La mujer asesinada en Foz será enterrada el domingo

Posted By Redacción on 26, Abr, 2014

Los restos mortales de Elena Rodríguez Quiroga, la mujer de 71 años, presuntamente asesinada por su esposo en Foz (Lugo), ya se encuentran en el tanatorio de Segovia, donde llegaron a media noche para ser velados durante toda la jornada de este sábado, 26 de abril, mientras que será a primera hora del domingo, a las 8.30, cuando se celebrará el funeral en la iglesia de San Millán. Posteriormente será enterrada en el cementerio del Santo Ángel de la Guarda, según han explicado fuentes de la familia.

Aunque la intención de los familiares —por expreso deseo de la fallecida— era incinerar el cuerpo tras el funeral, no podrán hacerlo al menos hasta la próxima semana por existir prescripciones judiciales que lo impiden y a la espera de que el informe forense sea definitivo. El caso se sigue en el juzgado número 2 de Viveiro (Lugo).

Los cuerpos de Elena Rodríguez y de su marido, Manuel Gago, fueron hallados a las 20.30 horas, cuando uno de los hijos del matrimonio acudió a la casa acompañado por la Guardia Civil, a la que alertó tras pasar toda la tarde tratando de telefonear a su madre. La mujer, con heridas de bala, estaba en una habitación, mientras que Gago eligió otra estancia para quitarse la vida.

El hombre, un reputado ingeniero ya jubilado de su empleo en la fábrica de aluminio, Alcoa, y enormemente diestro en la ejecución de trabajos de precisión, utilizó una pistola de bengalas que habría manipulado para convertirla en un arma capaz de disparar balas. No obstante, esa modificación se habría realizado hace años, según sus familiares, con la intención de “disponer de una defensa” en la finca en la que residían y nunca hasta ahora se habría usado el arma.

Obituario

Durante la jornada del jueves, la alcaldesa de la ciudad, Clara Luquero, emitió un texto de repulsa a la violencia y pésame a la familia de Rodríguez: “Como alcaldesa y, en representación de todos los segovianos, quiero transmitir, en primer lugar, mi repulsa y condena por la muerte, víctima de la violencia de género, de la segoviana Dª. Elena Rodríguez Quiroga en Foz (Lugo). Por otra parte, he trasladado todo mi apoyo y cariño a la familia de la víctima en estos duros momentos y transmitido las condolencias de todos los miembros de la Corporación Municipal”.

Por otra parte, la familia de la fallecida ha remitido un texto a modo de obituario que reproducimos íntegramente:

Elena Rodríguez Quiroga era una segoviana de esas, como tantas que, siendo muy joven y enamorada, un día dejó su ciudad natal para acompañar a su marido allá donde el trabajo los llevara al mismo tiempo que formaba una familia y velaba sin descanso por sus hijos para sacarlos adelante: abnegada, generosa, sacrificada y protectora.
Elena era una mujer de familia. Crió tres hijos que hoy la lloran y que saben lo que fue: “una buena madre que lo hizo bien”. Preparaba ahora, al fin, su vida para una dulce vejez, pero el plan, el primero en el que ella era protagonista, ha quedado tristemente frustrado.
Vivió en Asturias para recalar después en Foz (Lugo), donde pasó 35 años. Y a pesar de ello, su casa en el pueblo gallego olía a Segovia, porque allí vivía una segoviana que en realidad nunca abandonó su tierra y ejercía de embajadora activa en todas las ocasiones. Algunas pequeñas inversiones, su familia y mil amigos la ataban firmemente a este lugar y ella nunca los desatendió. Cualquier momento era bueno para regresar a una ciudad que amaba con devoción —las calles de San Millán la vieron crecer y su recuerdo pervive en el barrio, entre sus vecinos— derrochando ese desparpajo sonriente que la acompañaba a todas partes y que contagiaba a quien tocaba.
Era difícil encontrar en su rostro un mal gesto, una mueca de dolor o de rabia. La sonrisa y la risa eran sus tarjetas de presentación y los principales elementos para su recuerdo. No hay lugar a la tristeza porque no era amiga de lutos. Una sonrisa, un beso y un guiño cómplice para Elena Rodríguez Quiroga.
Descanse en paz.