Posted By Redacción on 21, Ago, 2017

Siguiendo la convocatoria de la Confederación de Asociaciones Culturales Musulmanas de Castillea y Léon, que en Segovia gestiona las dos mezquitas de la capital, alrededor de un centenar de segovianos musulmanes se concentraron el 20 de agosto, a las 19 horas, en el Acueducto de Segovia para mostrar su rechazo a los atentados yihadistas en Barcelona.

Con una pancarta de condena, banderas españolas y mensajes contra el terrorismo, contra el racismo, contra la matanza de inocentes y el “Todos somos Barcelona” y “No soy terrorista”, los musulmanes segovianos pretenden desvincular el terrorismo del Islam. “No son islámicos, no hay peor crimen en el Corán que quitar una vida”, repetía Mohammed Elmizeb, presidente de la FECOMCYL. Recordó también que el 90% de las víctimas del terrorismo yihadista son musulmanes y lanzó un mensaje de unidad. El imán de San Lorenzo, Mohammed, declamó precisamente una shura coránica relativa a la unidad y la concordia con los profetas Abraham, Moisés, Jesús.  Elmizeb concluyó recordando que Salam, la paz, es una pieza clave del islam. “Salam para todos”. Un último interlocutor agradeció el buen clima social existente en Segovia. Al grito de “Todos somos Barcelona” terminó el evento.

Manifestación contra el terrorismo. Mohammed Elmezib dando lectura al manifiesto.

Amenazas y racismo

Un buen clima social que sin embargo está siendo sacudido de firme por extremistas de toda índole. Pintadas islamófobas en Padre Claret y amenazas de muerte al propio Elmizeb, a las que el presidente de FECOMCYL trató de restar importancia. Se palpa el miedo en la comunidad musulmana a devenir los “chivos expiatorios”, precisamente la estrategia del DAESH en su exportación de la yihad a Europa. Eso en el mundo real, en el virtual donde la demagogia encuentra su principal vehículo de transmisión, la triste realidad es que en lugar de arremeter contra el terror, en lo que todo mundo coincide, se multiplican las peleas entre racistas e integracionistas. Una dinámica perfecta para que cada parte arrime el ascua a su particular y simplona sardina ideológica. De hecho, en la manifestación del domingo se notó un intenso despliegue policial, de la Nacional y la Local. “Más que nada, porque no salte un racista”, explicaban responsables del operativo.

Educación como salida

¿Qué se puede hacer? Elmizeb recordaba luego, en declaraciones a la prensa, la necesidad de estar sobre los hijos, controlar sus redes sociales. “Un padre de Ripoll ignoraba que su hijo estaba en lo del atentado, se pensaba que iba a una boda. Se enteró por las noticias”, decía. También educación. Para los musulmanes buena parte de un proceso de radicalización tiene que ver con la falta de formación en “el verdadero islam”. Los chicos no van a las mezquitas, no entienden el islam y viene cualquiera y los fanatiza. Frente a eso, la FECOMCYL pregona la bondad de impartir religión islámica en las escuelas, a pie de igualdad con el catolicismo.

Es un tema complicado. La legislación ya permite a las religiones con convenio con el Estado (además de Catolicismo e Islam, el judaísmo, el cristianismo ortodoxo y las tres principales ramas evangélicas) enseñar su religión en la escuela pública. Sin embargo, se precisa un número mínimo de padres que lo pidan, algo que todavía no se ha dado en Segovia. Para el próximo curso Elmizeb está convencido de que ya habrá “formación en el islam” para los chicos cuyos padres lo pidan en algún colegio, especialmente en zonas donde existe una gran concentración de inmigrantes.

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