Posted By Redacción on 27, Feb, 2016

Una propuesta del concejal de IU, Ángel Galindo, en el que solicitaba la creación de un espacio para la memoria democrática en el edificio de la antigua biblioteca, anteriormente cárcel en la que fueron represaliados multitud de segovianos provocó este 26 de febrero una agria discusión por el rechazo frontal que presentaron desde los bancos de UPyD y del PP, que tacharon la iniciativa de “revanchista” y “contraproducente” indignando a la alcaldesa, Clara Luquero, que les acusó “equiparar a ambos bandos [de la Guerra Civil] y eso no es admisible”.

El de IU inició su intervención recordando que cientos de segovianos fueron encerrados en la vieja cárcel a partir de 1936 “por defender la libertad” por lo que los segovianos “estamos en deuda con ellos” por lo que abogó por hacer visibles a esas víctimas mediante un espacio educativo que “ya existe en otros lugares del mundo”.

La madeja comenzó a enredarse cuando el portavoz de UPyD, Cosme Aranguren pidió que las lecciones de historia se trasladen a los centros educativos y tachó la propuesta de revanchista, secundado por el popular, José Luis Huertas, que recordó la larga historia y usos del edificio y vio en la iniciativa, circunscrita en sólo seis años, un intento de “usar un edificio para la confrontación y erigiéndose en mantenedores de la democracia de la ciudad, según quien lo exponga. Son las mismas herramientas que una dictadura”, se quejó.

Ambos recordaron que los represaliados en esa cárcel ya cuentan con una placa ante la fachada del mismo edificio e instaron a Galindo a “cerrar las heridas”. Galindo se cuestionaba para ese momento si “a la vista de los argumentos, el memorial democrático es más necesario de lo que pensaba”, mientras Luquero se quejaba de que se tratara de poner en el mismo nivel a ambos bandos de la guerra y enfatizó el dramatismo de aquellos días recordando los gritos que cuentan que se oían desde la cárcel: “Segovianos, haced algo, que nos van a matar”.

Después cerró el debate entre quejas de Aranguren, que reclamaba tener un nuevo turno de palabra y que acabó siendo llamado al orden por la regidora, mientras él hacía constar su queja formal en el acta.

Y eso que el pleno marchaba viento en popa. Hasta ese momento se había aprobado el Plan de Juventud por unanimidad y entre efusivas felicitaciones de todos los portavoces al concejal del área, Álvaro Serrano por el trabajo, “bien hecho y con participación de todos los grupos”, repitieron.

También fueron unánimes los acuerdos para homenajear a ciudadanos como el restaurador, Dionisio Duque, al que se dedicará la glorieta de Padre Claret; el que fuera obispo de la Diócesis, Antonio Palenzuela, a cuya memoria se dedicará una placa que estará en la fachada de la residencia de las Hermanitas de los Pobres, también en Padre Claret; y a cinco policías locales —tres oficiales y dos agentes— que recibirán la medalla al Mérito Policial.

Sentencias pendientes.

Había otros asuntos polémicos en el orden del día, como lo era la aprobación del convenio con los propietarios del talud de Padre Claret para ejecutar las sentencias derivadas de la expropiación de aquellos terrenos para la construcción del parking que supondrá un desembolso de 6,6 millones de euros y condicionará el presupuesto municipal durante cuatro años, como se encargó de recordar la portavoz de Ciudadanos, María José García, y subrayó también la popular, Raquel Fernández que lamentó que los segovianos paguen así “uno más de los errores de los gobiernos socialistas en el Ayuntamiento”. El socialista, Javier Reguera no discutió: “es una sentencia y hay que cumplirla”. Los votos favorables de PSOE y UPyD propiciaron la aprobación del acuerdo.

También irrita especialmente a la oposición —salvo a IU, que mantuvo su abstención— la modificación de los horarios de Carga y Descarga en la calle Real y el centro, pero la oposición pareció resignada ante el rechazo de todas las mociones presentadas y la imposición de la norma desde finales de marzo repitiendo sin demasiado énfasis sus quejas por la falta de participación en su redacción. La medida se aprobó con el voto de calidad de la alcaldesa.

En la misma sesión se aprobaron por unanimidad las mociones de IU en apoyo a las víctimas del accidente del Alvia en Santiago; de UPyD sobre vehículos eléctricos, aunque solo en la parte que fija bonificaciones del 75 por ciento durante cinco año sobre el impuesto de circulación para ese tipo de transporte; y la defendida por el PP, aunque modificada durante su discusión, reclamando el apoyo del Consistorio a la asociación Amanecer.

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