El Real Sitio de San Ildefonso tiene un serio problema con el agua. Su principal abastecimiento, los 260.000 metros cúbicos de el Mar, en los Jardines de La Granja empieza a mermar en junio hasta que en otoño las lluvias vuelven a normalizar la situación. Un marcado estiaje que en el pasado ha acarreado crisis de suministro, motivando incluso la presencia de camiones cisterna para abastecer el riego de Los Jardines o de la cristalera Verescence.
Buscar soluciones será el objetivo de la mesa del agua, convocada para el 15 de diciembre, y que contará con la participación de todos los grupos políticos municipales, representantes de la Confederación Hidrográfica, Verescence, Patrimonio Nacional, Aquona y asociaciones de regantes. El alcalde granjeño, José Luis Vázquez, declinó hacer declaraciones a acueducto2, llegando a negar la convocatoria del evento, incialmente previsto para el 1 de diciembre pero que se pospuso al 15 por cuestiones de agenda.
Entre el Parador, la cristalera, los regantes, Patrimonio Nacional y la población aumentada del periodo vacacional, el Mar no da abasto. “Existe un convenio con la mancomunidad de La Atalaya y una infraestructura que posibilita la captación desde el Ponton, a través de la ETAP El Maderuelo, pero el agua es de peor calidad y cara, también hay problemas técnicos para distribuir ese agua en los barrios más al Norte de La Granja”, reconoce el cabeza de la oposición, el concejal del PP Juan Carlos Gómez. También se dispone de un nuevo depósito, de 6.000m3, en el Nuevo Chato, pero que no ha sido recepcionado. En el trasfondo, está la discrepancia en la aceptación de las obras ejecutadas por la CHD y que el consistorio granjeño considera inacabadas. Otro problema añadido es el bombeo de agua directa del Pontón a el Mar, que se construyó básicamente con la finalidad de alargar el calendario de puesta en marcha de las fuentes del Real Sitio, uno de los principales atractivos turísticos de San Ildefonso. Sin embargo, y aunque en principio este circuito no consume agua (la misma que sube vuelve a bajar, al menos en teoría) al combinar usos domésticos con los recreativos y al estar pendiente el municipio de que se complete el circuito de conexión con El Maderuelo, el Mar no puede actualmente limitarse a estar al servicio de Patrimonio Nacional.
10 diciembre, 2016
Un acta notarial, encargada por el general Fuertes de Villavicencio en 1971, demuestra que el agua de El Mar, históricamente, ha sido mayoritariamente para suministro municipal (c. 90%) y el resto para riego de Palacio (c. 10%). En 1982 no llegó a registrase el acuerdo de Ministros que adscribió toda el agua de El Mar a Patrimonio Nacional.
En enero de 1991 y en el Palacio de Oriente, el Ayuntamiento de San Ildefonso (con Alcadesa de Izquierda Unida), Patrimonio Nacional, la Confederación Hidrográfica del Duero, la Diputación de Segovia y el Ministerio de Obras Públicas firmaron un acuerdo para traspasar la gestión del agua urbana al Ayuntamiento, cuando las correspondientes infraestructuras estuviesen en regla, así como para mantener su derecho histórico a caudales de El Mar y estudiar una alternativa a la demanda estival.
En marzo de 1993, el Ayuntamiento (con Alcalde de PSOE) aceptó la gestión del agua municipal sin adecuar las infraestructuras. Poco después la privatizó renunciando al derecho histórico y, además, aceptando como alternativa al suministro urbano desde El Mar un pequeño depósito nuevo y el bombeo de agua desde el municipio de Palazuelos, almacenada en el Pantano del Pontón y potabilizada en la etap La Atalaya. Esta alternativa también incluye un circuito de bombeo independiente a El Mar y reserva este azud a riego y una ampliación del calendario histórico de sus juegos de agua. La mencionada alternativa se proyectó y realizó durante años que, en parte, incluyeron como Consejeros de Patrimonio Nacional al actual y al previo Alcalde de La Granja.
En el 2009, durante el período de alegaciones a la aprobación inicial del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), solicité en el Juzgado su suspensión cautelar por no estar garantizado el suministro de agua municipal. Se denegó la suspensión en base a informes institucionales que aseguran el suministro.
El vigente PGOU asume la alternativa pero indica que se reserva el derecho a recurrirla. En junio de 2015 el Ayuntamiento dio curso judicial a esa reserva. En el 2016 el pleno municipal dio el visto bueno a un acuerdo para solucionar males de los bombeos. A día de hoy, el Ayuntamiento no ha dado licencia de uso al mencionado nuevo depósito ni ha puesto en funcionamiento el circuito de bombeo que lo complementa.
En 2013, un bando municipal declaró no apta para consumo humano el agua que mezcla en El mar la de arroyos serranos y la de bombeo para aumento del calendario histórico de juegos de agua. El otro bombeo avaló recalificaciones de suelo mediante hipótesis de altísimo crecimiento demográfico que la realidad ha dejado en decrecimiento. Estas hipótesis fueron rebatidas por Patrimonio Nacional e incontables personas, entre las que me cuento.
En noviembre de 2015 se denegó mi recurso de reposición contra la supresión del derecho urbano a la mayoría del caudal de El Mar. La denegación se basa en el decreto ministerial de 1982 que lo adscribe a Patrimonio Nacional y dice que el resto de mis argumentos para mantenerlo no competen al cambio. Ese resto de argumentos corresponde a un valioso aspecto famoso de El Mar ─es un BIC que hasta 2013 solo se ha llenado y dado servicio mediante la gravedad─ y en el expediente administrativo no está el informe técnico sobre el efecto negativo que pudiera ocasionar en el plomo escultórico la ampliación del calendario de los juegos de agua. También alegué que el bombeo empeora la sostenibilidad energética: la plataforma de bombeo perjudica al paisaje del Pontón y la incorporación del bombeo rompe la calma de El Mar y remueve el lodo de su fondo.
Cualquier puente de invierno deja harto probado que La Granja sin y con juegos de agua La Granja atrae turistas…
El Alcalde, en noviembre de 2016, a mi solicitud de ese informe técnico sobre compatibilidad del plomo escultórico con el futuro calendario de sus juegos se limita a decir que tiene plena confianza en los técnicos responsables de esas esculturas. Los juegos de agua son un ritual festivo, sean o no de la procesión de La Octava del Corpus. Es obligado orientar la divulgación por vías acordes con la primera bienaventuranza ─dar de beber al sediento─ y con el estanque local que incluye a Latona castigando a campesinos y campesinitos, que negaron y enlodaron el agua necesaria para la sed de Diana y Apolo, metamorfoseándolos en rana.
El 15 de diciembre, o cuando se acuerde, por invitación personal del Alcalde, asistiré a la mesa del agua.
10 diciembre, 2016
Espectacular aportación, Rita. Muchísimas Gracias.
10 diciembre, 2016
Un comentario y una aportación magnífica. De quitarse el sombrero, estupendo resumen de la situación.