Hace tiempo que el Banco de Alimentos ha comprobado que la unión hace la fuerza y convoca cada año una “super recogida de alimentos”, a nivel nacional, que sirve para paliar las necesidades que siguen existiendo.
El responsable del Banco de Alimentos en Segovia, Rufo Sanz, considera que el resultado de la campaña de este año ha sido bueno pero, por la magnitud de las cantidades que se manejan, algunas veces es complicado manejarlo.
Durante el pasado fin de semana no hizo buen tiempo pero los segovianos no dejaron de colaborar y superaron la cantidad de alimentos recogidos el año anterior en unas 4 toneladas. Con todo, algunos datos no se conocerán hasta que se recojan todos, también los que han sido donados por los segovianos de algunos puntos de la provincia, porque los voluntarios, como ya se ha dicho, se vieron superados en algunos momentos.
La magnitud de la campaña, el que se desarrolle a nivel nacional, es bueno de cara a que el resultado sea positivo pero, los pequeños Bancos de Alimentos de las provincias, con esta avalancha, se ven desbordadas por no tener la infraestructura adecuada.
Dice Rufo Sanz que el grupo de voluntarios del Banco de Alimentos es “majo” pero, son voluntarios, “son personas que ven que hacen falta y… echan una mano, lo cual es muy de agradecer pero…”, cuando lo recogido tiene esa excepcional magnitud…
Durante la última campaña han sido 25 puntos de recogida en la provincia más los establecimientos de Segovia y… algunos quedan por recoger. En cuanto a las empresas que han conseguido que esta campaña fuera una realidad están Día, Mercadona, Carrefour y Unide…
Pero, a estas alturas de la historia, lo importante es saber la situación de Segovia desde un punto de vista económico y social hoy y, Rufo Sanz, quien maneja desde hace años este Banco de Alimentos, asegura que se observa que las cosas van “algo” mejor, no aparecen más familias necesitadas pero, aún así mantienen una cartera de cuatro mil personas atendidas y, si los medios fueran otros, se debería atender a otros cuatro mil para tener realmente al día a nuestra provincia.
El problema se encuentra en que las infraestructuras no son las adecuadas y, las largas distancias de algunas zonas de la provincia con la capital (hasta más de 100 Km) solo consiguen complicar las cosas. De hecho, en este momento, desde el Banco de Alimentos se está trabajando en la búsqueda de colaboración con Asociaciones de diverso tipo, implantadas en estas zonas de la provincia alejadas de la capital para ampliar su campo de acción y llegar a todos los necesitados
Además, el Banco de Alimentos está poniendo en marcha campañas en contra del despilfarro doméstico de alimentos (muchas toneladas diarias son desperdiciadas cada día) y, de que las empresas de alimentación colaboren con los alimentos que por su caducidad no pueden ser vendidos pero, en cambio, son perfectamente útiles para el consumo.
Al preguntar a Rufo Sanz por la situación de las infraestructuras del Banco en Segovia, reconoce que el dinero aportado por Amancio Ortega como donativo (cuatro millones de euros), dio un “empujón bueno” a los medios con los que contaban. Algún vehículo más, mejores estanterías de almacenamiento y equipaciones adecuadas para los voluntarios, fueron los primeros logros pero, en cuanto al almacén, aún no se ha conseguido todo.
Semana del Voluntariado
El miércoles 10 de diciembre, el jueves 11 y el viernes 12, se van a celebrar en Segovia diferentes actos con la intención de dar visibilidad y honores a quienes realizan funciones imprescindibles en las diferentes organizaciones y ONGs que luchan a diario por la mejora de las condiciones de vida de los más desfavorecidos.
Estas jornadas se organizan desde la Plataforma del Voluntariado de Segovia y el Ayuntamiento de la ciudad.
El miércoles, tras la presentación de las jornadas, se contará con la participación de D. Isidoro Macías, Franciscano de la Cruz Blanca, conocido como “Padre Pateras”, quien durante años ayudó a miles de personas en peligro al atravesar el estrecho en este tipo de embarcaciones. En los días sucesivos serán las exposiciones, las charlas sobre el voluntariado y una concentración con la lectura de un manifiesto. Estas actividades pretenden dar su lugar a la labor que de manera callada realizan a diario miles de personas.
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