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Crónica de una muerte anunciada

El Gobierno de España acaba de adjudicar la Agencia de Inteligencia Artificial a La Coruña. Si ustedes leen las bases de la convocatoria podrán comprobar qué los requisitos establecidos para valorar las ofertas daban pocas posibilidades de éxito a la candidatura de Segovia. Se trataba de la crónica de una muerte anunciada. Todo indica vista la potencialidad de la adjudicataria que el Gobierno ha actuado con objetividad en su valoración. Se ha primado el tejido de empresas tecnológicas y su conexión con el mundo universitario que está permitiendo no sólo crear riqueza sino también empleo de alta cualificación, y sitúan a esta ciudad gallega a la vanguardia en materia de inteligencia artificial. Un potencial que debe permitir la generación de un centro de desarrollo con potencial internacional. En un ejercicio de transparencia para disipar cualquier tipo de dudas no estaría demás que los segovianos conozcan a través de la página web del Ayuntamiento el proyecto presentado. En caso de considerarse injusta la asignación cabe la posibilidad de iniciar un recurso como ha hecho el alcalde socialista de Granada. Una forma de reclamar justicia en la defensa de nuestros intereses.

Una vez más el circo mediático no se ha hecho esperar. Lo que ha trascendido a la opinión pública es la necesidad de buscar un culpable. El Ayuntamiento, la delegada del Gobierno y el partido que sustenta la acción de gobierno municipal han echado la culpa a la Junta de Castilla y León; y el presidente de la Junta y la oposición en el Ayuntamiento al Gobierno de España. Y todo ello al margen del contenido y alcance de la convocatoria. Ni unos, ni otros han realizado una sola crítica que se fundamente en un criterio objetivo. Tratan de polarizar las posiciones como si hooligans de un equipo de fútbol se tratase para ejercer el efecto de arrastre sobre el conjunto de la población y fidelizar votos mediante el desgaste del contrario. Una forma hoy en día muy habitual de entender la política y en la que se nos toma por tontos a la inmensa mayoría de los ciudadanos. Por si no lo han entendido estas personas con vocación de caza conviene recordarles que los criterios de valoración y adjudicación en este proceso lo ha determinado el Gobierno de España. Por tanto, si hay algún acierto o desacierto es del Gobierno, que como órgano de adjudicación actúa solidariamente.

La Agencia de Inteligencia Artificial se nos ha presentado como un instrumento más para mitigar los efectos de la despoblación, al igual que otros organismos de naturaleza pública afines como pueda ser el Centro de Innovación y Tecnificación para la Formación Profesional. Si vienen, serán bienvenidos, no les vamos a hacer ascos. Permitirían crear un determinado número de puestos de trabajo directos en la ciudad, y unos pocos indirectos.  El asentamiento de órganos de carácter institucional con empleo público o cuasi público no son la solución al déficit de industrialización que tiene nuestra provincia y el resto de la comunidad. La apuesta desde el ámbito institucional por este tipo de soluciones demuestra la ausencia de proyectos alternativos capaces de dar repuesta en la ciudad y provincia al éxodo juvenil, la creación de empleo de calidad y a la despoblación. Ni Junta, ni Ayuntamiento tienen, ni tendrán un proyecto industrial alternativo a corto y medio plazo. Su desarrollo e implantación requiere tiempo e ideas que puedan cristalizar. No han hecho los deberes y de este fallido proceso hay que aprender una lección: la senda que marcan ciudades como La Coruña o la Xunta de Galicia.

La proximidad geográfica y las magníficas vías de comunicación de la ciudad de Segovia y la provincia con la capital de España y el resto de la península nos proporciona a los segovianos un potencial económico que ya quisieran para si otras partes de nuestro país, incluso con mayores tasas de despoblación y envejecimiento. La cuestión es cómo se puede rentabilizar. Acertar con el desarrollo de una línea estratégica y sus proyectos de desarrollo no es fácil. Su implantación requiere tiempo y profesionalidad, y aun así no siempre se alcanzan los resultados esperados. Segovia precisa de una acción proactiva en la captación e implantación de proyectos industriales en la ciudad y provincia que se sustenten en empresas solventes y punteras. Nuestro reto es generar un tejido industrial sólido, sostenible y de vanguardia que cree riqueza, empleo con equilibrio territorial, a la vez que actúe de fuerza motriz para la construcción y el sector servicios.

Para dar respuesta a este problema, como ya recogí en la entrada de este blog de acueducto2  de fecha 30 de octubre 2022, titulada “Un consorcio para el desarrollo industrial de Segovia”, lo más acertado es gestionarlo a través de una herramienta ágil para la toma de decisiones, lejos de la esclerosis institucional que preside la Diputación o el Ayuntamiento, si bien respetando su carácter representativo e institucional. Un consorcio orientado a la gestión y formado por miembros de la Diputación, Ayuntamiento de Segovia, Cámara de Comercio, FES, Universidad de Valladolid e IE puede situarnos en la mejor posición para impulsar y gestionar futuros proyectos empresariales dotando a la toma de decisiones de un mayor contenido técnico y superando la cultura del populismo de corto alcance que se ha instaurado en la gestión de las instituciones públicas. Se trata de seguir, de alguna u otra manera, la senda que ha proporcionado a La Coruña el honor de ser adjudicatarios de la agencia de inteligencia, y dejarse de tonterías. Muchos segovianos lo agradeceríamos.

Author: Andrés Segovia

Política provincial, autonómica y nacional

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17 Comments

  1. Excelente artículo..solo matizar que orense era la otra provincia gallega que se presentaba al proyecto..es mentira que la junta de Galicia apoyará una provincia en detrimento de la otra

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    • De quitarse el sombrero señir Besa. Gracias por expresar tan acertadamente lo que muchos pensamos.
      Vivimos en una ciudad (y provincia) abandonada de la mano del hombre.
      Nuestros gobernantes, unos y otros no la quieren (salvo para asentar sus posaderas a buen sueldo público).
      No hay proyecto de arreglo de un casco histórico que ya quisieran muchas ciudades en el mundo, salvo desidia y edificios avandonados.
      Qué decir de la industria… Cuando podíamos optar por situación y tamaño a unas tecnológicas de calado.
      Pero no dulzaina y tamboril (que también amo) y cochino asado en favor de los cuatro de toda la vida e inversión de los apellidos “de toda la vida” en Ciudad dormitorio de estudiantes y cuatro turis pernoctadores de tres al cuarto… Lo dicho enhorabuena por su reflexión.

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      • Sólo un apunte, ContribuLLente. La firma del artículo es la de Andrés Segovia. Gracias por su participación.

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    • ¿Un consorcio con administraciones públicas y la federación de empresas de Segovia es su solución? ¿Qué le parece bajar impuestos y trabas administrativas a cualquier empresa que quiera instalarse y no basarse en lo más parecido que existe a los planes quinquenales? ¿No sabrá mejor una empresa lo que quiere el consumidor que la política? Denle esa facilidad y no será necesario crear el enésimo ente pagado por todos. Parece mentira, con la experiencia que comenta en su presentación, la falta de ideas liberales que, a fin de cuentas, es lo único que no se ha probado y está demostrado que funciona

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  2. Otro Segopolis, como hace muchos años se planteo , para Loa de algún representante político y que ahora se pretende para buscar un puesto de representación publico-privado de un representante empresarial , no es la solución, ni siquiera a medio plazo.
    El encuentro de una solución pasa por aplicar las sinergias del del desarrollo económico que se está produciendo al otro lado de la Sierra del Guadarrama, en una provincia abocada a una desaforada despoblación.
    Siéntense los representantes políticos de cada lado y busquen la fórmula del todo uno, sin personalismos.

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    • Segópolis era una Asociación de Arahuetes para salir en prensa, sin más. Nunca creyeron en su potencialidad, porque entre otras cosas era imposible, ya que captar empresas, poner en marcha nuevos proyectos y crear riqueza requiere altura de miras, y este señor iba a lo suyo. Otra cosa es que al margen del Ayuntamiento se hubiese creado un órgano coparticipado de capital que hubiese gestionado con otra visión este proyecto, que es lo que entiendo se está proponiendo en este artículo. O sea la creación de un consorcio como han hecho otras ciudades. No parece mala idea.

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      • Piensa que los que promuevan el
        Consorcio, van a poner dinero de su bolsillo?
        Bastante tiene alguno con mantenerse.
        Lamento defraudarle peor no se llegará a nada .
        Solo queda esperar a un buen remedio.

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    • Sr. Jesús creo que sigue usted enrocado en lo de los buenos y los malos. Esto es rancio. Qué igual da que la Xunta apoyase una ciudad u otra, que no queda claro. Lo importante es que entre todos desde hace años han creado un tejido industrial que sirve de palanca para este proyecto. Y por eso se lo ha llevado A Coruña. No busque culpables como dice el artículo y vote a quien quiera. Esto no va de votar al Psoe o al PP, aunque usted lo necesite. Esto va de capacidad de gestión y de buscar un futuro para nuestra ciudad y provincia, lo que los políticos actuales ni saben ni son capaces de hacer.

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  3. Con el gobierno del PSOE, en Segovia no hay presente ni futuro.

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  4. Es increíble que a una hora por autopista a Madrid y autovía a Valladolid y a 27 minutos de Ave, no sea posible traer una sola empresa que cree unos cuantos puestos de trabajo en Segovia. Y hayamos destrozado lo poco que había como La Choricera o próximamente la Base Mixta. Y es algo que ocurre aquí desde hace muchos años. Culpables? Entre todos la matamos y ella sóla se murió. Y nuestros políticos de todo color? Brillan por su negligencia, ineptitud y servilismo.

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  5. Don Antonio no busco ni malos ni buenos, solo contesto a un comentario en el que se afirma que la Xunta no había priorizado.
    Y estoy de acuerdo con usted en que lo importante es crear un tejido industrial que permita optar a estos proyectos y por supuesto estoy convencido que Segovia, aunque hubiese tenido el respaldo de la Junta, no habría conseguido su propósito.

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    • Discúlpeme Sr. Jesús pues le he interpretado mal. Estoy totalmente de acuerdo con el comentario que ha hecho

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      • Tanto la gestión de la Diputación como la del Ayuntamiento, aquí en Segovia da igual unos que otros, son un desastre, vamos no existe. Cómo propuso hace unos años el alcalde de Madrid debieran tener sólo participación en los plenos para deliberar y proponer, y no asumir ningún otro papel porque no están preparados y no valen. Y como prueba un botón de lo que pasa aquí en Segovia. Van a cobrar dietas teniendo cuantas más comisiones mejor y a buscar la liberación cuando pueden. Mucha penita ya que se salvan con los dedos de la mano, y además sin ninguna experiencia en gestión. Así que totalmente de acuerdo con el Sr. Segovia de crear un Consorcio en el que no puedan meter mano si no para aprobar o rechazar con el peso que tengan en su composición las instituciones que prestigien y aporten algo.

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  6. Se aprende más, y se tiene mejor idea de lo que pasa en segovia, leyendo comentarios como los anteriores que leyendo los panfletos político electorales que escriben Aceves y peñalosa ( no se porque no se da opción a que escriban políticos de otras fuerzas para poder rebatirlos si fuera el caso )… Ojalá hagan público el proyecto completo, pero lo dudo

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  7. Esta muy bien eso de descentralizar instituciones para evitar despoblación y darle a Sevilla y a Coruña las instituciones, todo muy lógico si…

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  8. Muy de acuerdo con el comentario de Maria fem sobre todo con lo de los panfletos políticos pues son infumables.
    No estoy de acuerdo con el comentario de Fernando, o acaso el comportamiento del actual Ayuntamiento y la Diputación no son propios de gobiernos liberales. No hacen nada, dejan actuar al ‘ laissez faire’, y así nos va. Necesitamos un motor que tire del carro y actúe con una hoja de ruta definida dejando actuar al mercado en lo que le toque, pero evitando también que todo el suelo industrial caiga en manos de especuladores como está ocurriendo en la ampliación del Polígono de Hontoria con los valencianos. Para mí los extremos son malos y lo que propone este señor tiene más problemas que ventajas. Busquemos el punto intermedio

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