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El 25 de mayo, a votar

Colaboración a cargo de María Isabel Caballero Expósito. Portavoz del grupo municipal socialista del Ayuntamiento de San Cristóbal de Segovia

La dinámica política tiene aspectos curiosos. Los políticos, inmersos la mayor parte del tiempo en procesos electorales, acarician oídos y ojos de los ciudadanos con palabras que suenan como cantos de sirena. Luego, una vez obtenido el poder, los políticos electos (no todos, a decir verdad) se ocupan en hacer ver a la ciudadanía que las sirenas no existen, y que para que el barco navegue, necesitan su “cooperación”, remando como condenados a galeras.

Naturalmente, la reacción de los ciudadanos es abominando de políticos y política. Por descontado, la inmensa mayoría no participa activamente. Manifiesta aborrecer los partidos políticos. Critica duramente a quienes se implican: miembros de los partidos y cargos públicos. No digo que algunos no se lo merezcan, y que recibir críticas forma parte de la necesaria higiene pública.

Sin embargo, la crítica es una actividad pasiva. Quien sólo critica, no se equivoca nunca. Sólo actuando es posible intervenir sobre la realidad. El movimiento se demuestra andando. Y se puede entender que no se quiera participar activamente. Es duro, consume muchas horas y con mucha frecuencia, es muy ingrato, por las razones apuntadas. Recibir críticas es saludable y necesario; sin embargo, muy difícil de soportar, no digo nada cuando son injustas.

Menos justificable es no votar. Quienes no votan esgrimen excusas del tipo: “todos son iguales”, “da igual quien salga, el poder está en otro lado”, etc. Primero, no es verdad que todos los políticos sean iguales. Sí es parcialmente verdad que hay más poderes que el político. Pero deben saber que la política sí tiene mucho poder, muchísimo además. ¿Acaso se parecen nuestras sociedades a las de hace cien años? Ni siquiera a las de hace treinta. Esta transformación ha sido posible gracias a la política. Y la legitimidad de la acción política se la da el respaldo en las urnas. Votar es nuestra responsabilidad como ciudadanos.

Hacerlo en estas Elecciones Europeas es más necesario que nunca. Puede que muchos ignoren que buena parte de la legislación europea es directamente aplicable en los Estados Miembros, y que la que no es directamente aplicable, obliga a los Estados a elegir el instrumento jurídico para que lo sea. Puede que tengan la impresión que quienes toman las decisiones en Europa son Seres de Otra Dimensión. No es así. En las Instituciones Europeas está presente y representada la política nacional, la mayoría de estas personas son sobradamente conocidas. Desde el Tratado de Lisboa, el Parlamento Europeo, al que elegimos en estas Elecciones, adopta nuevas y muy importantes decisiones, como participar en la elección del Presidente de la Comisión. Conocer todo esto y más, saber qué nos estamos jugando, también es responsabilidad de los ciudadanos.

Es de suma importancia elegir a quienes nos representan en esas Instituciones. No se dejen engañar con ese canto de sirena de “la herencia recibida”. Las decisiones sobre cómo gestionar la crisis se toman en Europa, así viene siendo desde el año 2008 en que se hizo patente. Lo sabemos muy bien  griegos, portugueses y españoles, los franceses están empezando a enterarse. Y en sus Instituciones gobierna la derecha europea. No digan que unos y otros son lo mismo ¿no lo notan sus bolsillos? ¿y sus derechos y libertades? Podrán criticar al PSOE lo que quieran, y llevarán razón en ocasiones, pero no me negarán que lo echan de menos.

El programa del PSOE está al alcance de quien quiera conocerlo. Aquí no es posible plasmarlo. Es muy extenso. Hay mucho que cambiar. Mucho que hacer. Les invito a buscarlo, a leerlo, a pensarlo. Cuánto se haga por uno mismo, resulta mucho más gratificante.

Y voten al PSOE, porque OTRA EUROPA VA A SER POSIBLE.

María Isabel Caballero Expósito. Portavoz del grupo municipal socialista Ayuntamiento San Cristóbal de Segovia

Author: Redacción

Acueducto2. Noticias y actualidad de Segovia.

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