Dejamos por fin 2020, el que probablemente sea considerado el peor año de nuestras vidas. El consuelo de que podamos seguir disfrutando de risas y llantos con los nuestros, que podamos seguir pagando facturas, que mantengamos el empleo con un sueldo digo, no es suficiente si dispones de la empatía suficiente para compartir dolor con aquellos que sí han sufrido las duras consecuencias de esta crisis sanitaria, social y económica.
La pandemia puso patas arriba nuestras vidas, nuestras rutinas, nuestras costumbres y nuestra forma de relacionarnos, pero sobre todo puso de manifiesto lo sensible de nuestro sistema, la precariedad que nos rodeaba y el modelo económico neoliberal que regía nuestras vidas en precario, y que ha fallado estrepitosamente.
Y mientras sacaba lo mejor de nosotros como sociedad, también sacaba lo peor de la política y de aquellos que se venían lucrando de la opresión de los demás. Los primeros llegando tarde en muchas medidas y los segundos actuando sin la más mínima sororidad pidiendo seguir lucrándose con la desgracia de la gente.
Como sociedad hemos demostrado que somos mucho mejores y más fuertes que cuando nos hacen competir los unos contra los otros. La redes vecinales y los barrios fueron los primeros en dar una respuesta colectiva a los problemas que iban surgiendo, fueron más rápidos y efectivos, demostrando a todos los políticos, de cualquier color, que buscar el bien común, ni es difícil ni complicado.
La sociedad fue la primera en demostrar que la deslocalización de la producción de materiales había sido un error del sistema, ya que cuando más se necesitaban no estaban disponibles, y fueron, principalmente mujeres, quienes con sus conocimientos y con su trabajo, se organizaron para ofrecer esos materiales de protección que no llegaban.
Fue también la sociedad la primera en tejer la acción social en los barrios, mucho antes que las administraciones públicas, y a través de despensas solidarias hicieron llegar lo básico a quien más lo necesitaba.
Aquellos que trabajan en fábricas, fueron los primeros en demostrar, que cualquier cosa se puede reconvertir para el bien común, pusieron a disposición sus conocimientos y se pusieron a fabricar esos respiradores tan necesarios.
Fue nuestro personal sanitario quien se organizó para luchar contra el virus y contra la precariedad que asolaba la sanidad pública. Fueron ellos quienes idearon cómo buscar cualquier sitio disponible para salvar el máximo de vidas posible, quiénes agarraban la mano de aquellos que se iban para que su adiós no fuese tan solitario. Fueron ellos quienes trataron de conectar a las familias para combatir la soledad y el miedo que provocaban las camas del hospital.
Residencia Asistida de Segovia, a mediados de marzo.
Fue el personal de residencias y de ayuda a domicilio quienes pelearon por nuestros mayores, quiénes les protegían a pesar de las órdenes administrativas que trataban de convertirles en ciudadanía de segunda negándoles una asistencia adecuada.
Han sido nuestros mayores, los primeros en demostrarnos (aunque siempre lo hacen) lo que significa la solidaridad, siendo los primeros en ponerse al frente en la lucha contra la pandemia, aceptando en su gran mayoría esa vacuna, que todavía muchos rechazan y que nos protege como sociedad.
Han sido los más pequeños los primeros que han cuidado de nosotros, de los mayores, de los más vulnerables, preocupándose por sus compañeros de clase, guardando esas ganas de abrazar a abuelos y abuelas que tan importantes son en sus vidas y cumpliendo a pesar de su corta edad con todas y cada una de las recomendaciones, sabiendo que su incumplimiento podría tener consecuencias irreversibles.
Fueron los docentes los primeros en averiguar las carencias de miles de familias que no podían acceder al sistema educativo de atalaya que habían imaginado la administraciones, y los primeros que observaron que no todos los niños y niñas accedían a la educación con igualdad de oportunidades en los términos propuestos e idearon todo tipo de estrategias para que nadie quedara atrás.
Fueron cajeras, reponedores, camioneros, agricultores y ganaderos, quiénes nos demostraron que son vitales para nuestra existencia, que pusieron en marcha la logística necesaria para que durante nuestro confinamiento no faltara de nada.
Fueron los periodistas, muchas veces olvidados, y sobre todos los de a pie, quienes inventaron una nueva forma de narrar aquello que ocurría, quiénes trasformaron las palabras para que todo fuera más comprensible y accesible, y que sin descanso buscaron lo malo, pero también lo bueno para darnos esperanza. Que inventaron nuevas formas de comunicación y de información.
También fueron miles y miles de personas, la lista es interminable, quiénes llegaron siempre antes, organizándose para llegar a esa España Vaciada, y para todo aquello que pasaba inadvertido para los ojos que miran desde la centralidad de un país, autonomía o provincia.
Y sí, los políticos llegaron tarde a todo. A pesar de ver como estaba reaccionando la sociedad, muchos no supieron estar a la altura, unos por llegar tarde en las medidas o por tardar meses en comprender que en plena pandemia no se puede echar a la gente de sus casas, dejarles sin luz y agua o sin recursos económicos. Otros por buscar votos, no concibiendo la gravedad del problema e inventando ficciones para una sociedad que tenía problemas reales.
Dejamos atrás el 2020 que nunca quisimos, pero debemos quedarnos con lo que surgió: la solidaridad. Solidaridad que en 2021 no podemos olvidar. Puede que este año acabemos con la emergencia sanitaria, pero la emergencia social y económica no tiene una vacuna como la del covid.
Los políticos tendrán que estar a disposición de las mayorías sociales y no de las minorías privilegiadas. Y nosotros no debemos olvidar lo aprendido, que solo el pueblo salva al pueblo, y que solo nosotros podremos construir un 2021 y un mundo, más justo, más social y más igualitario.
Diputación
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2 enero, 2021
Nos ponemos el “poncho” y cantamos “Un pueblo es”. Qué tierno. Así parece que no ha pasado nada y la culpa de todo es de las malvadas CC. AA. La semana que viene puede pedir disculpas y perdón y exijir las dimisiones de todos los miembros de su Gobierno por mentir sistemáticamente, por negligencia criminal que ha conducido a cerca de 80.000 muertos (si algún día usted y los suyos les apetece reconocerlos) y a la mayor crisis social y económica de España en décadas, de la que tardaremos años en salir. Nos ha salvado el Pueblo, el Sistema Sanitario, las CC. AA. que han hecho lo que pudieron abandonadas a su suerte y el sistema capitalista que ha fabricado los equipos sanitarios y las vacunas. Grite conmigo:”Viva la Libertad, la Democracia y el Liberalismo”. Si fuera por ustedes, estaríamos todos muertos. Eso sí, ustedes seguirían cobrando por hacer nada. Feliz 2021 y a dimitir, no huir como Salvador Illa, para seguir viviendo de la Política.
2 enero, 2021
Solo el pueblo salva al pueblo… Qué trasnochada está usted Natalia.
¿Se la olvida que son las “malvadas” empresas farmaceúticas las que han hecho mil esfuerzos contrareloj para crear una vacuna que nos salve el pellejo.?
Pero en parte llevan razón, algunos llegamos a pensar que la llegada de Podemos iba a suponer un cambio en la política a favor de la gente de a pie. Cuando vimos al Coletas y a su señora escaparse a un chalet de millonarios e ingresar de golpe en la tan criticada casta nos dimos cuenta de a qué venían los podemitas a la política: a lo mismo que los demás.
1984 en estado puro. Desde la primera hasta la última letra.
2 enero, 2021
Por cierto, en las fotos de su artículo sólo aparecen mujeres, 7 contándola a usted. Ni un sólo hombre.
Es usted la primera que discrimina a quien la parece oportuno según su capricho. Mal ejemplo da. Luego no nos venga a dar lecciones de igualdad.
2 enero, 2021
Las fotos de los artículos no ha sido elegidas por Natalia del Barrio, sino por esta redacción. Buscamos las que puedan ser ilustrativas de las temáticas, sean de quien sean.
2 enero, 2021
Madre mía, neoliberal dice y se queda tan pancha, tenemos un sistema económico totalmente intervencionistas rumbo a la republica bananera y unos políticos con discursos tan chorras como el que deja este articulo de opinión. Resulta que ahora somos más solidarios, más guapos y más altos, con unas cifras de paro bestiales, un montón de negocios en la ruina y una subida de impuestos ya lanzada para seguir pagando un circo que ha dejado a una gran parte de la población rondando el umbral de la pobreza, si eso es solidaridad. Ahora, lo mejor de todo, la única solución que plantea esta buena señora, solo el pueblo salva a el pueblo, me he quedado flipado. A ver si empezamos a pensar en términos globales y nos dejamos de sandeces, que los populismos son muy peligrosos, con independencia de quien los utilice, mucho cuidado con tomar el pelo a la gente del pueblo que no somos tontos.
2 enero, 2021
Vaya, el marxismo cultural está más extendido de lo que pensaba.
Antonio Gramsci hizo bien las tareas.
Bueno, la verdad es que me importa muy poco si aparecen sólo mujeres, o sólo hombres, o más mujeres que hombres o al revés. Pero como la señora Natalia y otras tantas de ideas parecidas están siempre tocando la moral con las dichosas cuotas hombre mujer y sacando punta a todo pues no está mal darlas un poquito de su propio jarabe.
Más valía que hablaran de personas y dejaran de dividir y enfrentar a hombres VS mujeres.
Están sembrando el odio y el enfrentamiento en la sociedad (y encima dicen que luchan por la igualdad…)
Por cierto, lo de las fotos ha quedado claro que las han puesto ustedes. El texto de quién es? Porque estando en el blog de doña Natalia induce a pensar que todo el artículo es suyo. Me gustaría tenerlo claro por dirigir mi crítica al autor o autora real del escrito.
Un saludo.
2 enero, 2021
El pueblo bla bla bla, la gente bla bla BLO, la pandemia no la puso ningún gobierno, no se estaba preparado y es normal. Y si salimos para delante no es por los que presiden, es por los curritos de siempre. Que somos los que pagamos el pato. No hagamos demagogia barata, hagamos autocrítica.
2 enero, 2021
En los países social comunistas no ha habido pandemia ? Por qué Natalia parece defender que solo los neoliberales o capitalistas han fallado en su gestión…está muy bien homenajear a toda la sociedad al afrontar el covid..pero utilizar este homenaje de manera partidista apropiándose de la bandera ” pueblo” para un bando es mezquino…si de verdad quieres una sociedad más justa y más social y más igualitaria empieza por denunciar los privilegios de la casta política ( incluidos los fachitas y los comunazis ) tales como pensiones escandalosamente vitalicias tras dejar el poder, aforamientos de los que ahora se benefician,puertas giratorias, enchufes a dedo de esposas parientes y amigos..ect ect…y exige responsabilidades a todos los que han engañado en esta pandemia ( como el don Simon que decía que no pasaba nada por ir en el metro sin mascarilla)..solo te ha faltado decir que el pueblo unido jamás será vencido..a menos que haya interesados en crear división y conflicto..¿Recuerdas cuando animaste a una parte del pueblo a manifestarse en contra de perimetrar Vallecas para detener el contagio? Cuando cerraron otros barrios no dijiste nada..una vez más la utilización de la pandemia con fines comuna zis ,…( Los del bando contrario también lo hacen ojo)..así nos va
2 enero, 2021
Jajajajajaja,…… “solo el pueblo salvará al pueblo”……. jajajajaja…… pero que “cursi” es Usted, Doña Natalia.
La LIBERTAD salvará al pueblo.
Que ocasión tan bonita que ha perdido Usted, Doña Natalia, para pedir la dimisión y poner bien a parir (como merece) a uno de esos políticos que “llegaron tarde” según Usted. Si, ese que está pensando,…… su Marques de Galapagar, que veo que se le olvida que fue el responsable del área social, y en particular de las residencias desde el 19 de marzo.
¿De verdad piensas que 2020 es el peor año en la vida del susodicho Marqués?……. ¿y de su consorte la ninistra de igualdá?…… jajajajaja…… nombramientos, promesa de lealtad al Rey para pasársela por el forro, estado de alarma, confinamientos, CNI, ……. mas confinamientos, 25 Guardias Civiles en su mansión, coletas rata y se deja moño, mas estado de alarma, le dan RTVE, 100.000 pavitos…… aylereletirititrantrantran.
2 enero, 2021
Que pava y cansina… Aburre con su discurso casposillo. Será la casta?
2 enero, 2021
Natalia, el problema continúa. Ortega ya lo decía :«España se arrastra invertebrada, no ya en su política, sino, lo que es más hondo y sustantivo que la política, en la convivencia social misma».
4 enero, 2021
Feliz 2021,Natalia y enhorabuena por las pasiones que desatas en los ignorantes tardofranquistas.
Un abrazo
LP
4 enero, 2021
jajajajajaja…….. que sería de usted sin Franco, Peñalosa.
Feliz año, comunista.
4 enero, 2021
Feliz año para todo los comunazis!!..en el 2021 a ser posible cuidad las ciénagas de las que bebéis!!! Paz para to@s
4 enero, 2021
Para ingresar en un frenopático están los comunazis.
8 enero, 2021
Creo que Trump dijo eso de “Sólo el pueblo salvará al pueblo antes de asaltar el Capitolio sus mariachis. Propio de dictadores de todos los bandos.