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El juzgado decidirá la legalidad del nuevo reglamento de la Diputación

Minuto de silencio por Laura Luelmo al inicio del pleno.

Pleno administrativamente irrelevante en la Diputación de Segovia y cuyo principal aliciente era el pincho de los empleados al finalizar, entre villancicos y el monumental belén del patio de columnas. Pero antes los diputados provinciales debieron sortear cinco espinosas mociones y un punto de urgencia, la personación de la institución en en el pleito interpuesto por el Centrado Juan Ángel Ruiz y admitido por la sala de lo contencioso de Segovia contra el nuevo reglamento orgánico de la Diputación, aprobado en septiembre. Desde Centrados se considera que el nuevo reglamento vulnera los derechos de los grupos minoritarios. Entre otros aspectos, eleva a tres diputados el quorum necesario para formar grupo, al tiempo que merma los recursos monetarios y de personal para los grupos chicos en detrimento de los grandes. La personación contó con el comprensible voto en contra de Ruiz, el voto a favor de la No Adscrita y el PP, y la abstención del PSOE, que sin embargo y en su día votó a favor del reglamento.

En lo tocante a mociones, prosperó por unanimidad bien que retocada por una enmienda del PP la propuesta del PSOE de crear algo así como una nueva línea de ayuda a los municipios para que la Diputación subvencione bancos y papeleras. La idea es facilitar a los municipios más pequeños una subvención añadida para la compra de mobiliario urbano. De paso, repetir la jugada Caja Segovia y convertir estos elementos en soportes para la difusión de la imagen corporativa de la institución. No entrará en vigor en 2019, pero se estudiará.

Del “hágase” al “se estudiará”

En general, el “se estudiará” es el recurso que tiene el PP para enmendar las mociones de la oposición. Del “hágase” al “estúdiese” suele ser la distancia existente entre una moción que prospera y otra que no. Así que se suele imponer el “estúdiese”, no sin antes exhaustivos debates. Como el que acompañó a tres grandes clásicos de las mociones diputativas. Las relativas a política juvenil, empleo y, el clásico entre los clásicos, la creación de parques de bomberos provinciales.

Sobre los dos primeros poco que decir. En un caso se trataba de instar a la Diputación a contar con un centro de información juvenil. Actualmente, entre puntos de información y antenas hay 12 en otos tantos municipios de la provincia y cinco en Segovia capital (sí, cinco). Como recordó el diputado de Promoción Económica, Jaime Pérez, estos puntos han caído en la más completa obsolescencia sustituidos por las redes sociales, aún así, se mantienen, las más de las veces con algún apoyo de Europa. En la práctica, los puntos de información son el nombre administrativo del personal que en los municipios se encarga de coordinar los servicios a la juventud, bibliotecas, actividades… Un verdadero dinosaurio. Pese a lo cual, desde Centrados se instó a crear un centro coordinador de los puntos. Moción rechazada por el PP.

Dos del PSOE tuvieron mejor suerte y se terminaron pactando con la sustitución del “hágase” por el “estúdiese”. Uno era un plan de empleo específico para el sector agrario. Ahí la nota la puso la intervención de la No Adscrita, María Cuesta, que vino a decir que, de la mano de su hija pequeña ha descubierto la serie americana El Veterinario Paul, todo un héroe de la ganadería que, a juicio de Cuesta, fomenta el amor al campo, y que ya quisiera ella que en Segovia se fomentasen tales valores ganaderos. Y más, que dijo también que con las modernas tecnologías y el GPS el trabajo de campo ya no es lo que era y se tiene mucho tiempo libre, y que con buena publicidad, tipo el citado veterinario Paul, se mejoraría la imagen del sector. Puede ser, el caso es que los diputados más de pueblo (los que hablan de tractores) no sabían donde meterse mientras intercambiaban miradas de vergüenza ajena.

El clásico de los bomberos

Llegó el momento del clásico entre clásicos. Moción del PSOE relativa a la dotación de parques de bomberos en la provincia con cargo a la Diputación. Se trata de un tema que aparece en forma de moción cuando hay algún siniestro de campanillas, algo que afearon al PSOE tanto desde Centrados como la propia Cuesta y el PP. La moción venía a decir que se proyecte

Se lo pusieron fácil al portavoz del PP, José Luis Sanz Merino, que recordó que una moción calcada ya se aprobó en 2016. Y que precisamente en 2012, a resultas también de otra moción similar, la Diputación encargó un estudio de viabilidad, que San Merino esgrimió. En la misma se cifra en 1,8 millones el coste anual de un parque para tres bomberos, a lo que habría que añadir el mantenimiento de los parques voluntarios, los convenios con los profesionales en vigor, y la construcción de nuevos cuarteles. Dijo que a todos les gustaría tener muchos más parques de bomberos pero retó al PSOE a ver de dónde se sacan dineros para meterlos en bomberos. La cosa quedó en un aguado “estúdiese”.

Y se terminó con un abstruso debate sobre la conveniencia, a propuesta de Centrados, de instar a la Junta a cerrar los expedientes BIC incoados de patrimonio segoviano. La gran mayoria de los BIC segovianos de los últimos 30 años son BIC incoados, no cerrados, con lo que siguen -como recordó el presidente Francisco Vázquez– devengando IBI, dejaran de pagarlo cuando se cierre el expediente. Desde el PP no se quiso atender la petición, diciendo que es cosa de los ayuntamientos (en algunos municipios patrimoniales, la declaración “cerrada” de BIC puede ser toda una sangría, piénsese en Riaza), y que a lo más estaban dispuestos a solicitar es que se cierre el relativo al Teatro Juan Bravo, y IBI que se ahorra la casa (que debe ser un pico). No hubo manera de entenderse. Moción rechazada.

 

Author: Redacción

Acueducto2. Noticias y actualidad de Segovia.

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