Posted By Redacción on 6, Nov, 2015

Es un edificio clásico de la ciudad al que prácticamente todos los segovianos se han asomado alguna vez, quizá por la singularidad que entraña una vivienda unifamiliar con gran jardín en mitad de una de las vías más transitadas de la ciudad donde todo son hace mucho tiempo edificios en bloque de viviendas. Y sin embargo, parece tener los días contados.

La Junta de Gobierno local dio aprobación inicial, este 5 de noviembre, al convenio que permitirá la construcción de un gran bloque de viviendas, de hasta seis plantas, en la finca donde se ubica el chalé “de los Rueda” (los segovianos siempre le han designado con ese apellido, mucho más que con su nombre: Villa Estrella) y el ajardinamiento de otra parte de la finca junto a la cara Norte, la más desconocida por dar a la parcela particular, de la iglesia de Santo Tomás, según explicó la alcaldesa, Clara Luquero, que matizó que el caserón “no tiene protección alguna” en este momento.

La finca, de 6.600 metros cuadrados, podrá albergar un máximo de 66 viviendas, algunas de las cuales serán de titularidad municipal, ya que a la ciudad le corresponde un diez por ciento de la edificabilidad, además del espacio para zona verde citado.

El convenio forma parte de un paquete de acuerdos con propietarios que, en forma de ordenación detallada de Unidades urbanísticas completará el Plan Especial de las Áreas Históricas (Peahis), dispuesto ya para su aprobación inicial, este mismo mes, según pretende el Gobierno local.

De hecho, en el mismo marco se aprobó otro acuerdo similar para la Unidad “Puerta de Ciudad”, referido al chalé ubicado en Vía Roma esquina con el camino de la Presa —en la finca de la fábrica de Loza— que ganará en edificabilidad a cambio de un retranqueo que la alejará del puente y permitirá el ensanche de la calle y sus aceras. Un destino similar se concretará en los próximos días para la parcela del caserón ubicado, justo enfrente (Vía Roma esquina con Los Vargas).

El paquete de convenios pendientes para completar el Peahis afecta también, entre otros, a la gasolinera de Padre Claret, donde se permitirá levantar un hotel; la ordenación del solar de la calle San Francisco (junto a la casa del Sello); la apertura del callejón de la calle Real (junto al bar La Tropical) permitiendo el acceso a la muralla e incluso el ascenso hasta el patio del Seminario mediante un ascensor, donde, en virtud de otro convenio con el Obispado también se podrá acceder a esa parte de la muralla desde el Postigo a cambio de dejar fuera de la protección integral las últimas construcciones ya realizadas en el Seminario.

El obispado es también titular de la finca del Hospital de la Miseriordia, donde también se quiere abrir el acceso a la muralla medieval.

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