El 26 de agosto, pasadas las 22horas, cundía por las redes sociales el rumor de un desalojo de la estación Guiomar por un supuesto caso de ébola. Según las explicaciones dadas hoy por el delegado de la Junta de Castilla y León, Javier López Escobar, todo se trató de un episodio de “pequeña psicosis”.
Un pasajero al parecer de origen africano y paciente de tuberculosis empezó a sangrar por la boca en pleno viaje del Avant, lo que generó la alarma entre los otros pasajeros. En la estación de Segovia un equipo médico trató al paciente, trasladando al enfermo al hospital. Al ver mascarillas y la movilización sanitaria las redes sociales expandieron el rumor de un caso de ébola. Efectivos de la Guardia Urbana, que patrullaban por la estación y sin que se sepa muy bien los motivos, ordenaron el desalojo de la estación, aunque algunas fuentes señalaron posteriormente que los agentes se limitaron a pedir a los curiosos que abandonaran la estación cuanto antes para facilitar el trabajo de los sanitarios.
“Se trata de una tuberculosis mal tratada. Ni siquiera tenía fiebre”, ha explicado hoy Javier López Escobar. El enfermo había estado en Nigeria hace tres meses, “tiempo suficiente para descartar el ébola de entrada, ya que el virus tiene un periodo de latencia de 21 días”. Ni siquiera se activó el protocolo ante potenciales casos de infección. El delegado de la Junta pidió prudencia a los medios y a los ciudadanos para evitar la repetición de estas situaciones de “histeria colectiva”. “Vivimos bombardeados por las noticias sobre el virus, y esto crea un clima de alarma”, explicó.
Diputación
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27 agosto, 2014
Bien dicho, entre bombardeos a discrección, como dice el señor Delegado, alarmas por el tiempo o por cualquier menudencia y fiestasborrachera es como nos mantienen en la inopia al mundo mundial sus colegas.