La Universidad de Valladolid (UVa) apostará en el próximo curso por impartir las clases de manera presencial en el campus de Segovia aunque se contempla que la limitación de aforos obligue a poner en marcha un sistema en el que los alumnos repartan su tiempo a partes iguales entre las aulas y las pantallas de sus ordenadores.
El vicedecano, Agustín García Matilla, confió en contar con aforos del 50 por ciento y con esa previsión se refirió la posibilidad de establecer turnos, probablemente semanales, entre los alumnos. De este modo, los estudiantes podrían compaginar las clases presenciales con las que recibirá a través del ordenador en tiempo real, junto a otros contenidos on line sobre las distintas materias, una modalidad de docencia que también tendrán que explorar a fondo los profesores universitarios con la preparación de contenidos.
Al igual que ocurrirá la próxima semana, con motivo de la celebración de los exámenes de la EBAU para casi 900 preuniversitarios, en el Campus María Zambrano se mira cada espacio existente como un lugar a “reconvertir” en aula. Es el caso del salón de actos o el salón de grados donde en condiciones normales hay un aforo de 496 plazas, si bien pueden acabar quedándose en un tercio o la mitad de esa capacidad.
Los responsables del campus en Segovia explicaron en conferencia de prensa que la obra de ampliación de la fase 2 estará “completa” a finales de año.
Diputación
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