Imagen de archivo de la visita del Guijuelo a Segovia, en noviembre pasado.
La Gimnástica Segoviana (18º, 36 puntos) ha logrado un punto en el campo del Guijuelo (13º, 41 puntos) que aunque, obviamente, no es el peor resultado posible complica aún más sus posibilidades de permanencia en la segunda B, sobre todo porque sus principales rivales, Racing Ferrol (17º, 38 puntos), Coruxo (15º, 40 puntos) y Pontevedra (14º, 41 puntos) vencieron en sus respectivos compromisos.
Así las cosas, con nueve puntos en juego y a cuatro de la permanencia —en realidad, cinco porque la diferencia de goles con el Coruxo favorece al rival— y de la promoción que marca el Valladolid B (16º, 40 puntos), la Gimnástica está obligada a vencer en sus dos próximos partidos en la Albuera frente a rivales directos como el Pontevedra, la próxima semana y el Valladolid B, la siguiente. Sólo en ese caso tendría opciones el equipo de la ciudad de que el último encuentro, frente al Adarve (10º, 47 puntos) y en tierras madrileñas se convirtiera en la final definitiva por la permanencia. Difícil, aunque aún posible.
El encuentro de este domingo, con escasas ocasiones para ambos equipos pudo haberse puesto del lado segoviano en el minuto 5 cuando Javi Marcos lanzó una falta estrellando el balón en el larguero rival en la que fue la opción más clara de gol para ambos equipos en todo el encuentro.
Tras el partido, el entrenador gimnástico, Abraham García, quiso ofrecer el rostro del optimismo dando por bueno el empate frente al equipo que “junto a la Segoviana ha sido el que ha hecho fútbol en la categoría este año” y confió en lograr la victoria en los dos próximos partidos en casa. “Si ganamos esos dos partidos estamos fuera”, proclamó.
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