El parking de José Zorrilla cierra al público y ya es solo para alquiler

Posted By Redacción on 3, Nov, 2015

La concesionaria del parking de José Zorrilla, la UTE Pygsur y Collosa, vinculada al Grupo Llorente, ha cumplido sus anuncios de cerrar el equipamiento al público, cesando en sus servicios de parking por rotación. El 3 de noviembre, operarios de la empresa fijaban carteles informando que, en adelante, el parking solo admite vehículos en alquiler de plaza o por abonos. A efectos públicos el parking se considera cerrado.

Por la mañana, Gonzalo Llorente, ejecutivo del Grupo Llorente, organizaba el nuevo estatus del parking en tanto funcionarios del ayuntamiento segoviano tomaban nota, eludiendo cualquier declaración. Igualmente desde el gabinete de Alcaldía, donde explicaron que la alcaldesa estaba en Madrid en la presentación del MUCES y se remitían a declaraciones de Clara Luquero de dos semanas atrás.

Grupo Llorente: “Lo que queremos es irnos”

Quién sí habló fue Gonzalo Llorente. “Lo que queremos es irnos”, explicaba, “nuestra intención es resolver el contrato y que el ayuntamiento haga con él lo que quiera, que lo explote directamente, lo adjudique a otra empresa, lo que quiera”. Para el directivo de la UTE el tiempo de la negociación ya ha pasado.

Llorente recordó que ya en la fase de proyecto la UTE consideraba que el equipamiento era inviable en las condiciones previstas por el ayuntamiento. “Pese a todo nos forzaron a seguir, cuando nuestros estudios y estudios independientes demostraban que en las condiciones de entonces no había mercado para el parking de rotación… ¿Quién va a pagar por aparcar aquí cuando hay un aparcamiento al aire libre a la vuelta de la esquina, o cuando se puede aparcar en la mayoría de las calles colindantes?”, se preguntaba Llorente, si bien añadía que la existencia de plazas de libre aparcamiento en las proximidades solo son una parte de un documento “mucho más complejo”.

En esta primera fase lo que la Collosa-Pygsur pretendían era una renegociación del convenio. Según el relato de la concesionaria, “en 2013 el alcalde de Segovia reconoció que había que reequilibrar el equipamiento” y tras diferentes conversaciones se remitió desde el consistorio una contrapropuesta. Más negociaciones y, “en última instancia, hasta decidimos aceptar esa contrapropuesta del ayuntamiento, lo pusimos en conocimiento del ayuntamiento pero no nos han contestado. Ahora, definitivamente, lo queremos es cerrar e irnos”, añadía Llorente.

Días atrás, desde el negociado de tráfico se ordenó colgar carteles en el parking informando que la intención del ayuntamiento era “mantener abierto el servicio”, conminando a los vecinos a informar de cualquier “incidencia en la prestación del servicio”. La propia alcaldesa se refirió, en un Junta de Gobierno, a la necesidad de seguir negociando. Hoy, y según alcaldía, “las cosas no han cambiado”.

Puertas cerradas

Lo cierto es que sí han cambiado las cosas. En la mañana del 3 de noviembre la valla elevadiza solo funcionaba para conductores provistos de la tarjeta de abono o alquiler. Las puertas del parking están cerradas, y los vehículos que quieran entrar o salir deben esperar a que el sistema informático abra la puerta para entrar a salir, a semejanza de lo que ocurría en horario nocturno. Los empleados de la subcontrata que realizaban el mantenimiento ya no están. Collosa-Pygsur anuló el contrato con fecha de 2 de noviembre. En la actualidad, solo el gerente trabaja en el parking.

Según explica Gonzalo Llorente, la recuperación del equipamiento por parte del consistorio está perfectamente definida en el contrato. Si el ayuntamiento quiere hacerse cargo de la explotación puede en el momento en que la empresa renuncie a seguir con el contrato. Eso sí, debería pagar a la empresa por los plazos de amortización pendientes.

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