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Reguera: “el verano nos da tiempo para prepararnos mejor frente al coronavirus”

En un teleforo auspiciado por la Fundación Caja Rural y que convocó en Zoom a más de 80 segovianos, el virólogo segoviano Juan Reguera se puso el traje de divulgador para explicar lo que se sabe  lo mucho aún que no del SARS-CoV-19, así como las previsiones del fin de la pandemia, que a juicio del virólogo llegará en 2021 con el descubrimiento de la oportuna vacuna. “Soy optimista, el virus inmuniza y eso es garantía de que una vacuna será posible, otros virus, por ejemplo el del Sida no dan inmunidad, pero este sí”, explicaba.

Pero Reguera advierte también de la clara posibilidad de un rebrote en octubre o noviembre. “La situación ha mejorado, también por el verano, no se expande tan rápido como antes, y eso nos va a dar tiempo para prepararnos mejor”. ¿Prepararse cómo? Una de las claves será disponer del suficiente número de tests para, llegado el momento, efectuar un diagnóstico rápido entre la población y discernir tu contagias, tú no. Los que contagien deberán aislarse y el resto seguir con su vida, eso sí, siguiendo unas prevenciones razonables.

Por ejemplo airear en abundancia, imitar a los abuelos y ventilar los espacios cerrados. No en vano “en los ambientes cerrados, en los sistemas de ventilación cerrados, es donde el virus se acumula y se acumula. En la calle el riesgo no es muy alto. Evitar aglomeraciones a nivel nacional, trabajar desde casa siempre que se pueda…”, explicaba el virólogo.

Concluida la presentación Reguera se enfrentó a las preguntas de los tele-asistentes. Achacó a la proximidad con Madrid del impacto en Segovia, en la movilidad entre ambas capitales, así como a que el pequeño hospital local, y el carácter más social de Segovia, incrementaron la propagación. También rompió algunos tópicos. ¿Por qué las mascarillas antes no eran aconsejables y ahora sí? “Porque en principio había pocas y caras y se necesitaban en los hospitales, conforme las circunstancias cambian hay nuevos enfoques”, dijo.

Juan Reguera, trabajando en el laboratorio de biología molecular de Grenoble ganó en 2016 el Premio Bettencourt Schueller, dotado con 300.000€ para el desarrollo de proyectos de investigación. Eso le permitió montar en Marsella una línea específica de investigación del virus chikungunya. Destaca la necesidad de no dar de espalda a la investigación. “Si se hubiera seguido investigando en 2003 con el SARS Cov, como es muy parecido al covid, ahora tendríamos fármacos, probablemente la vacuna llegaría más rápido, sabríamos más”…

 

Author: Redacción

Acueducto2. Noticias y actualidad de Segovia.

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