Posted By Redacción on 2, Ago, 2016

El juzgado de lo Penal Nº1 de Segovia, tras juicio celebrado el 27 de Julio, ha dictado sentencia condenatoria contra dos vecinos de Segovia de etnia gitana y que en febrero de 2016  agredieron a un guardia civil fuera de servicio en la discoteca Tantra de la capital segoviana.

A uno de los agresores se le ha condenado a 6 meses de prisión por delito de atentado a un agente de la autoridad y otros 6 meses de prisión por delito de Lesiones. El segundo interviniente se le ha impuesto pena de 4 meses de prisión por atentado a un agente de la autoridad y 8 meses de prisión por delito de lesiones. Además, ambos deberán indemnizar conjunta y solidariamente al Guardia Civil agredido en cuantía de 4.500 € por los días derivados de su sanidad y en 1.712,05 € por las secuelas derivadas de sus lesiones.

Los hechos se remontan a la noche del 6 de febrero, cuando el agente —adscrito al puesto de Cantalejo— fue reconocido por los ahora condenados como miembro de un grupo antidroga, él mismo se encontraba en compañía de su pareja cuando escuchó a sus espaldas frases menospreciativas de la siguiente guisa: “todos los Guardias Civiles sois unos hijos de puta y unos chulos” agregando que ellos también tenían pistola, llegando a gesticular con la mano, simulando que portaban un arma y apuntando a la cabeza del Guardia Civil, quien al darse la vuelta en dirección a las personas que le estaban amenazando recibió un fuerte golpe en la cabeza que le hace perder el equilibrio, cayendo al suelo, donde los acusados le siguen golpeando. A consecuencia de estos hechos el guardia civil agredido,resultó con heridas consistentes en policontusiones, traumatismo craneoencefálico, fractura costal, rotura del incisivo superior derecho, herida incisa en borde palpebral izquierdo, contusión ocular bilateral con derrame conjuntival bilateral y hematoma bilateral , precisando para su curación de sutura quirúrgica.

Pena “extremadamente pequeña”

Conocida la sentencia la Asociación Española de Guardias Civiles he emitido un comunicado valorando como “satisfacción a medias” la pena impuesta. “Una vez más consideramos extremadamente pequeño el tiempo de condena sentenciado, debiendo haber tenido en cuenta como agravante el hecho de ser agredido el Guardia Civil fuera de servicio y en presencia de su compañera sentimental. Un servidor público debe de estar protegido y las condenas más acorde a la gravedad del hecho, se sigue dando la impresión a nuestro juicio, que agredir a un Guardia Civil sale realmente barato, todo ello por supuesto respetando como no puede ser de otra forma la resolución judicial”, explican en un comunicado.

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