Bien pensado tengo lo dicho. No cambio ni una palabra.

Es vergonzoso la riqueza de la Iglesia. Va contra sus propios principios.

Qué bonita es la teoría, pero hay que ver si alguien tiene dinero suficiente y es capaz de comprarlo y mantenerlo sin ayuda públicas, como se le demanda a la iglesia católica.

¿Cuánto puede costar la catedral? ¿La compramos con dinero público? ¿Con tus impuestos para dárselo a los pobres? Podríamos dejar de lado la demagogia y pensar un poco antes de abrir la boca.

Por cierto, es vergonzoso la cantidad de bienes inmuebles y riqueza que tiene la Iglesia en este país. Eso es impropio de gente que se las da de cristiana. Que vendan todo y se lo den a los pobres como dijo Jesucristo, mientras no lo hagan para mí tienen credibilidad cero.

Por una vez estoy de acuerdo con el señor Peñalosa.

Esta vez creo que lleva toda la razón.

Lo cierto, es que bajo el yugo de su estandarte de la hoz y el martillo, a lo largo de la Historia millones de personas han muerto, y otras han sufrido tortura o persecución.

Hay que tener mucho estómago para defender semejante ideológia política.

Del pasado más rancio y casposo también es Peñalosa, y hay que aguantarle cada dos semanas el rollo soviético que quiere imponer en la sociedad democrática y libre.

Cierto. Casa vez más cuarteles cerrados en los pueblos. Gracias Marlaska.