El Ayuntamiento de Segovia ha colocado una placa en la plaza de Día Sanz en la que se recuerda en español, inglés y francés que está prohibido subirse al Acueducto. Como anunció la alcaldesa, Clara Luquero, se trata de una medida de carácter preventivo para evitar que turistas o segovianos suban a los arcos más bajos del monumento situados en esta plaza. Además, en la placa se indica la existencia de La Ley de Patrimonio Cultural de Castilla y León que protege, entre otros, al Acueducto de Segovia y considera un delito cualquier daño que se le pueda ocasionar. Una segunda placa, de mayor tamaño, pero el mismo mensaje “Prohibido subir al Acueducto” y también en los tres idiomas, castellano, inglés y francés, se situará enfrente, sobre un mástil, abarcando así todo el área de influencia.
Y es que hay mucho tonto que, además de serlo contra el patrimonio, lo es contra sí mismo, corriendo el riesgo de acocorocatarse acueducto abajo. Aunque algunos lo tendrían bien merecido. Como el tontaco del mes, este de la categoría superlativa, que además hubo de jugarse el físico para culminar su burrada, una enorme pintada en el talud de la cuesta de San Juan, de tremendo impacto en las vistas a la zona y que costará sus buenos cientos de euros borrar. ¿Por qué habrá tanto tontorrón por el mundo, Jambo?
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23 abril, 2016
¡¡¡Manda lo que hacemos para salir en una foto!!!
23 abril, 2016
Más vigilancia y menos cartelito. He leído estos días que somos, proporcionalmente a la población, una de las ciudades (sino la ciudad) que más polis locales tenemos. Pues a ver si, ademas de para ponerse galones algún mando (en chaqueta y nómina), sirve para algo más.