Dos centenares de vecinos de Aldeanueva, Juarros de Voltoya, Coca, Nava de la Asunción, Navas de Oro, Nieva, Melque de Cercos, Moraleja de Coca y Santiuste de San juan Bautista, llevaron a la capital su protesta contra la autorización por parte de la Junta y el consistorio de Adeanueva del Codonal de una planta de reciclaje de residuos. A juicio de los vecinos, la proximidad de la futura planta con el río Voltoya, de hecho a ubicar en terrenos ribereños cíclicamente anegados por el río, la convierte en un peligro tanto para los vecinos aguas abajo del embalse, como de los acuíferos y de los riegos utilizados por muchos cultivos de la zona, incluidas las viñas de Nieva y Santiuste.
“Es un riesgo para la salud de las personas y de todo el ecosistema de ribera, animales y plantas”, explicaban los portavoces de la plataforma Voltoya sin mierda, creada a imagen y semejanza de la que tan exitosamente ha combatido los olores y prácticas anti-ambientales en Fuentepelayo. De hecho, y junto a los riesgos ambientales, lo que más temen los vecinos es la generación de olores, que también acusan al anterior alcalde de Aldeanueva de haber autorizado el expediente de espaldas a los vecinos.
Y es que la futura planta, cuya construcción no se ha iniciado, parece un calco de la de Fuentepelayo en lo tocante a los residuos a reciclar, lodos de depuradoras, residuos ganaderos y cárnicos, del textil… “No queremos que el medio rural se convierta en el vertederos de la mierda que no quieren en otros sitios”, explican los vecinos.
La plataforma ha recogido a través de change.org 1.200 firmas y anuncian nuevas movilizaciones contra el proyecto.
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