Posted By Redacción on 27, Ene, 2016

La sociedad Segovia 21 no entrará en concurso de acreedores. Al menos de momento. El pleno de la Diputación provincial aprobó este 26 de enero avalar el crédito de 1,8 millones de euros que Segovia 21 ha solicitado a Bankia para poder hacer frente a las deudas ordinarias, 830.000 euros incluyendo el cuarto de millón que debe, por sentencia judicial, al anterior administrador, y también a las tributarias (951.257 euros derivados del impuesto de sociedades de 2009) y logrará así equilibrar su tesorería.

Tras declarar el preconcurso de acreedores en septiembre pasado y no haber sido capaz de resolver sus deudas, la sociedad, participada al 95,44% por la administración provincial, se encontraba al borde de cumplir el plazo legal para declarar el concurso, por lo que solicitó dinero a la propia Diputación, que en vez de prestarselo directamente ha optado por avalar un crédito a 10 años, interponiendo como garantías la pignoración de los derechos sobre la deuda que mantienen los promotores del hotel del complejo (por valor de unos 900.000 euros) y 13.520 metros de terreno repartido en cinco fincas urbanas de Quitapesares valoradas en conjunto en algo más de un millón de euros.

Adiós a la compra de la Floresta y el campo de golf, a la venta.

La diputación quiere evitar que avalar el crédito de Segovia 21 —que obliga al pago de las cuotas que no satisfaga la sociedad y por tanto a hacer previsión económica de esa eventualidad— haga mella en sus cifras de endeudamiento, así qué ha optado por buscar otra fórmula, como la de declarar no disponible el crédito, precisamente de 1,8 millones, que figura en el presupuesto de este año para la compra del palacio de la Floresta, aparcando así la polémica adquisición del inmueble que pretendía usar para ampliar sus dependencias.

Por otra parte, el acuerdo entre las tres partes implicados supone que Bankia se hará cargo de la comercialización de las viviendas y parcelas de Segovia 21 que están financiadas por el banco, mientras que al mismo tiempo “se entablarán las negociaciones con la Diputación de Segovia para establecer un calendario de venta del campo de golf en proceso competido”.

El acuerdo salió adelante con los votos de los diputados populares del Gobierno provincial, la abstención del PSOE y el voto en contra de los diputados de UPyD y Ciudadanos, que coincidieron en sus dudas sobre la legalidad del aval —la secretaria de la Corporación aclaró este extremo a petición del presidente, Francisco Vázquez—, mientras María Cuesta (C’s) lamentaba que la Diputación “jugara a empresarios” y Juan Ángel Ruiz mostraba su total oposición porque “Segovia 21 está en situación de inviabilidad financiera”.

El portavoz popular, José Luis Sanz Merino, se mostró contundente en su respuesta a ambos portavoces, a los que acusó de vivir “en la bipolaridad política” respecto a la Diputación, proclamó la “absoluta legalidad” de la operación y defendió la decisión para salvar la sociedad de su grave situación “porque para eso nos han puesto, para dar soluciones imaginativas y válidas a los problemas” y no para “hacer lo fácil, que sería dejar que Segovia 21 se marche por el sumidero”.

Sanz Merino aseguró que las garantías exigidas para prestar el aval van “más allá de las necesarias” y afianzó este criterio leyendo una carta recibida esta misma semana en la que Pesares Segovianos, la empresa promotora del hotel, ahora paralizado, anuncia que ha mantenido contactos con empresarios americanos para la inyección de dinero que se destinará directamente a la construcción del hotel y así “nos podemos encontrar con que no hay que ejecutar el crédito porque Segovia 21 tenga dinero” por esa vía.

Aunque el portavoz socialista anunció inicialmente su voto en contra, durante el debate ofreció a los populares su abstención si se permitía la participación de los grupos en la negociación con Bankia y en grupos de trabajo para el seguimiento de Segovia 21 y que los remanentes del último ejercicio presupuestario se destinen a inversiones directas en los pueblos.

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