Un antiguo celador de 69 años, ya jubilado, del Centro de Salud Segovia I, en la calle Santo Tomás, se quitó la vida el 4 de junio, sobre las 19.00 horas, al lanzarse desde la quinta planta del edificio. Se da la circunstancia de que en 2012, también en el ambulatorio, otra ex-empleada (de 67 años y de atención teléfonica) se lanzó desde la quinta planta. Según fuentes de la Junta, el de ayer es el tercer caso de suicidio de que se tenga constancia en las instalaciones del Sacyl.
El centro de Segovia 1 es uno de los pocos edificios de libre acceso y elevado. Descartados otros factores, como la existencia de servicios psiquiátricos que no es el caso, esa facilidad de acceso a zonas de altura explicaría la insólita reiteración de suicidios en el ambulatorio. “Cualquiera puede llegar a la quinta planta, abrir una ventana y tirarse”, explican los trabajadores. Hay otra circunstancia que explica por qué tres suicidas han elegido el mismo lugar para matarse: la muerte con notoriedad.
Algunas tipologías de suicidas buscan la notoriedad, un final dramático que no pase desapercibido. Ese afán de notoriedad, una suerte de ajuste de cuentas con una sociedad insolidaria con el sufrimiento del suicida, convierte algunas zonas en especialmente atractivas para el suicida, como sucedía, por ejemplo, con el acueducto de Segovia antes del cerramiento de sus accesos en el tramo central sobre el Azoguejo.
Diputación
Recent From Noticias
Publicidad
Recent From Recomendados
Novedades segovianas para el día del libro 21, Abr, 2024
Libros + vendidos
Últimos comentarios