, generando espacios de convivencia. Lo difícil no es vivir… es convivir", concluyó la dramaturga.

Turno para Rozalén y su neo copla solidaria con mensaje. Concierto impecable con un sonido cuidadísimo al servicio de la voz de la manchega para pasar revista a sus tres álbunes. Como es habitual, Rozalén subió al escenario acompañada de una íntérprete de signos que se integra a modo de coreografía en el espectáculo. Muy buen concierto, que siguió con la animada verbena en la plaza.

Para el domingo 23 de junio, noche de San Juan, la plaza volverá a ser el núcleo de los eventos festivos, con concierto de Fangoria seguido de verbena (el lunes es festivo en Segovia, también en Palazuelos de Eresma). Arranca también el programa de animación callejera Territorios Ja! y en San Nicolás otro clásico, la Gran noche del Teatro con la participación de Yllana y Joseph Collard.

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