La redacción del nuevo proyecto y el seguimiento de las obras para concluir definitivamente la construcción del único edificio del Cat —edificio de emprendedores “C”— costará 160.000 euros y deberá estar concluido en el plazo de un mes, según exigió la alcaldesa, Clara Luquero, tras la última Junta de Gobierno Local, en la que se acordó la adjudicación del trabajo al estudio de arquitectura Sánchez Madridejos.
La adjudicataria conoce bien el inmueble, ya que es la responsable de su proyecto original, además de haber sido propietaria del anterior contrato que, por el mismo concepto, el proyecto de obras y su seguimiento, suscribió en abril de 2011, en aquella ocasión, por 374.536,77 euros.
Un lustro después y con las obras aún inconclusas —la constructora quebró y el Ayuntamiento ejecutó sólo las obras de emergencia necesarias para consolidar la parte ejecutada hasta entonces— los arquitectos aceptaron la propuesta municipal de rescindir aquel contrato, por una liquidación de 38.088,49 euros, además de recuperar la garantía, 15.870 euros más.
Acto seguido, el mismo despacho se ha hecho con el nuevo contrato para modificar su propio proyecto, adjudicado en un proceso negociado al que respondieron sólo dos de las cuatro empresas invitadas, mientras que la “perdedora”, Andrés Perea Ortega, ofertó al límite del precio de licitación (174.000 euros), cumpliéndose así la “apuesta” en favor de Sánchez Madridejos que hiciera una irónica portavoz del PP, Raquel Fernández, cuando se convocó el concurso, cansada de observar como “se han pagado ya, no uno, sino varios proyectos y direcciones de obras” para el mismo inmueble.
“La paralización de las obras durante tanto tiempo ha hecho que buena parte de los equipamientos se quedaran obsoletos y algunos, ni siquiera se fabrican ya”, dijo escuetamente la alcaldesa a los periodistas para justificar la nueva contratación.
Si no surgen nuevos problemas —la construcción del edificio ha pasado por todo tipo de vicisitudes y gastos durante años— las modificaciones al proyecto de obras original deberían estar concluidas en el plazo de un mes, según los cálculos de Luquero que afirmó también que los trabajos “comenzarán inmediatamente”, en el inicio del verano.
“Vamos dando pasos para que el edificio esté disponible para el inicio del curso de 2018, que es nuestro compromiso con la Universidad Rey Juan Carlos”, que ha mostrado su interés de instalar allí las enseñanzas de su Instituto de Danza.
Diputación
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16 abril, 2016
¡’Clin, clin’, venga a tirar del fondo de faltriquera que nos sobra! Millones de euros de todos los contribuyentes (segovianos y españoles en general) enterrados en un macro-proyecto-vacas-gordas con varios edificios que se ha quedado en una construcción que se ha tragado todo el presupuesto y más. Y todo para terminar en manos privadas, en generosa almoneda de nuestros ínclitos gestores de la cosa pública. Como no hay mal que por bien no venga, algunos podrán impartir docencia danzarina más cerca de casa. Ya te digo.