Izquierda Unida presentó su nuevo órgano ejecutivo en Segovia, la dirección colegiada, que con José Ángel Frías al frente como coordinador provincial está integrada por 11 del casi centenar de militantes de IU en la provincia. Forman parte de la dirección colegiada Carmen Cuervo, Ángel Galindo, Ana Peñalosa, Jacobo Peña, Dionisia Berzal, José Luis Ordóñez, Estela Gilbaja, Miguel Ángel Gómez, África Martín y Luis Peñalosa.
No se trata de un mero cambio semántico, como explicó Frías, “necesitábamos un cambio de estructura para una nueva etapa en la que pretendemos ser más activos en las movilizaciones sociales y en la búsqueda del conflicto, queremos ser un altavoz contra la opresión que el sistema sume a la clase trabajadora”, dijo. A grades rasgos, y en consonancia con las tesis del coordinador de Castilla y León, José Sarrión, el hombre fuerte de IU tras la XI Asamblea de IUCyL celebrada el 21 de octubre, la formación pasa de poner el énfasis en lo institucional -estar presentes en ayuntamientos, Cortes- a poner el foco en catalizar un cambio opinativo que redunde en políticas alternativas al sistema capitalista. En términos IU, construir un nuevo país a través de un movimiento político y social encaminado a la ruptura del régimen del 78; crear y fortalecer la Unidad Popular como movimiento y no como una unidad electoral. “No estamos tanto para captar votos como para explicar las causas, y contribuir a generar una sensibilidad socialista”, dijo Frías.
Ahora bien, si antaño el trabajo de “despierta-consciencias” se acometía desde el obrerismo sindical, en unos tiempos sin fábricas la agitación, el “conflicto”, en terminología Sarrión, pasa al ecologismo, al feminismo, a avivar el descontento contra recortes, contra la creciente desigualdad y el menoscabo de lo público. Plataformas que luego se sustancien en votos aglutinados por coaliciones encaminadas a una toma democrática del poder para una ruptura con el sistema capitalista. Para llegar allí en Segovia IU confía en coordinadoras transversales, que a su vez tienen tres coordinadores de área, José Luis Ordóñez, Miguel Ángel Gómez (coordinador en Cuéllar) y el histórico dirigente de IU en Segovia, Luis Peñalosa.
José Sarrión.
Un buen ejemplo de como quiere funcionar IU es el trabajo desarrollado por Ordóñez en la plataforma No Más Mierda de Fuentepelayo. Para cambiar las cosas hay que trabajar desde la base, y desde la base evidenciar que un cambio real y sostenido en el tiempo pasa por cuestionar el sistema. De hecho, no es casual que el propio Ordóñez sea ahora uno de los puntales de la nueva dirección colegiada.
Tras esta retórica está el convencimiento de algunos filósofos neo-marxistas, Sarrión y el propio Iglesias (al menos el Pablo Iglesias de antes de Vista Alegre) de que el trabajo político del siglo XXI no está tanto en los parlamentos como en “despertar” a la clase trabajadora (en sentido amplio) y hacerla consciente de que no existe un punto de encuentro con el poder económico, la nueva-vieja versión del “capital”. Los intereses de unos y otros son antagónicos, los unos buscan la igualdad económica y social, los otros la desigualdad.
En resumen, de lo que se trata es de pasar página del eurocomunismo, que con perspectiva histórica en España derivó en un posicionamiento residual de IU como mera “ala izquierda” del PSOE, y alinearse como motores de un nuevo orden ideológico que propicie un modelo productivo más justo y sostenible. El problema es que no se termina de ver cuál. El problema es que no está claro si, otra vez, la izquierda anticapitalista no está instalada en un bucle teórico fabricado de palabras.
Diputación
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16 noviembre, 2016
Buen artículo. Si que se termina de ver otro modelo productivo, claramente.Es un modelo que no necesita inversiones de 60M de € en una sg20 y los necesita en transporte público limpio y sostenible, que necesitamos médicos para emitir diagnóstico después de realizar una radiografía o que las familias con dependientes en más de un 90% no estén abandonadas e ignoradas. Si a esa cantidad de 60M€ sumas el Cat,el talud de padre claret, la parcela del instituto de San Lorenzo el superávit de la Diputación y el ayuntamiento de la capital es fácil entender que en Segovia habría hoy unos 150M€ para que todos viviésemos mejor, al fin y al cabo somos cuatro gatos. En resumen se llama decrecimiento.
Por último, si IU cae o no cae en un bucle teórico es lo de menos, creeme. Lo importante es que la sociedad, la mayoría de la gente, salga de este bucle sin fondo y que no salga de cualquier manera desesperada al modo Trump o fascismo.
16 noviembre, 2016
¿Anticapitalismo?
Yo creo, que antes de toda esa cantidad de “palabrejos” que no entiende ni Errejón, podían aclarar de una vez por todas lo siguiente:
¿A partir de cuanta pasta en una cuenta corriente se empieza a considerar capitalismo?
Y luego, ya si eso, seguimos con la fase 2.
16 noviembre, 2016
Se me olvidaba, que es muy importante. ¿Y a partir de que modelo de teléfono móvil y tablet se empieza a considerar capitalismo?
16 noviembre, 2016
Decimos cualquier cosa con tal de ganar votos, vaya chorradas que dice el amigo Frías. Claro que se necesita dinero para la SG20 como para otras muchas. Bla bla bla bla, demagogia barata. Una pregunta, antes de virar al anticapitalismo,¿Los comunistas eran capitalistas?