Un muladar, pintura de Manuel Sosa.
Cinco grupos de acción local, Asodebi (El Bierzo), Adriss (Sierra Salamanca), Montaña Palentina, Segovia Sur y Valladolid Norte suman fuerzas para impulsar los muladares, de manera que buitres, lobos y demás fauna carroñera puedan volver a la situación “pre-vacas locas”. Cabe recordar que a finales de los 90, una epidemia de Encefalopatía Espongiforme se saldó con la obligatoriedad de los ganaderos extensivos de procesar los cadáveres animales en hornos habilitados, terminando con la costumbre inmemorial de los muladares. A consecuencia de esta estúpida medida, sin justificación alguna y que simplemente encareció los costes de la ganadería extensiva, se inició un declive de las aves carroñeras y de los ataques a los ganados (especialmente por parte de lobos). Finalmente, un decreto de 2013 derogó la prohibición de los muladares.
El 28 de julio, la Casa del Sello de Paños acogió una jornada para coordinas los trabajos que estos cinco grupos de acción local desarrollan desde 2014 para reimplantar los muladares e impulsar en sus territorios el Decreto 17/2013 de 16 de mayo, relativo a los SANDACH (subproductos de animales no destinados al consumo humano) para la alimentación de especies necrófagas. Como explican en nota de prennsa. “Este decreto ofrece la posibilidad a las ganaderías no intensivas de poder dejar los cadáveres de los animales en las parcelas donde se hallasen pastando en el momento de su muerte, volviendo así a una situación “pre-vacas locas”. Pudiendo estos restos cárnicos o deshechos ser aprovechados por especies necrófagas de interés comunitario como buitres, milanos y el lobo, entre otras especies. Sin duda estas prácticas contribuirían a disminuir el número de ataques de lobo a las explotaciones ganaderas y la presencia de aves carroñeras permitiría el incremento de la actividad turística de la observación de aves”.
Descoordinación administrativa
Antes de la jornada los participantes mantuvieron con el Colectivo Azálvaro una visita al muladar que esta entidad gestiona en El Espinar. Posteriormente ya en la Casa de el Sello asistieron representantes de los GALs, ganaderos, representantes de OPAs y de empresas turísticas de los territorios participantes en FANEGA al acto final de esta Jornada; donde se transmitieron las principales conclusiones surgidas de estos meses de trabajo común. Siendo la más destacable la falta de coordinación entre las Administraciones Públicas implicadas (Consejería de Agricultura y la de Medio Ambiente) y la falta de información que el administrado, el ganadero, tiene de esta normativa.
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