La calle de Ochoa Ondátegui quedará cortada al tráfico de vehículos.
La ampliación de la zona peatonal en el lado oriental del Acueducto dejará al barrio del Salvador sin una de las tres salidas que tiene actualmente, la de Ochoa Ondátegui —donde está actualmente la parada de taxis— que se quedará cortada totalmente al paso de vehículos y dentro de la zona peatonal protegida con bolardos de granito.
La medida, una novedad respecto a los planes explicados hasta ahora, cuenta con el respaldo de la asociación vecinal del Salvador, que han admitido el corte que convierte a las calles Alamillo y San Alfonso Rodríguez en el cinturón exterior del barrio, del que sólo se podrá salir en vehículo por las calles de Soldado Español y la de Cañuelos, a la espera de “posibles cambios de sentido en algunas calles” aún no decididos, según confirmó el mayor de la Policía Local, Julio Rodríguez Fuentetaja.
El Gobierno que preside Clara Luquero también ha conseguido el apoyo total a las medidas de reordenación de la plaza Oriental del colectivo de taxistas, al parecer satisfechos por el cambio de ubicación de la principal parada de este servicio público en la ciudad. Los coches abandonarán Ochoa Ondátegui y serán trasladados a la plaza, hoy peatonal, situada junto a la entrada al paseo de Santo Domingo.
El cambio supone convertir un tramo de la acera, sumamente transitado por los peatones, en vado para la circulación de los taxis, para lo que se efectuarán las obras necesarias para eliminar la acera de granito, además de reparar el cerramiento sobre la caída a la calle Gascos desde la nueva parada cuya apertura obliga también a bajar unos metros hacia San Lorenzo la actual parada del autobús a la estación Guiomar.
Espacio en el que se creará la nueva parada de taxis en la plaza Oriental.
Precisamente, los cambios provocarán una mayor presión del tráfico en la desembocadura de Vía Roma en la plaza Oriental ya que ese ha sido el punto elegido para las paradas momentáneas que ahora realizan a diario junto al Acueducto centenares de vehículos para recoger y bajar viajeros. “Hay que acostumbrarse y andar unos metros más” señaló Luquero advirtiendo que la parada junto a los bolardos cuando estén recolocados estará terminantemente prohibida.
Como en el caso de la entrada a la parada de taxis, Rodríguez Fuentetaja consideró que el cambio de la zona de la parada “del momentito” no generará demasiados problemas añadidos, pese a que obliga a embocar los coches que salen a la plaza Oriental hacia Vía Roma y por tanto, a buena parte de ellos hacia la cuesta de San Gabriel, uno de los puntos más conflictivos para el tráfico de la ciudad precisamente por su habitual saturación.
No figuraba en los planes explicados este jueves la prohibición del aparcamiento de motos en la plaza en la que se ubican los negocios de restauración de la plaza Oriental aunque la alcaldesa explicó que “no se descarta” un cambio en ese sentido aventurando que ese aparcamiento para motos se estableciera en la explanada junto a la antigua Unión Previsora, hoy zona de aparcamiento de coches con unas doce plazas de capacidad.
Diputación
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24 noviembre, 2017
Es un error abismal cortar la calle Ocho Ondategui y dejarnos en el barrio sin una salida fundamental, sobre todo en horas puntas y fines de semana cuando Padre Claret se satura de trafico. Como se nota el desconocimiento de esta ciudad de la alcaldesa. Por favor no nos penalicen más a este barrio. Son profesionales en hacer menos vivibles los cascos históricos y ahora que ya han acabado con la vida en el casco antiguo quieren ampliar sus politicas de despoblación urbana a este barrio. Señora alcaldesa los que al contario que usted si vivimos en Segovia necesitamos unas condiciones de movilidad dignas porque si no acabaremos siendo todos vecinos de La Lastrilla donde allí las politicas de movilidad si favorecen la vida de sus vecinos