La alarma se disparó hace un mes, el 6 de junio, cuando en condiciones meteorológicas normales un gran pino piñonero del parque del Peñascal, en Segovia capital, se venía abajo, felizmente sin causar daños personales. Estábamos bajo confinamiento y el parque, habitualmente tomado por niños, cerrado a cal y canto. Ya los primeros indicios apuntaban a que el ejemplar caído presentaba problemas en las raíces. En esa zona el suelo de tierra es escaso, con roca a pocos centímetros, con lo que las raíces no anclan bien y a medida que crece el árbol se multiplican los problemas de estabilidad.
Un estudio de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Segovia con prospección por rádar determinó que había que talar urgentemente cinco pinos piñoneros más, en tanto que los otros tres ejemplares, aunque no presentaban problemas tan graves, no admitían otra solución que la tala. Empleados municipales procedieron a apear el 7 de julio cinco ejemplares y el resto se talarán en las próximas horas.
La concejalía tiene previsto reponer en otoño los árboles talados, estudiándose previamente la especie más adecuada a la tipología del terreno. En nota de prensa, el Ayuntamiento recuerda que los presupuestos municipales incluyen una partida de 15.000€ en reforestación para ejecutar durante este año, con la se plantarán más de 400 árboles en la ciudad.
Diputación
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