El primero, que apague (el fuego)

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Fuego y humo intenso. Un aparatoso incendio se ha desatado en el número 2 de la calle Cervantes y las alarmas han saltado entre los servicios de emergencia. Los bombeos tienen buenos tiempos de respuesta, pero están en su cuartel, en Nueva Segovia. Coger equipos y bajar…

Los efectivos de la Policía Local , con agentes en toda la ciudad y alta capacidad de desplazamiento son los primeros en llegar al lugar, como suele ocurrir, y se ponen a la tarea. En sus coches y motos podría haberlos sabiendo que la situación se repite a menudo, pero lo cierto es que no llevan máscaras, guantes, extintores o batefuegos (ni cizallas, ni botiquines, ni desfibriladores a punto, ni…) pero se deciden a actuar para evitar que el suceso se convierta en catástrofe. Uno entra con un extintor, otro le da apoyo ¡Fuera! antes de que el humo se meta demasiado en los pulmones. Otros repiten la actuación. ¡Fuera!. Dos más… “Está apagado”.

La imagen se tomó el día 17, en la calle Real. Pocos minutos después, los bomberos comprobaron la extinción de las llamas, controlaron y ventilaron el edificio y evacuaron a dos personas desde la parte más alta, con la autoescuela. Para entonces, los motoristas que habían participado en la extinción ya habían abandonado el lugar. Algunos aún tenían una tos seca y recurrente varias horas después.

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